Es obligatoria despertar y el darnos cuenta de la necesidad de estar atentos y mantener los ojos bien y plenamente abiertos. Es de vital importancia observar y, también reflexionar, sobre lo que está ocurriendo. Hay muchas señales - quizás nos pasan desapercibidas - que nos revelan lo que está sucediendo y lo que puede en suceder. Es lo que sucede cuando vemos brotes verdes en algún árbol u hojas amontonadas en el suelo. Deducimos que llega el verano o el invierno.
Supongo que también suceden otras cosas que debemos de observar y sacar nuestras conclusiones. Quizás andamos distraídos en cosas de poca relevancia que tratan de distraernos, pero, es nuestra responsabilidad concentrarnos y mirar lo que realmente es importante. Porque, ¿qué es lo que verdaderamente nos importa? Esta vida se acaba. De la misma manera que tuvo un principio, tendrá un final. ¿Y, luego, qué?
No podemos justificarnos en la ignorancia, porque hemos sido advertidos. Por tanto, si queremos ser responsables tenemos que responder y comprometernos con la verdad. Lo único y verdaderamente importante es descubrir y estar atentos a la llegada del Reino de Dios. Porque, eso es lo que nos interesa y lo que importa. Y, concentrados en eso, te pedimos, Señor, que nos llenes de tu sabiduría y fortaleza para sostenernos fieles y seguir tu camin.
También, Señor, danos esa paciencia de perseverar sin desfallecer en la observancia abierta y atenta al momento final de nuestra vida y la llegada del Reino. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario