Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

miércoles, 31 de marzo de 2021

ESPERARÉ

 

 

 

Esperaré a que crezca el árbol

y me dé sombra.

Pero abonaré la espera con mis hojas secas.

Esperaré a que brote el manantial

y me dé agua.

Pero despejaré mi cauce

de memorias enlodadas.

 

Esperaré a que apunte

la aurora y me ilumine.

Pero sacudiré mi noche

de postraciones y sudarios.

Esperaré a que llegue

lo que no sé y me sorprenda

Pero vaciaré mi casa de todo lo enquistado.

 

Y al abonar el árbol,

despejar el cauce,

sacudir la noche

y vaciar la casa,

la tierra y el lamento

se abrirán a la esperanza.

Benjamín González Buelta, sj

martes, 30 de marzo de 2021

TAMBIÉN YO SOY CULPABLE

 

Jesús se entrega voluntariamente a una muerte de Cruz. Lo sabe, pues ya se la ha adelantado a sus discípulos - Mt 17, 23 - y, a pesar de ello, sigue adelante. Lo hace por amor y por ti y por mí. Nos ha rescatado del pecado y liberado del mal. Y se va a quedar para asirte de su Mano cada vez que tu debilidad te haga caer y te hunda en la perdición de este mundo. Pero, antes entregará su Vida, voluntariamente y por amor.

¿Y nosotros? ¿Seguimos igual? ¿No te remuerde la conciencia y te conforta el propósito de enmienda? Es posible que cada uno de nosotros también tengamoss una cruz. Y una cruz difícil de soportar, pero, ¡no tengas miedo!, en Él podemos superarla cargándola como Él lo hizo. Él nos lo ha prometido, quien cree en Él podrá - Jn 3, 15 - Y hay muchos que han creído en Él y lo han logrado. Su Resurrección es el signo y el fundamento de nuestra fe.

Jesús, con su Muerte y Resurrección, ha dado esperanza y sentido a nuestra vida. Él es el Camino, la Verdad y la Vida. No hay otro camino que nos lleve a eso que en el fondo de nuestro corazón buscamos: gozo y felicidad eterna. Jesús nos lo promete. Él es esa fuente de felicidad que esperamos alcanzar, pero, para eso hay que caminar a su lado y seguirle viviendo en su Palabra.

Danos, Señor, esa fortaleza y esa esperanza de vivir cada instante de nuestra vida en tu Palabra y según tu Voluntad, no la nuestra. Aumenta nuestra fe y llénanos de tu Gracia. Amén.

lunes, 29 de marzo de 2021

LA MUERTE, LA PUERTA DEL CIELO

 

Todos lo sabemos, la único cierto de este mundo es la muerte. Conocemos por nuestros padres el día que nacemos, y tampoco sabemos el día que dejamos este mundo. En algunos casos podemos intuir y darnos cuenta la hora de nuestra muerte, pero, siempre será un interrogante incierto y desconocido. Sin embargo, es la hora más importante, más grandiosa y gloriosa de nuestra vida. Porque, de ella dependerá toda esa felicidad que tanto hemos buscado en nuestro tiempo de vida en este mundo.

Todo dependerá de morir abrazado a las cosas temporales de este mundo, o, morir abrazado a la Cruz de Cristo. Todo dependerá de morir siguiendo los criterios de este mundo, o, morir compartiendo la cruz de mi vida con y en la Cruz de Cristo Jesús. Porque, morir en Cristo es Resucitar. Él ha vencido con su muerte de Cruz al mundo y con su Muerte nos ha salvado también a todos los que abrazamos nuestras muertes injertadas en Él.

Por tanto, a pesar de que estamos amenazados de muerte que, tarde o temprano, tendrá que llegar, no debemos temerla porque, Cristo, el Señor, la ha vencido. Y, muy importante, tampoco debe importarnos nuestras debilidades, miedos y flaquezas, porque, precisamente, así ha querido morir nuestro Señor Jesús, débil, pobre, abandonado y humilde, para demostrarnos y hacernos ver que solo el Amor es el que triunfa, salva y resucita.

Pidamos al Señor que nos dé la fortaleza de saber superar el miedo a reconocernos amenazados de muerte, como sucedió con Lázaro, el amigo de Jesús, y de vivir en la esperanza gozosa de saber que, en y como Él, también resucitaremos. Amén.

domingo, 28 de marzo de 2021

LO QUE VOS QUERÁIS


 

 

Lo que Vos queráis, Señor,
sea lo que Vos queráis.

Si queréis que entre las rosas
ría hacia los matinales
resplandores de la vida,
que sea lo que Vos queráis.
Si queréis que, entre los cardos,
sangre hacia las insondables
sombras de la noche eterna,
que sea lo que Vos queráis.

Gracias si queréis que mire,
gracias si queréis cegarme;
gracias por todo y por nada,
sea lo que Vos queráis.

Lo que Vos queráis, Señor;
sea lo que Vos queráis. 

