Páginas

Páginas

viernes, 19 de julio de 2019

UN CORAZÓN MISERICORDIOSO


Resultado de imagen de Mt 12,1-8
Hoy retomamos el rezo del santo Rosario de los viernes, pues el pasado viernes, por estar fuera de casa no pudimos rezarlo.

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS. 


Ayer decía que mis esfuerzos son inútiles se no me abro a la acción del Espíritu de Dios y me abandono en sus Manos. Si el Señor no construye la casa en vano se cansan los albañiles -Salmo 126-. Doy gracias a Dios porque empiezo a tomar conciencia y comprender mejor ese salmo. Y, experimento, que no ha sido por falta de oírlo, sino porque, quizás, ha llegado el momento y Dios así lo ha dispuesto y querido.

Posiblemente, ha sido el momento, la hora de la madurez respecto a esa promesa y el instante de empezar a recoger el fruto. Realmente, no lo sabes exactamente, pero vas experimentando que es ahora cuando todo empieza a cuadrar dentro de tu pobre y sencillo corazón. Experimentas tu pobreza cuando tomas conciencia de lo pequeño que eres y lo necio que has sido.

Gracias, Señor, por este hermoso regalo y, aprovecho, para pedirte que me des la sabiduría, la fortaleza y la paz para conservarlo y madurarlo hasta sus últimas consecuencias. Gracias, Señor. Todos mis esfuerzos son vanos, Señor, si Tú no vas conmigo; todos mis esfuerzos son inútiles si Tú, Señor, no vives en mí; todos mis esfuerzos pierden sentido si Tú, Señor, no actúas en mí. 

Parodiando a Pablo diría que si Tú, Señor, no vives en mí, todo mi actuar y todo mi obrar será inútil. Por eso, Señor, te doy gracias por tu Infinita Misericordia, pues por mis actos nada merezco. Al contrario, merecería ser reprobado y condenado, y Tú, Señor, haces todo lo contrario, me regalas bien y cargas con todo mis malas actuaciones. Me limpias, borras y asumes mis pecados y me regalas gratuitamente Vida Eterna.

¿Qué puedo decirte, Señor? Simplemente, darte las gracias y postrarme a tus pies abandonándome en tus Manos. Amén.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Compartir es abrirte, hablar de lo que piensas y conoces. Si lo haces, te descubres, y animas al otro a hacer lo mismo. En ese diálogo salta el encuentro y el conocimiento mutuo, y así puede, con mucha caridad, nacer la confianza y el respeto por el otro. Es la mejor manera de vivir y de poner en practica la Voluntad de Dios.