Páginas

Páginas

sábado, 24 de mayo de 2014

DAME TU ESPÍRITU SEÑOR Y CREA EN MÍ UN CORAZÓN NUEVO



Tú sabes Señor que yo quiero seguirte con todas las de la ley. Siempre he pensado que estar a media vela no conduce a ningún lugar. Pero también experimento que no doy la talla, o al menos eso me parece a mí. Me descubro pobre, lleno y cargado de apegos, apetencias, tentaciones, comodidades, errores, soberbia y cierta suficiencia. 

Sabes que lucho contra todo eso, pero no sé si lo suficiente o al límite de mis posibilidades. Y esa es mi preocupación y pecado. Quizás también peque de exigirme más de lo que Tú me pides y me has dada para resistir y no me acepto. Ahí puede esconderse mi soberbia y mi pecado.

De cualquier forma Señor, Tú me conoces mejor que yo, me sondeas y sabes todo de mí. Por eso, porque sé que me amas y me buscas, y me esperas, me acerco a Ti para pedirte la fuerza de tu Espíritu y un corazón nuevo capaz de descubrir y experimentar el gozo de ser amado y de amar.

Porque sólo lleno de Ti Señor experimentaré el gozo de descubrir, en y cerca de la vida de los demás, la experiencia alegre y gozosa de amar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Compartir es abrirte, hablar de lo que piensas y conoces. Si lo haces, te descubres, y animas al otro a hacer lo mismo. En ese diálogo salta el encuentro y el conocimiento mutuo, y así puede, con mucha caridad, nacer la confianza y el respeto por el otro. Es la mejor manera de vivir y de poner en practica la Voluntad de Dios.