Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

domingo, 30 de abril de 2017

TODOS LOS DÍAS SON EMAÚS

Cada día la lucha se hace necesaria. Cada camino es una tentación hacia Emaús. Nos cansamos del cansancio, valga la redundancia, de la incertidumbre de no saber qué hacer o de no poder vencer la apatía y la comodidad. Nos cansamos de descubrirnos pecadores, y un día y otro seguir fallando y desilusionando. ¡No podemos!, gritamos y experimentamos el deseo de retirarnos a casa, al mundo del mundo, y volver con los nuestros, con los de Emaús.

Esa sensación pervive en nuestro corazón humano y herido por el pecado. Y, sin darnos cuenta, el diablo la alimenta exigiéndonos perfección a sabiendas que no podemos alcanzarla. Estamos cansados, Señor, y queremos descansar en tus brazos de Padre Misericordioso. Dejémonos de preguntarnos y exigirnos y, simplemente, lloremos con los que sufren y lo pasan mal. Y acudamos a nuestro Padre. En Él encontraremos el descanso que buscamos, pero también la Misericordia que necesitamos.

Volvemos, Señor, a Ti. Volvemos sabiendo de nuestra inmerecida misericordia y dándote gracias por tu Amor. No merecemos perdón, pero Tú nos perdonas. Está a la vista la Cruz de tu Hijo, que ha aceptado voluntariamente para redimir nuestros pecados. No podemos volvernos atrás y despreciar esa salvación por amor y misericordia que Tú nos has regalado en tu Hijo. Danos la fuerza y la paciencia de saber esperar y de calentar nuestros corazones para, encendidos, regresar a la comunidad. Realmente la necesitamos.

Señor, me detengo ante Ti y me postro a tus pies, y espero. Confío en tu Amor y pongo todas mis esperanzas que, como a los de Emaús, me enciendas mi corazón y actives mi vida llenándola de gozo y alegría y entregándola en la Cruz. Amén.

sábado, 29 de abril de 2017

MANSO Y HUMILDE DE CORAZÓN

Estoy necesitado de humildad, una humildad que me llene de esa mansedumbre, que inunda mi alma de descanso y paz. De una humildad de saberme pequeño, pobre y pecador. De una humildad que me saca de vivir en la oscuridad abriéndome a tu Luz y Verdad. De esa humildad de verme poca cosa, sencillo e inútil, y que sólo tu Gracia, Señor, hace maravillas en mí según tu Voluntad.

No es fácil conseguirlo, porque mi vanidad y soberbia pesan como una losa en mí. Necesito tu Gracia, Señor. Hay mucha gente sencilla, aparentemente sin importancia ninguna, pero que son ejemplos vivos de tu Gracia, Señor. Ilumina mi vida y dame esa sabiduría de los pobres y sencillos para llegar a Ti. Porque, Tú te resistes a los soberbios y te das a los humildes.

Porque la sabiduría no se encuentra en este mundo, ni tampoco en los sabios y hombres que a él pertenecen. Sólo está en Ti, y a los que Tú quieras dársela. Gracias, Señor, por tan grade regalo, y abre mi corazón humildemente para que, entregado a Ti, pueda ser ejemplo de servicio y amor a los demás.

Aquí estoy Señor, dispuesto a ser receptivo con tu Gracia y tu Voluntad. Dispón, Señor, mi alma y llévala y dirígela según tu Voluntad. Anula mi libertad y sométela a tu Voluntad, para que viva según tu Palabra y de acuerdo con tu Amor. De cualquier forma, te ruego me des la paciencia de saber esperar y aceptar mis debilidades y fracasos, para estar disponible cuando Tú dispongas.

Dame, Señor, la fortaleza necesaria para continuar en el camino, aunque vaya tropezando más de la cuenta, y mis pasos se debiliten y desfallezcan. Y, siempre, sepa recurrir a Ti para hallar el descanso y la paz. Amén.

viernes, 28 de abril de 2017

EN TI, SEÑOR, SOSTENGO MI VIDA



HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDA


No puedo apoyarme en nada, ni en nadie de este mundo. Porque todo lo de aquí abajo es caduco y no me llena plenamente. Lo que perece está llamado a morir, y la muerte es la tragedia del hombre. Sólo en Ti, Señor, puedo apoyarme y sostenerme, porque Tú das la Vida y sostiene nuestra esperanza.

¡Claro que te busco para hacerte mi Rey!, pero un Rey como Tú quieres que te haga. Un Rey de Amor, de servicio y entrega a los demás. Un Rey que ha venido a entregarse y dar su propia Vida para salvarnos a todos. Un Rey generoso, humilde y dispuesto a morir por liberarnos del pecado. Ese es el reinado que Tú, Señor, has querido implantar entre los hombres de este mundo. Un reinado de amor, de justicia y de paz.

Aumenta, Señor, nuestra fe y nuestra capacidad de asombro. Que no nos acostumbremos a tenerte a nuestro lado y no advertir tu Divina presencia; que no nos acostumbremos a tu presencia de forma rutinaria y a no experimentar tu amor y tu generosidad. Señor, que no nos suceda que tu Palabra ya no nos mueva el corazón ni nos llene de gozo y alegría. Mantén nuestro amor primero siempre fresco, activo, emocionado, ingenuo y renovado. Como si de un niño se tratara.

Llénanos de esperanza y de renovadas motivaciones que nos satisfagan plenamente y nos muevan a buscarte y estar ansiosos de permanecer en Ti. Haz que siempre mi alma esté hambrienta y sedienta de tu Palabra y de tu Amor, para que nunca deje de buscarte y de seguirte. 

Que nunca nos cansemos de alimentarnos de tu Palabra y de participar en tu banquete santo reconfortados con el alimento espiritual de tu Cuerpo y tu Sangre. Amén.