Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

viernes, 12 de abril de 2013

¡QUISIERA SACIARME...!

Eucaristia: Alimento de vida eterna


Es lo que todos buscamos, hartarnos hasta sentirnos bien y gozosos siempre, pero no de esos alimentos perecederos y que no nos quitan el hambre sino temporalmente. Queremos, Señor, ese alimento que Tú nos das y que nos sacia eternamente.

 Pero no encontramos ese alimento que no nos empache y nos haga daño y que nos deje satisfechos y eternamente felices. Comemos y nos hartamos, pero en poco tiempo volvemos a sentir hambre, y si nos hartamos mucho, lo más probable es que nos sintamos mal.

Quisiera saciarme, Señor, pero de ese alimento que perdura y quita el hambre para siempre. Quisiera, Señor, comer ese alimento que me llena de paz, que me deja saciado y feliz, y que me quita la sed del mal y del egoísmo. Quisiera, Señor mío y Dios mío, llenarme de Ti, porque Tú eres el alimento que quita el hambre de la perdición y del mal.

Dame, Dios mío, el alimento que sacia toda mi sed y hambre de justicia, de servicio, de entrega y amor por los demás. Dame, Señor mío, esa fortaleza para hacerme yo también comida y alimento en Ti, para compartir y darme a los demás.

No hay comentarios: