Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.
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miércoles, 3 de noviembre de 2021

TÚ, TAMBIÉN HAS SIDO INVITADO

 

Posiblemente lo disimules o no atiendas la invitación del Señor porque le das más valor a otras cosas que, en principio, te interesan más. Pero, hagas una cosa u otra la invitación del Señor la tienes siempre ofrecida, constante y hasta con carácter de insistencia.

Porque, el Señor quiere que la aceptes y te des cuenta de que es lo que buscas y te conviene. Descubrir que “Banquete” se trata es la cuestión. Tal es el Amor Infinito de Dios que insiste en invitarte cada día.

Y yo, Señor, quiero abrir mi corazón a tu invitación. No quiero dejarla pasar por alto y aceptarla de todo corazón, porque en ella me va la Vida Eterna. Porque, aceptar tu invitación es el bien más grande que podamos recibir: Vida Eterna en plenitud de gozo y felicidad.

Dame, Señor, paz, fortaleza y sabiduría para saber discernir y valorar tu misericordiosa invitación, porque no me la merezco. Y nunca permitas que la reciba con indiferencia ni rechazo. Amén.

viernes, 21 de junio de 2019

ENSÉÑAME, SEÑOR, EL VALOR DE LAS COSAS DE ESTE MUNDO

Resultado de imagen de Mt 6,19-23
HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS. 



El valor de un bien u objeto dependerá de su servicio, de lo útil que nos pueda ser y de la importancia para lo que nos pueda servir o valer. Un buen medicamento, por ejemplo, vale su precio en oro cuando nos repone, nos alivia y nos cura de una grave enfermedad. Incluso de la muerte. Sin embargo, apreciamos más aquello que, no sólo nos promete la Vida Eterna, sino que plenamente nos hace feliz eternamente. 

En teoría eso lo apreciamos más, porque es eso lo que buscamos. Otra cosa es que no lo descubrimos, no es algo inmediato y, por tanto, no lo apreciamos, o no terminamos de creernos. Sí, es posible que lo afirmemos, pero no llega a lo más profundo de nuestro corazón. Cuando descubrimos ese verdadero tesoro o valor de las cosas nos damos cuenta que sólo lo que nos da Vida Eterna en plenitud de gozo y felicidad es lo que verdaderamente importa. 

Luego, ¿qué buscamos en la vida? ¿Lo que es perecedero, o lo que es eterno? Si nos ceñimos a lo primero tendremos que buscar y afanarnos por las cosas de este mundo, pero si valoramos lo segundo, que es, dicho sea de paso, lo que todos buscamos y queremos, tendríamos que buscarlo en las cosas de arriba. Es decir, en las cosas del Cielo.

Y es eso, Señor, lo que queremos pedirte hoy, que nos abras los ojos y la mente para discernir siempre el bien y lo mejor. Para saber elegir los bienes espirituales del Cielo que nos llevan y nos dan la Vida Eterna. Amén.

lunes, 27 de noviembre de 2017

EL VALOR DE LO POCO

El valor de las cosas no está en su cantidad, ni tampoco en su importancia, ni siquiera en su valor. No por tanto llover es bueno, ni tampoco por mucha agua. A veces la abundancia estropea, no sólo las cosas sino también las personas. Y sucede que en la escasez todo se estima y se aprovecha mejor. La experiencia nos dice que cuando los tiempos son difíciles, se advierte y descubren los valores, la solidaridad y la fraternidad.

En el fondo, el valor de todo acto se esconde en la intención. No por su valor, cantidad, ni tampoco escasez una acción o donación es buena. Su bondad se mide por su intención y desprendimiento. Es eso lo que valoró Jesús en la actitud de aquella viuda pobre. Mientras los acaudalados ricos mostraban su poder y su generosidad, escondiendo bajo su vestido de apariencia su hipocresía y su mentira, la viuda pobre daba de lo que necesitaba para su subsistencia.

Porque, mientras unos daban de lo que les sobraba sin echarlo en falta, otra, daba de lo que necesitaba y echaría en falta. Compartir no consiste en dar de lo que te sobra, sino en dar de lo que necesitas. Se trata de partir el pan y compartir la mitad con otro. En todo caso, la ayuda se hace amor cuando compartes de lo que tienes y necesitas, o, al menos no te sobra.

Supongo que ha sido eso lo que Jesús quiso destacar en aquella viuda pobre, y lo que quieres advertirnos a todos nosotros. Y eso te pedimos, Señor. Danos la voluntad y la buena intención de hacernos comida compartida para aliviar el hambre y la sed de otros. Danos la fortaleza para sentirnos capaces de saciar nuestra sed y hambre, no satisfaciéndonos, sino compartiendo.

Transforma nuestro corazón, Señor, y conviértelo en un corazón generoso, disponible, servicial, atento y entregado a compartir y a darse. Amén.

miércoles, 25 de septiembre de 2013

DESAPEGAME DE LO QUE NO ME SIRVE



Hay muchas cosas que nos impiden caminar más ligeros y más libres. Y suelen ser cosas que al final de cuentas no sirven para mucho. Al menos nos son de las más importantes de nuestra vida. Porque merece la pena preguntarse ¿qué cosas valen y merecen la pena en esta vida?

Porque el valor de las cosas estará en función de su rendimiento final. ¿Para qué quiero algo que poco va a durar? Su valor, al menos, sería muy poco, pues estará en función de su duración. Podríamos converger en que lo verdaderamente importante será aquello que es bueno y dura para toda la vida. Como, de la misma manera, lo malo sería lo que hace sufrir y dura para toda la vida.

Hay cosas que siendo dolorosas terminan siendo fantásticas y gozosas. Lo bueno sería que fuesen para siempre. Pues eso es lo que hoy le quiero pedir al Señor, que me de las fuerzas y la sabiduría de buscar aquello que es bueno y dura eternamente. Él nos lo ha prometido y se ha puesto como Principio y Fin: "Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida".

Está claro, busquemos al Señor y dejemos todo lo demás. El que quiera entender que entienda, nos diría Jesús.