Juan Ramón Jimenez

sábado, 27 de marzo de 2021

¿POR QUÉ ESTOY TAN MUDO (TOMÁS MERTON)

 
 
 
 
 
 Oh Dios, mi Dios, ¿por qué estoy tan mudo?
Desearía gritarte y gritarte una y otra vez,
pero Tú eres el innombrable e infinito.
Todos los nombres que te damos
no son tus nombres, Trinidad Infinita.
Pero tu Palabra es Jesús,
y yo grito el nombre de tu Hijo;
y vivo en el amor de su corazón,
y creo que, si Él lo quiere,
dará respuesta a mi única oración:
¡que pueda renunciar a todo
y pertenecer por entero al Señor!

viernes, 26 de marzo de 2021

¿CÓMO ORAR, SEÑOR?

 

 

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS. 

 

Experimento que cada día me cuesta más rezar. Mi oración se vuelve más pesada, más rutinaria y más torpe. Llego a preguntarme si realmente sé orar, o, al menos lo hago bien. Mi conclusión es negativa. Creo que no sé orar y que mis oraciones son malas. Eso no significa que mis intenciones sean buenas, pero, mi disponibilidad, ¿es total? ¿Es mi Dios mi primera opción o hay condicionantes?

Sin lugar a duda, las hay. Creo que si Dios me hablara como hizo a María y José, no respondería como hicieron ellos. Ahora mismo mi fe es débil y no experimento que le dijera: "Hágase tu Voluntad". No me da miedo decirlo y confesarlo. A Dios no se le puede engañar, Primero, porque, sé, Señor, que Tú lo sabes; segundo, porque, solo reconociendo mis pecados puedo depositarlos en tus Manos Misericordiosas para que sean purificados y limpiados.

A veces pienso que, quizás, esa debilidad me conviene, porque, gracias a ella, me sostengo en la esperanza de tu Misericordia y en la lucha de cada día por ser un poco mejor. Sé que Tú me conoces y me amas tal y como soy, y buscas mi salvación. Por tanto, perseverar en esa esperanza me fortalece aguardando ese día que tu decidas cambiar mi corazón viejo y endurecido por un corazón nuevo y renovado en tu Amor. Por eso y en eso, continúo detrás de Ti.

jueves, 25 de marzo de 2021

¡MADRE, ENSÉÑAME A VIVIR EN LIBERTAD!

 

Detrás de una persona humilde y sencilla se esconde virtudes que dejan huella en los que viven y están a su lado. Hablamos de la familia. De una familia, donde los cónyuges transparenta humildad, sencillez, verdad y, por supuesto, libertad para escoger el bien y la justicia, se suceden hijos que llevan en sus actitudes esas chipas de bondad, de humildad, de sencillez y libertad. De la buena semilla nacen buenos frutos.

Es también notorio que, dentro de esa familia, la madre guarda un papel fundamental. También lo hace el padre. Cada cual tiene su rol, pero, volviendo a la madre, su labor se refleja luego en los hijos, hasta tal punto que podemos decir que detrás de un hijo humilde, sincero y respetuoso en la verdad y justicia, es esconde una madre y familia que transmite esos valores. Son esas familias bien estructuradas que destacan ante las malas estructuradas que dejan secuelas y perdición.

Es el caso de María, Madre de ternura, de sencillez y humildad. Madre de obediencia y del hágase tu Voluntad rendida al Señor. Y, precisamente, por encargo del Padre, se hace junto a José, responsable de la crianza y educación del Niño Jesús. Te imaginas a María dándole el pecho al Niño Jesús, tal y como relata la Beata Ana Catalina Emmerick en su libro de visiones y revelaciones: "La virgen permaneció algún tiempo en éxtasis; luego cubrió al Niño con un paño, sin tocarlo y sin tomarlo aún en sus brazos. Poco tiempo después vi al Niño que se movía, y lo oí llorar. En ese momento fue cuando María pareció volver en sí misma, y, tomando al Niño, lo envolvió en el paño con que lo había cubierto, y lo tuvo en sus brazos, estrechándolo contra su pecho. Se sentó, ocultándose toda ella con el Niño bajo su amplio velo, y, creo que le dio el pecho. (Página 401 del tomo 11- Época primera. Desde el nacimiento hasta la muerte de San José).

Es sorprendente como lo cuenta La Beata a través de los escritos de Clemente Brentano, Bernardo E. Overberg y Guillermo Wesener. Y es más sorprendente todavía como tú te puedes imaginar esos momentos tan hermosos donde Dios, encarnado en Naturaleza humana, se pone en brazos de una joven llamada María, y un joven San José, para, en sus manos venir a este mundo para, dando su Vida treinta y tres años después darnos la oportunidad de recuperar nuestra dignidad de hijos de Dios perdida por el pecado.

Madre, enséñanos y  edúcanos también a nosotros para que, obedientes y fieles a la Palabra de tu Hijo, el Hijo de Dios, seamos capaces de hacer su Voluntad como tú, Madre, lo hicistes. María, Madre de Dios, intercede por nosotros. Amén.

miércoles, 24 de marzo de 2021

NO SE TRATA DE CONOCER LA VERDAD, SINO DE VIVIRLA

 

Nos pregunta si realmente creemos en Dios. Y mucha gente afirma que si, pero, ¿nos preguntamos quien es ese Dios en el que decimos creer? Porque, suele suceder que muchos creen, pero no se nota esa fe ni se ve traducida en obras en la realidad de la vida de cada día. Es una fe de palabra que no se corresponde con la realidad. Algo así sucede en el Evangelio de hoy, dicen ser hijos de Abrahan, pero luego hacen según sus tradiciones mostrándose indiferentes a la Palabra que proclama Jesús, el Hijo de Dios.

