Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.
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lunes, 21 de noviembre de 2016

DAR Y DÁNDOSE

Sería un error reducir todo al aspecto económico. No cabe duda que el dinero tiene mucho poder y abre muchas puertas, pero la caridad no es exclusiva de él. En muchas circunstancias y ocasiones el dinero no es la solución a los problemas. Sí, en cambio, el tiempo. Porque en muchas ocasiones una compañía es la respuesta que ayuda a otra persona a levantarse y a enderezar su vida. Y eso sólo se hace con tiempo y con presencia.

Por eso, el darse tiene mucha relevancia e importancia en la actitud solidaria y caritativa. Y eso, más que desarrollarlo es cuestión de pedirlo. Pidamos al Espíritu Santo un corazón desprendido, generoso, abierto a la solidaridad y a la comprensión. Un corazón capaz de compadecerse, de emocionarse, de capacidad de sufrimiento, sacrificio y renuncia. Y también pongamos en ello todo nuestro empeño y esfuerzo llenándonos de paciencia y esperanza.

Pidamos también que seamos capaces de reconocer las dificultades que viven en nuestro propio corazón. Un corazón humano con mucho de piedra, de endurecimiento y egoísmo. Un corazón esclavizado por el pecado y sometido a los caprichos, poder e intereses de este mundo. Un corazón pobre y humilde que necesita ser transformado y lleno de la Gracia de la caridad y el amor.

Hoy, un día después de la clausura del año jubilar de la Misericordia del Padre, que ayer se clausuraba por el Papa Francisco en Roma, pedimos al Padre que transforme nuestro pequeño, pobre y esclavo corazón en un corazón humilde, compasivo y, sobre todo, misericordioso como el Padre. Amén.

miércoles, 20 de mayo de 2015

UNIDAD EN LA CARIDAD



No se puede estar unidos si no se está unidos en la caridad fraterna. Porque la unidad se hace visible en la caridad. ¿Cómo se puede entender la unidad familiar si no se apoyan, se asisten y ayudan fraternalmente? ¿Cómo se puede entender la unidad matrimonial si los esposos andan cada uno por su lado? 

La unidad exige caridad, porque entre otras cosas para estar unidos es necesario el amor. ¿Y qué es el amor sino caridad? Ambas van unidas porque el amor se concreta en buscar el bien del otro, y si eso falla, el amor queda adulterado o con componendas. El amor rompe con las condiciones y se lanza sin paracaídas. Es incondicional, ama sin condiciones, y asume los errores y fracasos.. Sólo entiende de amar hasta la misericordia.

Así nos ha amado Jesús y así nos invita a amar. Él es la referencia, el modelo a imitar. Por eso es el Camino; es la Verdad y es la Vida. Nas ama hasta el punto de dar la cara por cada uno de nosotros y su compromiso llega tan lejos que ruega al Padre para que se cuide de nosotros acabada su misión. No se puede entender un Dios Padre de otra manera.

Gracias Señor, porque nos has revelado al Verdadero y Único Padre. Un Padre que es Amor, que nos llama y nos da la dignidad de ser sus hijos, y que nos entrega a su Verdadero y Único Hijo, Jesús, como Hermano, Mesías y salvador nuestro.

 ¿Estamos ciegos? ¡No se puede pedir más! No se encuentra una revelación como esta en ninguna parte del mundo, ni en los profetas o considerados dioses de este mundo. Jesús es el Verdadero Hijo de Dios, porque da testimonio de su Amor y de su Verdad, y se cuida de todas las ovejas de su rebaño hasta el punto de dar su vida por salvarla.

Pidamos al Señor que no nos falte nunca la Gracia de sentirnos queridos y salvados por su Amor y Misericordia Infinita. Y que nos asista siempre su sabiduría para saber elegir entre las ofertas tentadoras que este mundo nos ofrece y el gozo de vivir eternamente junto a Él.