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1 - La parábola del trigo y la cizaña se encuentra en Mateo 13:24-30
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porque junto a mí caminan también otros que eligen la puerta ancha, el camino fácil, el juntarse con la cizaña y acabar destinados a ser quemados en el fuego. Y yo confío en Ti, no quiero ser ni confundirme con la cizaña, ni acabar siendo atado en gavillas para ser quemado.
Tú, mi Señor, eres el buen sembrador, que has sembrado buena semilla y que recogerás buenos frutos. Yo quiero ser uno de esos frutos que Tú esperas y que cuidas con exquisito esmero. No quiero ser ahogado por la mala cizaña que hayan plantado los malos sembradores.
Por eso acudo a Ti, y te imploro y suplico que me des las fuerzas necesarias para la lucha diaria contra esa mala cizaña que camina junto a mí. Estará siempre conmigo, pero con tu ayuda y tu Gracia poder vencerla y, por amor, mantenerme siempre a salvo de ser ahogada y cortada para la quema.
Dame, Dios mío, la sabiduría de saber esperar, de saber permanecer, de saber aguantar y llenarme de paciencia para que, permaneciendo en el amor, sea capaz de amar y luchar para que la mala hierba sea replantada, vuelta a ser sembrada y renacida para dar buen fruto. Amén.
Hoy necesito tanto de ti oh mi Dios mi salvador. Por favor perdoname pero dame fuerzas para sanar mi corazon. Necesito de ti de tu gran amor
ResponderEliminarAmén en estos momentos me sirve mucho para restaurar mi fe ya k e tenido 3 cirugías sin éxito pero seguiré alabando a mi único y bendito rey de reyes
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