Y es también lo que sucede en los tiempos que vivimos. Hablamos de fe, de creencias, de libertad y de todo lo que se nos interpela, pero, ¿realmente nuestra vida es coherente con eso que decimos? No se nota, y la prueba es que hay muchas leyes que se aprueban contrarias a la verdad. El aborto y la eutanasia, ¿dónde están los cristianos, que han dado ese poder legislativo a esos que ahora las aprueban?  Porque, cuando has dejado de emitir tu voto, o se los has dado a esos partidos que aprueban esas leyes, nos hacemos cómplice de sus actos.

Pidamos perdón y abrámonos a la misericordia de Dios reconociendo nuestros pecados y nuestras esclavitudes. Porque, el pecado nos esclaviza y nos quita nuestra libertad de decidir en verdad y justicia. Jesús es nuestro Camino, también nuestra Verdad y nuestra Vida. Creamos en su Palabra y sigamos sus pasos en la escucha y acción - asistidos por el Espíritu Santo -  Señor y dador de Vida.

martes, 23 de marzo de 2021

UNA CRUZ EN TU VIDA QUE TE DA LA VIDA.

 

No solo rima sino que es verdad. La cruz de tu vida te da la vida. Y es que nadie se escapa de tener una cruz o cruces en su vida. Porque, es esa cruz la que te hace crecer y te salva. El esfuerzo, que a veces se transforman en cruces y duros trabajos, te hace madurar, te da experiencia y te ayuda a crecer en conocimientos, en estatura y en Gracia de Dios si miras para Él.

Pero, también experimentamos que cuando tratamos de evitar las cruces, tomar el atajo de la comodidad, de placer, del nulo esfuerzo, la felicidad no es plena ni tampoco duradera. Por todo ello, ¡Señor, te pedimos, desde este rincón de oración, que nos des fortaleza y perseverancia para soportar con entereza y firmeza cada momento de cruz de nuestra vida! Que sepamos entender y aceptar que ese camino de cruz es el que nos lleva a Ti. Un camino de cruz que unido a la Cruz de Cristo nos salva y nos da Vida Eterna. 

Sin embargo, también somos conscientes de nuestras debilidades y pecados, y de nuestras inclinaciones a dejarnos seducir por la comodidad, el confort y la buena vida. Nos gusta el poder y las riquezas. En fin, estamos a merced del príncipe de este mundo. Por todo ello, ¡Señor, te pedimos tu Gracia y Misericordia para resistirnos a todas esas pasiones que tratan de apartarnos de la cruz de nuestra vida! Amén.

lunes, 22 de marzo de 2021

LA EXPERIENCIA DEL PERDÓN

 

Solo cuando experimentas perdón entiendes y descubres la necesidad de ser perdonado. Igual que cuando te sientes enfermos entiendes y comprendes al que sufre en la enfermedad, de la misma forma experimentas la necesidad de ser misericordioso cuando recibes misericordia. 

Desde la experiencia de ser amado, experimentas y descubres la necesidad que tienes tú también de amar. Tengamos confianza y, sobre todo, fe para dejarnos amar por nuestro Padre Dios, que nos busca y se nos hace presente en nuestra vida. 

Y, desde su Amor, y por su Gracia, corresponder nosotros amando a los demás. Porque, cuando amamos al prójimo estamos amando a nuestro Padre Dios. Porque, solo desde el amor podemos aprender a amar y, será el amor lo que nos llevará a ser misericordioso con los demás. Amén.

domingo, 21 de marzo de 2021

LUCHA INTERIOR

Nuestra naturaleza es implícitamente egoísta. Sin embargo, el ser humano reconoce ese egoísmo como algo que no está bien y que de alguna forma le puede y le esclaviza. Todos, en principio, rechazamos al egoísta aunque reconocemos que nos puede y nos somete.

Tratar, pues, de liberarnos de él supone un combate, una lucha interior que difícilmente podemos sostener cada día. Porque, la lucha no tiene tregua, es constante y permanente, y, dependerá de cómo y con quien te enfrentas a ella.

Puedes hacerlo solo, y eso significa que has tomado el camino equivocado, el camino perdedor. Porque, el príncipe de este mundo - demonio - te vencerá con total seguridad. Sin embargo, si tu camino va unido a Cristo e injertado en su Cruz, aunque aparentemente parezca que te has equivocado  y perdido, vencerás, porque darás frutos, verdaderos frutos de amor. Ten siempre presente que Cristo y tú serán mayoría aplastante.

Pidamos, pues, permanecer unido en nuestro camino al Señor Jesús y, abrazado a su Cruz, encontrar la fuerza y fortaleza para superar la adversidad y obstáculos de cada día para salir victoriosos al encuentro de nuestro Padre Dios. Amén.

sábado, 20 de marzo de 2021

¡SALVAME, SEÑOR, DE LA AMENAZA DE RECHAZARTE!


No es fácil decir que sí a Jesús. Es evidente que su Palabra cautiva, produce admiración y seduce, pero la turba te mira y vigila amenazante. El entorno a mi derredor, Señor, me influye y me arrastra a resistirme a tu Palabra. Sin embargo, yo, Señor, quiero mantenerme firme y fiel a tu Palabra.

