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miércoles, 22 de agosto de 2018

¿SABES QUÉ BUSCAS?

Imagen relacionadaRealmente, ¿te has parado a pensar que buscas realmente? Porque, tu tiempo, tampoco el mío, se detiene y, aunque a veces con pausa y muy lentamente, sigue siempre avanzando sin parar ni siquiera un instante. Y, mientras caminas, ¿no observas a tu derredor que ocurre? No ves que tus padres se hacen viejo; no ves que tus abuelos ya se han ido, y quizás muchos de los amigos de tus padres están marchándose. ¿Qué piensas al respecto? 

¿Crees que tú te vas a quedar, o estás resignados a irte como ellos sin encontrar lo que buscas? ¿Piensas que ellos encontraron lo que buscaban? Supongo que tú, igual que yo, buscas la felicidad. Y eso significa experimentar deseos de paz, de sosiego, de sentirte gozoso y feliz hasta el punto de no desear nada más. Algo así como decir, con esto tengo y me basta y ya no necesito seguir buscando. ¡Soy tan feliz que me planto!

Esto, en el tiempo que llevas caminando, ¿crees que lo puedes encontrar en las cosas que este mundo te ofrece? ¿Piensas que el dinero, el poder, el éxito, la riqueza, la fama, el placer, el sexo y todo los que quieras buscar te pueden hacer feliz? ¿Crees que la muerte, lo más cierto que sabes, la puedes borrar con ese disfrute en el que tú piensas? ¿Y qué compensa vivir así para luego morir? 

¿Crees que todas esas cosas, en el supuesto que las puedas conseguir, te darán sólo felicidad, o que también te harán sufrir y padecer? ¿Qué experiencia tienes a todo el tiempo que llevas vivido? ¿No te parece interesante y hasta merecedor de vivir esa experiencia aceptando esa buena invitación a trabajar en la Viña del Señor? ¿No crees que experimentarás otra forma de ver la vida y una gran esperanza de encontrar lo que realmente buscas?

Posiblemente estés sometido y esclavizado por las cosas que ves y que piensas que pueden darte una vida mejor, pero, el tiempo pasa y no se ven esos efectos que tú buscas. Abre tus ojos y prueba a ver lo que ocurre en esa Viña donde te invitan a participar y trabajar. Quizás esos frutos te darán la clave de lo que buscas. Oremos para que así suceda. Amén.

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