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- ¡Gracias Señor!
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porque Tú eres mi bienhechor, mi fortaleza, mi dador de todo lo que tengo. ¡Gracias, Dios mío!, porque Tú eres la razón de mi existir y todo mi ser se sostiene en Ti. Gracias Señor Jesús, porque en Ti nuestro caminar se torna suave y ligero, y se soporta con tu Gracia y tu Amor.
Enseñame, Señor, a saber ser agradecido, porque disfruto de muchas cosas, y mi vida ha sido un camino sin grandes dificultades ni tropiezos. ¿Sabré yo valorarlo?
Me da vergüenza mirar a mi alrededor y ver tanta tragedia, tanta hambre, tanto sufrimiento, tanta opresión...etc, y yo fuera de todo eso. Pudiera ser yo, y Tú me has dado bienestar y seguridad. ¿Qué estoy yo dispuesto a darte, a darte en los demás? A veces siento vergüenza.
Hoy, Señor, quiero pedirte que me des la luz necesaria para darme cuenta de tanto agradecimiento que debo darte. Pero también, quiero pedirte que me ilumines y me des el valor, la abnegación, la voluntad y la fuerza necesaria para no quedarme quieto sino poner disponible todo lo que Tú mes has dado.
Enséñame el camino y dame la voluntad de amarte aquí, en los hermanos, porque esa es la prueba de que también te amo a Ti cuando hablo contigo. Estoy seguro que me facilitarás lo que te pido. Me da algo de miedo, porque me siento débil, temeroso y apenas sin voluntad...
Pero creo en tu Fuerzas, en tu Poder, en tu Gracia, y sobre todo en tu Amor. Amén.
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