Y, aprovecho este rincón de oración, Señor, para pedirte fortaleza, sabiduría y voluntad a fin de sostenerme firme, fiel e inmóvil en tu presencia y seguimiento. Sé que hay muchas amenazas, pero, a tu lado y contigo en mi corazón puedo vencerlas. 

Por eso, Señor, convencido de tu presencia y de tu amor misericordioso vengo a suplicarte que infundas en mi corazón la fuerza necesaria para resistirme a todas las tentaciones y amenazas que tratan de enfrentarme a Ti. Amén.

viernes, 19 de marzo de 2021

OBEDECER ES SEGUIR LA VOLUNTAD DE DIOS

 

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS. 

 

En muchos momentos de tu vida te planteas desobedecer lo que te mandan. Y, te lo planteas, porque pones en duda la credibilidad de quien te lo manda. Está sujeto a error como tú y puede equivocarse. Pero, no ocurre eso cuando el mandato viene del Señor. Él es la Verdad Absoluta y, siempre busca tu bien, aunque a ti y a mí nos parezca que se equivoca o que nuestro plan es mejor.

Esa es la diferencia. El hombre, por muy listo que sea, se equivoca, pero, Dios, es infalible y nunca se equivoca. Por eso, nuestra fidelidad y obediencia debe siempre ser total y plena. Y reconocemos que así no sucede, somos imperfectos y desobedecemos priorizando nuestros planes antes que los de Dios. Y eso lo descubrimos en nuestras propias oraciones. Sucede que rezamos sin darnos cuenta muchas veces de lo que decimos. 

En la oración del Padrenuestro nos dirigimos a nuestro Padre, pero Padre para según qué, porque cuando nuestra voluntad no coincide con la de Él, le desobedecemos al priorizar la nuestra. Sin embargo, continuamos mintiendo cuando decimos "hágase tu Voluntad en el cielo y la tierra". Es cierto que los planes de Dios están por encima de los nuestros y no coincidimos con Él, pero, ¿nos damos cuenta que los planes de Dios son los que nos conviene y los mejores para nosotros? Al parecer no es así, pues priorizamos siempre los nuestros.

Por eso, la figura de san José nos puede ayudar a ver como por encima de nuestras voluntades está siempre la de nuestro Padre Dios. Y es esa Voluntad la que nos conviene obedecer y realizar. Pidamos esa sabiduría y fortaleza para poner siempre por delante y en primer lugar de nuestra vida la Voluntad de Dios. Amén.

jueves, 18 de marzo de 2021

A JESÚS CRUCIFICADO

 

 

No me mueve, mi Dios, para quererte
el cielo que me tienes prometido,
ni me mueve el infierno tan temido
para dejar por eso de ofenderte.

Tú me mueves, Señor; muéveme el verte
clavado en una cruz y escarnecido;
muéveme el ver tu cuerpo tan herido;
muévenme tus afrentas y tu muerte.

Muéveme, en fin, tu amor, de tal manera,
que aunque no hubiera cielo yo te amara,
y aunque no hubiera infierno te temiera;

No me tienes que dar porque te quiera;
porque aunque lo que espero no esperara,
lo mismo que te quiero te quisiera.


(atribuído a San Fco. Javier)

(Compilado por José Gálvez Krüger

miércoles, 17 de marzo de 2021

CRISTO NO TIENE OTRO CUERPO QUE EL TUYO

                                                                                      
 
 
Cristo no tiene otro cuerpo que el tuyo. 
Ni manos, ni pies en la tierra sino los tuyos. 
 Tuyos son los ojos 
con los que Él mira compasivo a este mundo. 
 Tuyos son los pies
 con los que camina a hacer el bien. 
 Tuyas son las manos 
con las que bendice a todo el mundo.
 Tuyas son las manos.
 Tuyos los pies.
 Tuyos los ojos.
 Tú eres su cuerpo.
 Cristo no tiene ahora en la tierra
 otro cuerpo que el tuyo.
 
 (Atribuido a Santa Teresa de Ávila)

martes, 16 de marzo de 2021

SOLO TÚ, JESÚS

Pedro Arrupe


 
Solo Tú, Jesús. Jesús, mi Dios, mi redentor, mi amigo, mi íntimo amigo, mi corazón, mi cariño: aquí vengo, para decirte desde lo más profundo de mi corazón y con la mayor sinceridad y afecto de que soy capaz que no hay nada en el mundo que me atraiga, sino Tú solo, Jesús mío. 
No quiero las cosas del mundo. No quiero consolarme con las criaturas. Solo quiero vaciarme de todo y de mí mismo, para amarte solo a Ti. 
Para Ti, Señor, todo mi corazón, todos sus afectos, todos sus cariños, todas sus delicadezas.

¡Oh Señor!, no me canso de repetirte: nada quiero sino tu amor y tu confianza. 
Te prometo, te juro, Señor, escuchar siempre tus inspiraciones, vivir tu misma vida. 
Háblame muy frecuentemente en el fondo del alma y exígeme mucho, que te juro por tu Corazón hacer siempre lo que tú deseas, por mínimo o costoso que sea. 
¿Cómo voy a poder negarte algo si el único consuelo de mi corazón es esperar que caiga una palabra de tus labios, para satisfacer tus gustos?

lunes, 15 de marzo de 2021

CREER SUPONE PONERSE EN CAMINO

 

Indudablemente, nos cuesta creer. Y digo eso, porque somos muy capaces de decir que creemos, pero nuestra vida se queda igual, no cambia ni hace nada que refrende esa fe que decimos tener. Es decir, nuestra fe la proclamamos con palabras, pero, nuestra vida sigue el rumbo y ritmo que ponemos nosotros. La conclusión es que nos falta fe.

