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viernes, 17 de agosto de 2018

CUANDO CREO QUE SÉ MÁS QUE DIOS

Resultado de imagen de Mt 19,3-12

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS.

Eso ocurre en muchos momentos de mi vida. Creo que mis planes son mejores que los que me propone Jesús y me cierro a su Palabra. ¿Por qué no voy yo a repudiar a esta mujer o a este hombre con el que ya no me satisfago? ¿Por qué Dios me prohibe lo que yo quiero hacer? Se impone la satisfacción personal, es decir, el egoísmo.

Y cuando no me gusta alguien y no colma mis satisfacciones, lo mejor es huir y borrar esa unión de mi vida. Ahora, la pregunta que flota en el ambiente inmediatamente es, ¿es eso justo? ¿Te gustaría a ti pasar por eso? ¿Es el matrimonio tan poco serio para tomárselo de esa forma? ¿Con qué intenciones has ido al matrimonio y cuáles son tus responsabilidades? 

Queda al descubierto claramente que se trata de un problema de ego y de intereses. Y cuando el matrimonio se trata desde ahí, no es un matrimonio sino una unión de intereses pasionales, económicos o de cualquier otro tipo. Por lo tanto, es una mentira que se quiere anular con otra mentira. Y cuando las cosas se hacen mal y de forma irresponsable suceden estos problemas. No hay otro problema que el propio de hacer las cosas mal y a la ligera llevados por los egoísmos y las satisfacciones sin importar nada más.

No se trata de prohibir ni de poner dificultades, sino de purificar y de medir realmente nuestro amor. Amar es un compromiso tal y como nos ama Dios, y cuando se ama se es responsable y se vencen todas las dificultades que brotan de la superficie de nuestra propia carnalidad. Es normal que eso suceda, pero amar exige renuncias, desprendimiento, olvido y morir a uno mismo para responder y darse a los demás. En este caso a la esposa o al esposo.

Y en esto es vital la presencia de Dios. Dios que está en el medio y que nos fortalece, nos une y nos purifica de nuestra esclavitud carnal que nos tienta y nos somete. Un Dios que nos ayuda y al que le pedimos la sabiduría para entender su Voluntad y su Amor - «No todos entienden este lenguaje, sino aquellos a quienes se les ha concedido. Porque hay eunucos que nacieron así del seno materno, y hay eunucos que se hicieron tales a sí mismos por el Reino de los Cielos. Quien pueda entender, que entienda».

2 comentarios:

  1. Comenzamos el rezo del santo Rosario. Buenos días a todos.

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  2. Hemos terminado el rezo del santo Rosario. Gracias a todos los que nos han acompañado y a los que lo harán a lo largo del día.

    Un fuerte abrazo para todos en Xto. Jesús.

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Compartir es abrirte, hablar de lo que piensas y conoces. Si lo haces, te descubres, y animas al otro a hacer lo mismo. En ese diálogo salta el encuentro y el conocimiento mutuo, y así puede, con mucha caridad, nacer la confianza y el respeto por el otro. Es la mejor manera de vivir y de poner en practica la Voluntad de Dios.