Santa Teresa de Ávila
Dichoso el
corazón enamorado |
"Despojado de toda distracción y riqueza. Sólo desde la humildad de nuestro corazón, junto a María, llegará nuestra oración al PADRE".
Santa Teresa de Ávila
Dichoso el
corazón enamorado |
Lo que Vos queráis, Señor,
sea lo que Vos queráis.
Si queréis que entre las rosas
ría hacia los matinales
resplandores de la vida,
que sea lo que Vos queráis.
Si queréis que, entre los cardos,
sangre hacia las insondables
sombras de la noche eterna,
que sea lo que Vos queráis.
Gracias si queréis que mire,
gracias si queréis cegarme;
gracias por todo y por nada,
sea lo que Vos queráis.
Lo que Vos queráis, Señor;
sea lo que Vos queráis.
Juan Ramón Jimenez
Amado Nervo |
Eres uno con Dios, porque le amas.
¡Tu pequeñez qué importa y tu miseria,
eres uno con Dios, porque le amas!
Le buscaste en los libros,
le buscaste en los templos,
le buscaste en los astros,
y un día el corazón te dijo, trémulo:
«aquí está», y desde entonces ya sois uno,
ya sois uno los dos, porque le amas.
No podrían separaros
ni el placer de la vida
ni el dolor de la muerte.
En el placer has de mirar su rostro,
en el dolor has de mirar su rostro,
en vida y muerte has de mirar su rostro.
«¡Dios!» dirás en los besos,
dirás «Dios» en los cantos,
dirás «¡Dios!» en los ayes.
Y comprendiendo al fin que es ilusorio
todo pecado (como toda vida),
y que nada de Él puede separarte,
uno con Dios te sentirás por siempre:
uno solo con Dios, porque le amas.
Amado Nervo
Santa Teresa de Avila |