*ORACIÓN FIESTA JUAN EVANGELISTA*
Señor, ayúdame a escuchar tu voz y a responderte, con la misma decisión de Juan Evangelista. Cuando lo llamaste, a orillas del lago Tiberiades, inmediatamente dejó la barca y a su padre y te siguió. No lo dejó para dentro de un rato, o para mañana. Casi no te conocía. No sabía qué le esperaba, pero tu voz resonó en su corazón que lo dejó todo y te siguió. Señor, ayúdame a escuchar tu voz y a responderte.
Señor, ayúdame a acercarme a ti y dejar que tu cercanía me transforme, como a Juan. Juan y su hermano Santiago iban en busca de privilegios. Pero estar a tu lado les fue cambiando. Entendieron que es menester beber el cáliz del amor, del servicio y de la entrega hasta la última gota. Experimentaron que el camino de la gloria pasa por Getsemaní y por el Calvario. Señor, ayúdame a acercarme a Ti cada día y a dejar que tu cercanía me transforme.
Señor, ayúdame a cuidar mi relación contigo, a dejarme amar por ti, como Juan. Él es "el discípulo a quien Jesús amaba", "el discípulo predilecto", el que se siente amado “hasta el extremo”. También yo soy amado por ti. Tú me amas como si yo fuera tu único amigo. Tú quieres que yo sea tu amigo y en ocasiones parece que me conformo con ser tu siervo. Señor, ayúdame a cuidar mi relación contigo, a dejarme amar por ti. Amén