Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.
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sábado, 14 de marzo de 2015

¡LEJOS DE TU INMENSIDAD, SEÑOR!



¡Si llegase a tomar conciencia y a comprender la grandeza de tu Amor, Señor, no creo que la pudiera resistir! ¡No alcanzo a comprender tu Inmensidad y tu Gloria, y menos tu presencia Señor! Estoy delante de Ti, en tu presencia, bajo las especies de pan y vino, y mi corazón siendo consciente no siente ni experimenta lo que cree que debe sentir.

Me siento, no como vacío, pero sí que muy normal sin percibir bien delante de quien estoy.  Algo así como no ser consciente de tu Grandeza, Señor. Como si no supiera delante de quien estoy, el Hijo de Dios. Y temo tomar una actitud farisaica.

Supongo que será algo parecido a lo que sintió Naamán el sirio cuando el profeta le dijo que tenía que bañarte siete veces en el Jordán. Le pareció poca cosa. A mí me ocurre algo parecido, pero al revés. Me parece poco lo que yo debería sentir ante la Inmensidad y la Grandeza del Señor.

Descanso, Señor, en la confianza de tu Misericordia, y en el Amor que nos tienes. Confío que las cosas son así, respecto a los sentimientos de los hombres, porque así Tú quieres que sean y que sintamos. Y que nuestra fe y confianza en Ti sean el motor y la fuerza de nuestra perseverancia, de nuestra presencia e impulso de seguirte a pesar de nuestros pecados e insensibilidades.

Dame, Señor, la capacidad de sentirte, de experimentarte, de embriagarme de tu Amor, y de gozar de tu Inmensidad. Dame Señor la dicha de saber entenderte, admirarte y glorificarte. Amén.