Y este rincón de oración es una nueva oportunidad para, humildemente postrarnos ante Ti, Señor, y suplicarte que nos des ese don de la fe para poner nuestra vida en tus Manos. Danos, Señor, esa fe que manifestó aquel funcionario real y tantos otros que te han seguido abriéndose a tu Palabra y conformando sus vidas según tu Voluntad. Danos, te lo pedimos, la sabiduría de saber elegir el camino que marca tu Voluntad y la fortaleza de ponernos en marcha.

Aumenta, cada día, un poco más nuestra fe hasta el punto que seamos capaces de mejorar nuestra capacidad de amar. Amarte a Ti y amar al prójimo, porque todo consistirá en eso. Creer en Ti, Señor, es apostar nuestra vida en pro de dejarnos amar por Ti y, por tu Gracia, dejarnos transformar en mejores personas capaces de amar como Tú nos amas. Por todo ello, Señor, te damos las gracias y confiamos que, tal y como hizo aquel funcionario, confiamos en tu Palabra a pesar de la aparente distancia, lejanía y de no verte. Amén. 

domingo, 14 de marzo de 2021

¿A DÓNDE VAS? ¿HAS PENSADO QUE PUEDES SER FELIZ ETERNAMENTE?

 

Si de una cosa estoy seguro es que tú, yo y todo el mundo quiere ser feliz. Otra cosa es que muchos no se hayan detenido en algún momento a pesar que esa felicidad que buscan, que nunca encontrarán en este mundo, sí la pueden encontrar en la Cruz. Esa Cruz en la que Jesús de Nazaret, el Hijo de Dios, entregó su Vida por ti, por mí y por todos. Y no es ocurrencia mía ni de nadie, son sus propias Palabras que nos llegan hoy desde el Evangelio, Palabra de Dios: 

                         «Como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así tiene que ser levantado el Hijo del hombre, para que todo el que crea tenga por Él vida eterna. Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo único, para que todo el que crea en Él no perezca, sino que tenga vida eterna. Porque Dios no ha enviado a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por Él. El que cree en Él, no es juzgado; pero el que no cree, ya está juzgado, porque no ha creído en el Nombre del Hijo único de Dios. 

Por tanto, está claro, pero necesitas fiarte de Él y, en consecuencia, creer en Él. Y si observas, no es tan difícil. Simplemente, tienes que detenerte y mirar tu interior para descubrir un deseo profundo de felicidad que, sería injusto no poder alcanzarlo. Puedes preguntarte, ¿quien ha sido tan poderoso y, tan malo a la vez, para poner ese deseo de felicidad en nuestros corazones y no ofrecernos la posibilidad de alcanzarlo?

Jesús nos saca de esa duda y tribulación cuando nos lo dice claramente hoy en el Evangelio - Jn 3,14-21 - y nos ofrece esa oportunidad de, creyendo en El alcanzar esa Vida plena y eterna. Dejémonos alumbrar por esa luz que, a pesar de sus cruces, nos llevan al camino único y verdadero de la Vida Eterna. Amén.

sábado, 13 de marzo de 2021

LLENA, SEÑOR, MI CORAZÓN DE HUMILDAD

 

Sé, Señor, que necesito abajarme y reconocer mis pecados, mis debilidades, mis apetencias, mis egoísmos y todo aquello que me impide abrirme a tu amor misericordioso. 

Porque, todo, Señor lo que me rodeas es caduco y termina. Solo Tú tienes Palabra de Vida Eterna. Por todo ello, Señor, necesito, y te suplico que llenes mi corazón de humildad para que pueda fortalecerme y despojarme de todo aquello que impide tu presencia en mi pobre corazón.

Dame la sabiduría de preparar mi corazón para recibir al Señor y disponer para Él el mejor lugar de mi corazón desde donde Él pueda reinar y transformarme según su Voluntad. Porque, eso es lo único y verdaderamente importante, hacer tu Voluntad, Señor, y no la nuestra que está siempre en el error. Eso, Señor, será lo mejor, lo que me conviene y lo que verdaderamente necesito.

viernes, 12 de marzo de 2021

ENSÉÑANOS, SEÑOR, A AMAR

 

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS. 

 

Enséñame Señor, a ser dulce y delicado en todos los acontecimientos de la vida; en los desagradables; en la inconsideración de otros; en la insinceridad de aquellos en quienes confiaba; en la falta de fidelidad y de lealtad de aquellos en quienes yo descansaba.

Deja que me ponga a un lado, para pensar en la felicidad de los otros, que oculte mis penas y mis angustias, para que sea yo el único en sufrir sus efectos.

Enséñame a aprovecharme del sufrimiento que se presente en mi camino.

Déjame que lo use de tal manera que sirva para suavizarme, no para endurecerme ni amargarme, de modo que me haga paciente, no irritable; generoso en mi perdón, no mezquino, altivo e insufrible.

