Gracias Señor por darnos santos que, como Lorenzo, nos ayudan a vencer las dificultades de la vida.
Gracias Señor, porque en el testimonio y valentía de tus mártires, nosotros podemos contemplar tu grandeza.
Multiplica en nosotros, Señor, los dones de tu amor. Haznos fuertes y generosos, al estilo de San Lorenzo.
Que sepamos compartir con los demás los verdaderos tesoros de tu Iglesia: la fraternidad, la justicia, el amor, la verdad.
Que procuremos no tanto ser servidos sino servir, para que siempre y en todo lugar se haga tu voluntad. Amén.
Desde mi parroquia, por el párroco
D. Juan Carlos Medina Medina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Compartir es abrirte, hablar de lo que piensas y conoces. Si lo haces, te descubres, y animas al otro a hacer lo mismo. En ese diálogo salta el encuentro y el conocimiento mutuo, y así puede, con mucha caridad, nacer la confianza y el respeto por el otro. Es la mejor manera de vivir y de poner en practica la Voluntad de Dios.