Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

viernes, 29 de noviembre de 2013

CAPACIDAD DE OBSERVAR Y DISCERNIR



Si volvemos la vista atrás, experimentamos que los tiempos han mejorado. Sin embargo esa mejoría no significa ni se traduce en más cercanía al Señor. Diría que el hombre ha progresado materialmente, pero quizás se ha estancando espiritualmente. Esto se traduce en un mundo mejor cualitativamente pero no éticamente.

Mientras la técnica y los avances científicos aumentan y suben el nivel de vida humano, los valores éticos y morales empiezan a desmoronarse y a ser usados según criterios de cada uno. Se pierde la libertad en aras de entenderla como libertinaje, hacer cada cual a su antojo lo que cree y entiende. 

Aparece la cultura relativista y el mundo empieza a desmoronarse. ¿Pueden ser esas señales que nos pongan en guardia y alerta? Estemos atentos y pidámosle al Espíritu la sabiduría de saber distinguir dichas señales, porque la Palabra de Dios, nuestra guía y camino, nos advierte de estos signos.

No nos dejes Señor en la ignorancia o en el ostracismo de mirar para otro lado. Despierta nuestro sentidos y aviva nuestra inquietud con la esperanza y alegría de sabernos en Ti salvados y de advertir esas señales que nos indica, al igual que llega el verano, tu venida según tu promesa.

jueves, 28 de noviembre de 2013

SABEMOS QUE SU PALABRA NO FALLARÁ



Sabemos que vendrá, vendrá para poner todo en orden. Esa es nuestra gran esperanza fundada en su Palabra. Palabra de vida eterna y que siempre ha tenido debido cumplimiento en el Señor, el Hijo de Dios vivo. En Él podemos confiar y estar seguros y salvados.

Hoy, Señor, no queremos sentirnos asustados ni atemorizados. Todo lo contrario, Señor, estamos alegres y confiados en tu Palabra, y esperanzados en tu venida. Porque Tú, Señor, pondrás las cosas en su sitio y nos salvarás de este caos y alocado mundo que te da la espalda.

Danos, Señor, la fuerza y la esperanza de no desfallecer. Danos la perseverancia de mantenernos unidos y fortalecidos en la fe a pesar de todos los contratiempos, los engaños, las apariencias y el caós que vendrá sobre este mundo. En Ti confiamos y en Ti esperamos alegres y en paz.

miércoles, 27 de noviembre de 2013

MI INCLINACIÓN ES ESCAPAR



Nadie se atreve a caminar por un lugar peligroso, y menos a sabiendas de que por ese camino está expuesto a peligros incluso de muerte. Es obvio que nuestra primera reacción es huir de esa situación y aventurarnos por caminos más seguros. ¿Quién no piensa así? No sería humano pensar de otra forma.

Sin embargo, Jesús piensa de otra manera. Él mismo, no sólo lo piensa, vivió de otra manera. Daba de forma libre y voluntaria sin pedir nada a cambio, cosa extraña para nosotros, pues según nuestra forma de pensar, si damos esperamos recibir. Incluso se complicó su vida hasta entregarla por nosotros. Y no de una manera cualquiera, sino de la forma más ofensiva, indigna y reservada para los peores, una muerte de cruz.

Todo eso sin exigir nada. Es una forma muy extraña e inteligible para nosotros. Nunca lo comprenderemos porque nuestra humanidad está tocada e inclinada, por el pecado, a ser egoísta. Pero en Él, y por su Gracia, podemos llegar a comprenderlo y hasta vivirlo. Es lo que hoy nos propone Jesús: «Seréis entregados por padres, hermanos, parientes y amigos, y matarán a algunos de vosotros, y seréis odiados de todos por causa de mi nombre». 

Y seguidamente, nos llena de esperanza y de fuerzas para atrevernos a vivir esa experiencia de amor: «Pero no perecerá ni un cabello de vuestra cabeza. Con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas». 

Hoy, Padre nuestro, en, con y por tu Hijo Jesús, te pedimos esa fuerza y esa valentía para, confiados en Él y en tu Espíritu, seamos capaces de entregar nuestra vida en la vivencia y proclamación de tu Palabra.