Enséñame a saber que nunca alguien sea menos bueno por haber recibido mi influencia.

Que nadie sea menos puro, menos veraz, menos bondadoso, menos digno, por haber sido mi compañero de camino en nuestra jornada hacia la Vida Eterna.

En tanto voy dando saltos de un error a otro, déjame susurrar una plegaria de amor a Ti.

Por: Octavio Colmenares Vargas

jueves, 11 de marzo de 2021

INVOCACIÓN A JESUCRISTO MODELO

PEDRO ARRUPE

Señor: meditando el modo nuestro de proceder, he descubierto que el ideal de nuestro modo de proceder es el modo de proceder tuyo. Por eso fijo mis ojos en ti (Hb 12,2), los ojos de la fe, para contemplar tu iluminada figura tal cual aparece en el Evangelio. Yo soy uno de aquellos de quienes dice San Pedro: A quien aman sin haberle visto, en quien creen aunque de momento no lo vean, rebosando de alegría inefable y gloriosa (1Pe 1,8).

Señor, Tú mismo nos dijiste: les he dado ejemplo para que me imiten (Jn 13,15). Quiero imitarte hasta el punto de que pueda decir a los demás: sean imitadores míos, como yo le he sido de Cristo (1Cor 11,1). Ya que no pueda decirlo físicamente como San Juan, al menos quisiera poder proclamar con el ardor y sabiduría que me concedes, lo que he oído, lo que he visto con mis ojos, lo que he tocado con mis manos acerca de la Palabra de Vida; pues la Vida se manifestó y yo lo he visto y doy testimonio (1Jn 1,3; Jn 20,25ss; 1,14; Lc 24,39; Jn 15,27).

Dame, sobre todo, el "sensus Christi" (1Cor 2,16) que Pablo poseía; que yo pueda sentir tus sentimientos, los sentimientos de tu Corazón con que amabas al Padre (Jn 14,31) y a los hombres (Jn 13,1). Jamás nadie ha tenido mayor caridad que Tú, que diste la vida por tus amigos (Jn 15,13), culminando con tu muerte en cruz el total abatimiento (Fil 2,7), kénosis, de tu encarnación. Quiero imitarte en esa interna y suprema disposición, y también en tu vida de cada día, actuando, en lo posible, como Tú procediste.

Enséñame tu modo de tratar con los discípulos, con los pecadores, con los niños (Lc 17,16), con los fariseos, o con Pilatos y Herodes; también con Juan Bautista aún antes de nacer (Lc 1,41-45), y después en el Jordán (Mt 3,17). Como trataste con tus discípulos, sobre todo con los más íntimos: Pedro (Mt 10,2-12; Mc 3,16) y Juan (Jn 19,26-27), y también con el traidor Judas (Jn 13,26; Lc 22,48). Comunícame la delicadeza con que trataste en el lago de Tiberíades a tus amigos preparándoles de comer (Jn 21,9), o cuando les lavaste los pies (Jn 13,1-20).

Que aprenda de ti, como lo hizo San Ignacio, tu modo al comer y beber (Mc 2,16; 3,20; Jn 4,8. 31-33); cómo tomabas parte en los banquetes (Mt 9,19), cómo te comportabas cuando tenías hambre y sed (Jn 2,1; 12,2; Lc 7,16; Mt 4,2; Jn 4,7; 19,20-30), cuando sentías cansancio tras las caminatas apostólicas (Jn 4,6), cuando tenías que reposar y dar tiempo al sueño (Mc 4, 38).

Enséñame a ser compasivo con los que sufren (Mt 9,36; 14,14ss. 32; 20,34; Lc 7,13); con los pobres, con los leprosos, con los ciegos, con los paralíticos; muéstrame cómo manifestabas tus emociones profundísimas hasta derramar lágrimas (Mt 9,36; Mt 14,14; 15,32; 20,34; Lc 7,13; 19,41; Jn 11,33; 35,38); o como cuando sentiste aquella mortal angustia que te hizo sudar sangre e hizo necesario el consuelo del ángel (Mt 26,37ss). Y sobre todo, quiero aprender el modo como manifestaste aquel dolor máximo en la cruz, sintiéndote abandonado del Padre (Mt 27,46).

Esa es la imagen tuya que contemplo en el evangelio: ser noble, sublime, amable, ejemplar; que tenía la perfecta armonía entre vida y doctrina; que hizo exclamar a tus enemigos: eres sincero, enseñas el camino de Dios con franqueza, no te importa de nadie, no tienes acepción de personas (Mt 22,16); aquella manera: varonil, dura para contigo mismo, con privaciones y trabajos (Mt 8,20); pero para con los demás, lleno de bondad y amor, y de deseo de servirles (Mt 20,28).

Eras duro, cierto, para quienes tienen malas intenciones; pero también es cierto que con tu amabilidad atraías a las multitudes hasta el punto que se olvidaban de comer (Mt 3,20); que los enfermos estaban seguros de tu piedad para con ellos (Mt 9,36); que tu conocimiento de la vida humana te permitía hablar en parábolas al alcance de los humildes y sencillos; que ibas sembrando amistad con todos (Jn 15,15), especialmente con tus amigos predilectos, como Juan (Jn 13,23; 19,26), o aquella familia de Lázaro, Marta y María (Jn 11,36); que sabías llenar de serena alegría una fiesta familiar, como en Caná (Jn 2,1).

