Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

jueves, 24 de octubre de 2019

ENCIENDE MI CORAZÓN, SEÑOR

Resultado de imagen de Lc 12,49-53
Experimento en mi corazón, Señor, que el fuego está débil y, quizás, casi apagado. Experimento que mis fuerzas se debilitan y hay días que me siento muy atrapado por las seducciones con las que el mundo intenta tentarme. Afortunadamente, las conozco y muchas hasta las he experimentado y eso me ayuda a no volver a intentarlo, pues, detrás de ese gozo o satisfacción aparente se esconde el vacío, la insatisfacción y la tristeza. Te pido, Señor, que me sigas dando la fortaleza, la sabiduría y la voluntad para sostenerme firme y poder rechazarlas.

En un mundo, Señor, que vive de espalda a tu Palabra y que no se para a escuchar tu Mensaje, la Buena Noticia que anuncia el gozo y la felicidad de Vida Eterna, mi corazón se siente como llama en ceniza que agoniza y está a punto de ser sofocado y apagado. El ruido, las luces que encandilan y el agua del pecado, de la mentira, de la injusticia y del desamor terminan por secar la débil llama que trata de avivarse dentro de mi pobre corazón.

En estas circunstancias, Señor, mi corazón atrapado por las tentaciones y seducciones  que el mundo me presenta y ofrece se encuentra frío y sin apenas esperanzas de avivar el calor. ¿Cómo calentarlo, Señor y prenderlo de fuego ? Necesito, Señor, tu Fuego y que mi pobre corazón quede en llamas contagiado de tu Fuego, Señor. Y es esta la petición del día de hoy, Señor.

Padre mío, atreviéndome a pedir, siguiendo tu invitación y confiado en tu Palabra, quiero hoy insistir en que prendas de tu Fuego mi pobre corazón. Yo, Señor, creo en tu Palabra y que me escuchas y que me das lo que te pido. Tú me lo has prometido. Con todas las fuerzas de que soy capaz trato de creer en Ti. Ahora, Señor, lo que no sé es cuándo y cómo lo harás, ni tampoco sé qué me darás, porque, nadie mejor que Tú sabe lo que me conviene y me hace falta.

Por eso, Señor, a mi toca confiar y esperar, y saber, confiado y con verdadera esperanza que Tú me responderás dándome lo mejor y lo que más me conviene. Sobre todo en relación a mi salvación. Gracias, Señor, de antemano, y confiado a tu Palabra y lleno de esperanza, sigo tus pasos y tu camino. Amén.

No hay comentarios: