Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

martes, 7 de julio de 2020

GRACIAS, SEÑOR POR TU COMPASIÓN

MATEO 9, 32-38 | Palabra de aliento, Frases del amor de dios ...
A pesar de mi suficiencia me emociona y me impacta tu compasión, Señor. Y digo esto, porque, creo, que no soy consciente de tu Gracia, de tus dones y, sobre todo, tu Misericordia. Mi ignorancia y necedad es tan grande hasta el punto de creerme importante y resistirme a tu Amor. Mis conclusiones, Señor, son desbastadoras y descubren todas mis carencias, mis debilidades y, sobre todo, mis pobrezas.

Pobreza de poder y riqueza, porque, por mucho que tenga soy incapaz de aumentar un pelo de mi cabello; pobreza de cultura y sabiduría, porque, por mucho que sepa siempre el mundo - el mundo visible - será un misterio inalcanzable para mí;  pobreza de relación, porque, mis limitaciones, mi soberbia, mi egoísmo, mi avaricia, mi envidia y mis pecados me impedirán amar a los demás, y pobreza de espíritu, porque si mi corazón no está lleno de tu Amor y Misericordia, mi vida se pierde en un vacío carente de sentido y de amor.

Y es que el hombre ha sido creado para amar, y si no es capaz de amar, su vida se malogra y se gasta inútilmente. Por eso, consciente de la compasión de Jesús, me siento agradecido y, a pesar de no experimentar lo que me gustaría experimentar - eso es don de Dios - si, al menos quiero, ser consciente de su Presencia, su Misericordia y su Compasión. 

Y, por ello, doy gracias y, trato, no quedarme en palabras y simples agradecimientos, sino abrir mi corazón a esa Gracia y, en lo posible, aportar toda esa Gracia que, por su Gracia, valga la redundancia, recibo y recibimos en lo más profundo de nuestro corazón.

lunes, 6 de julio de 2020

TAMBIÉN YO, SEÑOR, QUIERO TOCARTE

Pin en frases
Tengo que confesar, al menos yo, que cuando pido por alguien no lo hago con fe. También reconozco que me confundo y no sé ciertamente qué es la fe. Porque, pongo todo el empeño y la fe que tengo y que puedo, pero, ciertamente no sé si lo hago con plena confianza. Porque, eso sí he advertido que cuando pido con fe algo a alguien, que sé que me lo puedo dar, lo hago totalmente convencido que, si quiere, me lo da.

Pero, mis dudas están en que, ¿lo hago así cuando le pido a mi Padre Dios? ¿Creo realmente que Dios me escucha y me atiende? Me respondo a mí mismo que sí, pero siempre queda algo de duda. También es verdad que no sé pedir, o dicho de otra forma, puede suceder muchas veces que lo que pido no me conviene, o conviene que no se haga para que sea un bien, a pesar de no comprenderlo, para mí.

De cualquier forma, este momento y este Evangelio, desde este rincón de oración,  me da la oportunidad de pedirle al Señor que haga que mi fe crezca y se consolide fuertemente y firmemente como la de aquel personaje y aquella mujer. Por tanto, Señor, te pido desde lo más profundo de mi corazón que cultives en mi corazón la llama de la fe y que mi corazón, valga la redundancia, sea cada vez como el de aquel niño que se fía plenamente de su Padre y sabe, con toda confianza, que su Padre le escucha, le atiende y le resuelve su problema.

Gracias, Señor, por tanta Misericordia, porque, reconociendo que no merezco nada, experimento tu Amor y tu Compasión. Gracias de nuevo, Señor. Amén.

domingo, 5 de julio de 2020

GRACIA, SEÑOR, POR TU MISERICORDIA

Mt 11,25-30) Hai nascosto queste cose ai sapienti e ai dotti e le ...
Quiero, Señor, darte gracias por regalarme tu Misericordia y fortalecer mi fe. Gracias por darme - hacía días que te lo había pedido - la oportunidad de recibir el sacramento de la reconciliación y experimentar, con verdadera humildad tu perdón, reconociendo que no lo merezco por mis méritos sino que se debe a tu Infinita Misericordia amorosa. Acepto, Señor, la medida de mi fe y de la que soy capaz, en estos momentos, de poner en tus Manos, y te pido que la aumentes.

Gracias, Señor, por tu respuesta a esa petición de poder reconciliarme contigo por tu Infinita Misericordia. Sé que te lo había pedido, tal y como he escrito más arriba, y me lo has concedido cuando menos lo esperaba. Confieso y reconozco que no sé realmente si he hecho una buena confesión, pero, me alegra y me tranquiliza el experimentar paz y alegría. Y, quiero creer, que esa paz viene de saberme perdonado y querido por mi Padre Dios.

Al mismo tiempo me siento y reconozco pecador, imperfecto, inclinado a la pereza y comodidad, pero también comprendido, animado y perdonado misericordiosamente por tu gran Amor. Gracias Señor. Por eso, Señor, experimento gran alegría y paz al saberme seguro entre tus Manos y abandonar en Ti todas mi cansancio y agobios. A continuación transcribo este pensamiento, que me parece hermoso y real de esta santa: 
Sé que alguien me sustenta y en eso reside mi tranquilidad y mi seguridad. No se trata de la seguridad del hombre que se siente en terreno seguro gracias a su propia fuerza, sino de la dulce y gozosa seguridad del niño que se ve sustentado por unos brazos fuertes, seguridad que en la práctica no es menos racional que aquella. ¿O es que sería razonable que el niño estuviese constantemente temeroso de que mamá la va a dejar caer? (Santa Benedicta de la Cruz).

sábado, 4 de julio de 2020

LA BUENA NOTICIA ANUNCIA UNA VIDA NUEVA

MATEO 9, 14-17 | Frases de chismes, Oraciones religiosas, Frases ...
La irrupción de Jesús en la vida pública de su tiempo marcó un tiempo nuevo. Una nueva Noticia que irrumpía en la vida del ser humano invitándole a cambiar de vida. No obstante, Juan el Bautista lo proponía al invitar a convertirse, aunque no supiese que esa conversión significaba emprender un nuevo camino que, aunque no desterraba el sacrificio y el ascetismo, si lo ajustaba a su significado e intenciones. Porque, ya Jesús nos avisaría que - Os 6, 6-7 - no quieres sacrificio sino misericordia - Mt 9, 13 -.

La aparición de Jesús empieza a ser novedosa y, por novedosa, a tener resistencia por los judíos de ser aceptada. No se entiende eso de abolir la ley del sábado, ni tampoco lo de perdonar los pecados al paralítico y, menos, lo de defender a la adultera. Sus actuaciones no son bien aceptadas y su Persona empieza a molestar a los sacerdotes que, instalados en sus tradiciones y la Torá comienzan a entender que ese personaje de Jesús les va a complicar la vida.

Mientras la Ley antigua se basaba en sacrificios, privaciones, y cumplimientos de preceptos, ignorando la situación de los más pobres, de los enfermos y excluidos, Jesús propone otra forma de actuar donde la misericordia y el amor priman y es lo más importante. Porque, la perfección de la ley es el Amor. Y es que donde se ama se cumple todo lo que hay que cumplir: el respeto al otro, sus derechos, su libertad y la oportunidad de ser tratado como a ti te gustaría que te trataran.

Esa es la propuesta de Jesús que excluye y destierra todos esos odres viejos donde se conserva el vino contaminado que corrompe y contagia con el pecado. Y es eso lo que te pedimos, Señor, vino nuevo que nos embriague de amor, de caridad y de misericordia para, como Tú, amar a los que más lo necesitan y carecen de ese amor que Tú has queridos que le demos nosotros en tu lugar y representándote a Ti.  Te pedimos que nos des esa fortaleza y Gracia para poder amarlos como a Ti te gustaría. Gracias, Señor. Amén.

viernes, 3 de julio de 2020

LA MISERICORDIA DE JESÚS

9° Estación: Jesús fortalece la fe de Tomás. Jn 20,27-28 Jesús ...HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS. 


Gracias, Señor, por tu Infinita Misericordia, porque nos perdona a pesar de no merecerlo. Somos unos testarudos al igual que lo fue Tomás por un tiempo. Ese tiempo que, a pesar de su tozudez Tú lo buscaste y le mostraste el camino - tus llagas - para que doblegara su tozudez y creyera en Ti. Y lo  mismo hace con cada uno de nosotros.

Perdónanos, Señor, porque no merecemos tu perdón, y menos tu Misericordia. Una Misericordia Infinita que nos sostiene esperanzados y salvados. No podemos cansarnos de darte las gracias, Señor, porque tus llagas, que nos las muestras gratuitamente y sin merecerlo, nos manifiestan tu Resurrección y tu presencia. En aquel tiempo se las mostrastes a tus apóstoles, pero, hoy también nos las muestras a nosotros a través de tus santos, tus mártires, tus seguidores fieles que nos dan ejemplo y testimonio de tu presencia y Resurrección.

Madre Teresa, Pio de Pietrachina, Felipe Neri y otros muchos son vivos ejemplos de la muestra de tus llagas que nos muestras para que nosotros abramos nuestros corazones y nos abandonemos a creer en Ti, Señor. Pero, a pesar de nuestras dudas y desconfianza, y, peor todavía, nuestros pecados y ofensas, Tú sigues ahí, igual que hicistes con Tomás, abriendo tus Manos y tu Costado para enseñarnos tus llagas y herida a fin de que creamos en Ti.

jueves, 2 de julio de 2020

GRACIAS, SEÑOR, POR TU PERDÓN Y MISERICORDIA

Mateo 9,1-8 – poder de perdonar pecados - Roguemos al Señor
Te doy gracias, Señor, porque te adelantas a todas mis intenciones y, corrigiéndolas, me ofreces tu Misericordia abriéndome la puerta de tu corazón e invitándome a levantar mi espíritu y caminar en tu presencia y confiado en tu Palabra.

Tú sabes que mi acercamiento a Ti, a pesar de mi ignorancia, mis despistes y mi necedad al ignorar mis pecados y la necesidad de tu perdón, que es la única y verdadera salvación, va gritando sanación. Sanación que en principio no mira sino al cuerpo sin advertir que lo verdaderamente importante es el alma. Por eso, Señor, limitado y postrado en mi camilla, sometido a mis parálisis, te pido clemencia y sabiduría para abrir mi corazón y llenarme de tu Gracia y, por ella, levantarme tomar mi camilla y, en tu Nombre, andar mi camino de salvación. Gracias Señor.

Transcribo estas próximas líneas que hablan de una oración que, al leerla, sentí el deseo de compartirla con todos ustedes:

Señor, me veo reflejado en personajes de este acontecimiento de salvación. Como los escribas, soy incrédulo, porque exijo signos para creer que Tú eres mi Dios, el que me salva de mis pecados y sus consecuencias. Como el enfermo, soy paralítico, sin fuerzas ni ganas de moverme para hacer el bien. 

Paradójicamente los calores del verano - que en el hemisferio norte llegan ahora con todo su rigor, amenazan con congelar la vida del espíritu. Pero tengo tus Palabras de perdón y de misión: Tus pecados están perdonados. Ponte en pie, toma tu camilla y vete. Pero yo estoy convencido de que a tu lado viviré mejor (del Evangelio 2020 con el Papa Francisco - ciclo A - José A. Martínez Puche, O.P.).

miércoles, 1 de julio de 2020

CIEGOS POR LA OSCURIDAD MATERIAL DE LA ECONOMÍA

Mateo 8,28-34 – al encuentro de Jesús - Roguemos al Señor
En muchos momentos de nuestra vida la oscuridad nos envuelve y nos ciega para no dejarnos ver la vida que nos ilumina con la Luz de la Verdad y la Vida Eterna. Reconocemos nuestra debilidad que, siendo lo más importante la vida, quizás, sin darnos cuenta, anteponemos el interés material y nuestras satisfacciones que a la propia vida. Vida que es un don de Dios y que significa la oportunidad de alcanzar, por su Misericordia Infinita, esa Vida Eterna que Jesús, nuestro Señor ha venido a anunciarnos.

Ese es el precio de nuestra libertad. Una libertad que, si no andamos con cuidado y en la Luz puede esclavizarnos y dar como resultados todo lo contrario a lo que significa y debe ser. Porque, hemos sido creados libres para poder elegir, por iniciativa propia, el bien, la verdad y la justicia, y alcanzar esa Vida Eterna que está impresa dentro de nosotros.

Mira, si hemos sido creados a imagen y semejanza de Dios, y Dios es Eterno, lo lógico y de sentido común es que también nosotros estemos llamados a ser eternos. Y esa es nuestra máxima aspiración y algo a lo que no podemos renunciar porque está sellado dentro de nuestro corazón. Por tanto, la vida es ese espacio que nos da la oportunidad de ganarnos la Vida con mayúscula, la Eterna. Y, ¿cómo lo podemos lograr?

De eso se trata, tratando de acercarnos al Señor y esforzándonos en seguirle poniéndole en el centro de nuestra vida. Eso quiere decir que Él es lo primero y luego lo demás. Por eso, reconociendo que somos débiles y heridos por el pecado, aprovechamos está humilde reflexión del rincón de oración para, todos juntos, pedirles sabiduría, fortaleza, paciencia, paz y voluntad para, limpiar nuestros corazones de las impurezas demoniacas y materiales y entregarnos a su Palabra obedientemente y con fe. 

Aumentanos, Señor, la fe y danos una actitud perseverante para, a pesar de nuestras limitaciones y pasiones que nos arrastran y quieren precipitarnos al abismo, encontrar en Ti la fortaleza y la firmeza de sostenernos alejado del Maligno. Amén.