Tu constante contacto con tu Padre en la oración, antes del alba (Mt 26,36-41) o mientras los demás dormían, era consuelo y aliento para predicar el Reino.

Enséñame tu modo de mirar, como miraste a Pedro para llamarle (Mt 16,18) o para levantarle (Lc 22,61); o como miraste al joven rico que no se decidió a seguirte (Mc10,21); o como miraste bondadoso a las multitudes agolpadas en torno a ti (Mc 10,23; 3,34; 5,31); o con ira cuando tus ojos se fijaban en los insinceros (Mc 3,5).

Quisiera conocerte como eres: tu imagen sobre mí bastará para cambiarme. El Bautista quedó subyugado en su primer encuentro contigo (Mt 3,14); el centurión de Cafarnaún se siente abrumado por tu bondad (Mt 8,8); y un sentimiento de estupor y maravilla invade a quienes son testigos de la grandeza de tus prodigios (Mt 8,27; 9,33; Mc 5,15; 7,37; Lc 4,36). El mismo pasmo sobrecoge siempre a tus discípulos (Mt 13,54); y los esbirros del Huerto caen atemorizados (Jn 18,6). Pilatos se siente inseguro (Jn 19,8) y su mujer se asusta (Mt 27,19). El centurión que te ve morir descubre tu divinidad en tu muerte.

Desearía verte como Pedro, cuando sobrecogido de asombro tras la pesca milagrosa, toma conciencia de su condición de pecador en tu presencia (Lc 5,8). Querría oír tu voz en la sinagoga de Cafarnaún (Jn 6,35-59), o en el Monte (Mt 5,2), o cuando te dirigías a la muchedumbre enseñando con autoridad (Mt 1,22; 7,29), una autoridad que sólo te podía venir del Padre (Lc 4,22-32).

Haz que nosotros aprendamos de ti en las cosas grandes y en las pequeñas, siguiendo tu ejemplo de total entrega al amor al Padre y a los hombres, hermanos nuestros, sintiéndonos muy cerca de ti. Pues te abajaste hasta nosotros, siendo al mismo tiempo tan distantes a ti, Dios infinito.

Danos esa gracia, danos el "sensus Christi", que vivifique nuestra vida toda y nos enseñe - incluso en las cosas exteriores - a proceder conforme a tu espíritu.

Enséñanos tu "modo" pare que sea "nuestro modo" en el día de hoy, y podamos realizar el ideal de Ignacio: ser compañeros tuyos, "otros Cristos", colaboradores tuyos en la obra de la redención.

Pido a María, tu Madre Santísima, de quien naciste, con quien conviviste y amaste durante 33 años, y que tanto contribuyó a plasmar y formar tu modo de ser y de proceder, que forme en mí y en todos los hijos de la Compañía, otros tantos Jesús como Tú.

miércoles, 10 de marzo de 2021

AHORA ES TU TIEMPO, TU TIEMPO PARA AMAR

 

Dice el refrán que lo que puedas hacer hoy de bueno, no lo dejes para mañana. Porque, ese tiempo se ha perdido y mañana será otro tiempo que corresponde a otra hora y a otro día. Significa es que ese momento de instante de amor se ha perdido. El de mañana será otro instante de amor, que ya no suma con el perdido de ayer. Por tanto, queda claro, lo de hoy no lo dejes para mañana.

En consecuencia, afirmamos que ahora es tu tiempo de y para amar. Es el tiempo de tu vida en la que puedes y debes - es lo que más te conviene - vivir en una actitud amorosa de servicio al que más lo necesita. Oportunamente, ahora vivimos un tiempo de pandemia que, lejos de ser una tragedia, puede significar un tiempo para extremar y derrochar amor. Por eso, ahora, y siempre, es tiempo para amar.

E, inseparablemente, el amor está compuesto de misericordia, y la misericordia lleva el perdón en su misma sangre. No podrás amar sin misericordia y, por supuesto, perdón. Es, precisamente, la Misericordia infinita de Dios la que nos da esa oportunidad para ser perdonados de nuestros pecados. Y, al mismo tiempo, no ofrece esa hermosa posibilidad de redimirnos cargando también nosotros nuestra propia cruz de amor.

Pidamos, con fe y perseverancia, que la Gracia del Señor nos invada de su Infinita Misericordia y amor, para que, siguiendo su camino e injertado en su Palabra, vivamos ese estilo de vida misericordiosa de perdón por amor. Amén.

martes, 9 de marzo de 2021

PADRENUESTRO

 

No hace falta, ni tampoco es necesario estrujar nuestra mente para expresar el agradecimiento, inmerecido, por supuesto, por la Infinita Misericordia recibida gratuitamente de nuestro Padre Dios por el perdón de nuestros pecados. En la oración por excelencia del Padrenuestro tenemos la respuesta y la llave para acogernos a esa inmensa y gratuita misericordia que nos da la entrada al gozo eterno en la Casa del Padre.

Meditar y tratar de llevar a la vida de cada día esa oración, sencilla y clara, del Padrenuestro, es la gran oportunidad que nuestro Padre Dios nos da para optar al perdón de todos nuestros pecados y alcanzar su Misericordia. La cuestión es fácil de entender, pero difícil o imposible de aplicar a la vida. Pero, no imposible en cuanto nos lo manda quien da ejemplo con su Vida y su Palabra.

