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domingo, 2 de septiembre de 2012

UN CORAZÓN PURO, DIOS MÍO

 - Crea en mí un corazón puro. Ayúdame, Dios mío, por tu...

quiero tener para dedicarte y ofrecerte todas mis obras y todo mi ser. Porque del corazón salen todas mis intenciones y en la medida de su pureza, ellas serán buenas.

Pero siento que no siempre es así, que me contamino de malas intenciones que me provocan a actuar mal. Me cuesta reprimirlas y evitar que se hagan realidad, pero la lucha es dura y difícil de sostener. Necesito tu ayuda, tu fuerza, tu Gracia, Señor.

Me doy cuenta que lo que está fuera, a mi derredor no es lo más peligroso, sino que mi corazón las deje entrar y anidar en él. Es entonces cuando el peligro es más eminente, se hace más peligroso y amenaza de forma más seria. La batalla se produce en mi interior, y es ahí donde se gana o se pierde.

Por eso, Dios mío, lava mi interior; purifica mi corazón y renuévame por dentro. Dame un corazón nuevo, no aparte tu Rostro lejos de mí, afianza mi espíritu y devuélveme la esperanza de tu salvación. Amén.

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