Nuestra naturaleza humana no puede vencer el odio y sed de venganza a la que está sometida. Pero, injertado en Jesús, nuestro corazón herido por el pecado, puede ser transformado y renovado en un corazón nuevo capaz de amar al estilo de Jesús. Es por eso, porque unidos al Señor podemos vencer, Jesús nos lo manda y se ofrece a acompañarnos en ese camino misericordioso de perdón.

Pidamos, pues, esa Gracia para que nuestros corazones sean transformados en unos corazones nuevos, misericordiosos y abiertos al amor y al perdón. Amén.

lunes, 8 de marzo de 2021

DESCUBRIRTE EN LO PEQUEÑO

 

Tú, Señor, has querido manifestarte de forma humilde y pobre. Has venido al mundo de forma desapercibida y sin estridencias, ni bombos ni platillo. Solo has querido hacer partícipes de tu nacimiento a los pastores, gente humilde, pobre y sencilla. Porque, has querido que seamos libres y que decidamos seguirte y aceptarte por ser Tú quien realmente eres, no por tu Poder y tu Fuerza.

Por eso, Señor, te pedimos paz, sabiduría y fortaleza para saber sostenernos firmes, erguidos y seguros ante los peligros, las tentaciones y seducciones que este mundo nos ofrece. Sobre todo, esas ansias de poder, de riqueza y placeres que colman nuestras apetencias y concupiscencias. Danos, Señor, la fuerza de saber mantenernos en tu Palabra y de reconocerte como el Mesías enviado para anunciarnos la Buena Noticia que nos salva y nos da la felicidad y Vida Eterna.

Ayúdanos a huir del poder y la riqueza que nos aparta y aleja de Ti, y danos la capacidad de escuchar tu Palabra y llevarla a la vivencia de nuestra vida de cada día. Enséñanos a saber escucharte, a obedecerte y a reconocerte como el Mesía esperado que nos anuncia el Amor Misericordioso de nuestro Padre Dios. Amén.

domingo, 7 de marzo de 2021

ESTATE, SEÑOR, CONMIGO - Fray Damián de Vegas

 
 
Estate, Señor, conmigo
siempre, sin jamás partirte,
y cuando decidas irte,
llévame, Señor, contigo;
porque el pensar que te irás
me causa un terrible miedo
de si yo sin ti me quedo,
de si tú sin mí te vas.

Llévame en tu compañía,
donde tu vayas, Jesús,
porque bien sé que eres tú
la vida del alma mía;
si tú, vida no me das,
yo sé que vivir no puedo
ni si yo sin ti me quedo,
ni si tú sin mí te vas.

Por eso, más que a la muerte,
temo, Señor, tu partida
y quiero perder la vida
mil veces más que perderte,
pues la inmortal que tú das
sé que alcanzarla no puedo
cuando yo sin ti me quedo,
cuando tú sin mí te vas.

sábado, 6 de marzo de 2021

UN CAMINO AMOROSO Y MISERICORDIOSO

 

El problema está en nosotros, los hijos, que, con unos corazones contaminados y pecadores, rechazamos el amor compasivo yo misericordioso que nos ofrece y nos da nuestro Padre. La parábola del Padre amoroso o hijo pródigo refleja muy bien ese perfil de hijo y hermano que representamos todos. El egoísmo y búsqueda de felicidad que todos ansiamos y buscamos lejos de la casa del Padre; la envidia del hermano mayor que nos delata como hermanos inmisericordes, huraños, vengadores y egoístas. Cumplidores, pero, indiferentes al amor del Padre y hacia los demás.

Realmente, Señor, nos vemos retratados en esos perfiles de hijos y hermanos, y, también, incapaces de reaccionar a esa humanidad herida y contaminada por el pecado. Necesitamos, lo sabemos, lo experimentamos y solicitamos, la presencia de tu Espíritu para poder enfrentarnos a esas seducciones, tentaciones que nos, sometiendo nuestra naturaleza herida, inclinan hacia el odio, la venganza y el mal.

Transforma. Señor, en la medida que nos esforzamos y caminamos, nuestros corazones viciados por el pecado en corazones nuevos, compasivos, comprensivos, humildes, suaves, buenos y misericordiosos para poder levantarnos y emprender el regreso a nuestra Casa paterna de lo que nunca debemos salir. Gracias, Señor, por tu acogida, por tu espera, por tu paciencia y por tu Amor Misericordioso con el que me recibes. Amén.

viernes, 5 de marzo de 2021

ORACIÓN DE ABANDONO

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS. 

 

 

Charles de Foucauld

Padre mío, me abandono a Ti.
Haz de mí lo que quieras.
Lo que hagas de mí te lo agradezco,
estoy dispuesto a todo,
lo acepto todo.
Con tal que Tu voluntad se haga en mí
y en todas tus criaturas,
no deseo nada más, Dios mío.
Pongo mi vida en Tus manos.
Te la doy, Dios mío,
con todo el amor de mi corazón,
porque te amo,
y porque para mí amarte es darme,
entregarme en Tus manos sin medida,
con infinita confianza,
porque Tu eres mi Padre.