Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

jueves, 30 de septiembre de 2021

UNA BUENA NOTICIA NO SE PUEDE SILENCIAR

 

La experiencia nos descubre que cuando tenemos una buena noticia inmediatamente la compartimos con nuestros seres más íntimos y familiares. Experimentamos que no podemos callarnos. ¿Quién se ha guardado su aprobado y fin de carrera? ¿Quién no ha celebrado con entusiasmo y alegría su primer éxito en la vida? La buena noticia n se puede silenciar, se comparte y se celebra.

Y es evidente que cuando conoces a Jesús y experimentas su Mirada, sus Palabras y su Amor sientes el deseo de darlo a conocer a los demás. Sobre todo cuando descubres que Él es esa felicidad que estabas buscando y esa fuente de agua viva que salta a la vida eterna. ¿Cómo te vas a callar? Quieres decirlo, anunciarlo y comunicárselo a todos aquellos que conoces y te salen al paso. Porque, en realidad, todos buscamos la felicidad y la vida eterna.

Pero, sucede que nos encontramos con obstáculos que nos impiden anunciarlo. Primero, los nacidos de nuestras propias carencias y limitaciones. Somos pecadores y nuestro testimonio a veces nos juega una mala pasada.  Y, por otro lado, nos experimentamos impotentes y sin capacidad para encontrar palabras que puedan expresar nuestra fe y lo que verdaderamente sentimos. 

Por eso, Señor, te rogamos desde este humilde rincón de oración, nuestras súplicas para que nos des la Gracia de saber y poder anunciar la Buena Noticia de tu venida y de tu Amor Infinito y Misericordioso que nos  salva y libera de la esclavitud del pecado. Danos, Señor, ese coraje, fortaleza y perseverancia para sostenernos en tu Amor y, viviéndolo, podamos dar un testimonio de vida y palabra coherente. Amén.

miércoles, 29 de septiembre de 2021

LOS ÁNGELES, MENSAJEROS DE DIOS

 

No son de cuentos de hadas, ni figuras imaginarias que nos han sido contadas de niño. Tampoco leyendas. Son seres espirituales creados por Dios por una libre decisión de su voluntad divina. Son seres inmortales, dotados de inteligencia y voluntad. La misión de los ángeles es amar, servir y dar gloria a Dios, ser sus mensajeros, cuidar y ayudar a los hombres. Ellos están constantemente en la presencia de Dios, atentos a sus órdenes, orando, adorando, vigilando, alabando a Dios y pregonando sus perfecciones. Son mediadores, custodios, protectores y ministros de la justicia divina.

Sirva esta introducción tomada de - Catholic.net - para dejar sentado la importancia y presencia de los ángeles en nuestra vida. Y también este testimonio que puede respaldar más nuestro comentario: San Juan XXIII, el "Papa bueno", cómo le llamaba la gente, comentó en cierta ocasión: «Siempre que tengo que afrontar una entrevista difícil, le digo a mi ángel de la guarda: Ve tú primero, ponte de acuerdo con el ángel de la guarda de mi interlocutor y prepara el terreno. Es un medio extraordinario, aún en aquellos encuentros más temidos o inciertos...».

Los ángeles participan en nuestra vida, nos acompañan, nos asisten y nos cuidan. Posiblemente, si te paras y revisas tu vida descubrirás muchos momentos en que los ángeles han intervenido en tu vida para orientarte, para avisarte y para abrirte los ojos y no caigas en el peligro. Han sido enviados para recordarnos que también nosotros somos hijos de Dios, aunque diferentes, con cuerpo y alma. Es decir, materia y espíritu. Pero, hijos también. Y Dios nos conoces y nos llama.

Pidamos y digamos con Natanael: «Rabbí, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel». Y abramos nuestro corazón para recibir la Gracia de, como Natanael, y ver a los ángeles subir y bajar sobre el Hijo del Hombre. Amén.

martes, 28 de septiembre de 2021

Martes, XXVI semana del Tiempo Ordinario ´LAUDES

 

 

 

Porque, Señor, yo te he visto
y quiero volverte a ver,
quiero creer.

Te vi, sí, cuando era niño
y en agua me bauticé,
y, limpio de culpa vieja,
sin velos te pude ver.

Devuélveme aquellas puras
transparencias de aire fiel,
devuélveme aquellas niñas
de aquellos ojos de ayer.

Están mis ojos cansados
de tanto ver luz sin ver;
por la oscuridad del mundo,
voy como un ciego que ve.

Tú que diste vista al ciego
y a Nicodemo también,
filtra en mis secas pupilas
dos gotas frescas de fe.

lunes, 27 de septiembre de 2021

SIN LUGAR A DUDA, MEJOR SUMAR QUE RESTAR

 

El amor cuando es verdadero amor siempre suma. Porque, el amor es positivo, siempre abierto a la mejora, al crecimiento y a la verdad. Pero, cuando no lo es y se esconde en las falsas apariencias, no solamente resta sino que mata. Amar es vivir en la verdad, sin tapujo ni apariencias. La verdad te hace libre y quien ama de verdad busca la libertad y la justicia. Y toma siempre el camino de justo.

El amor busca siempre la igualdad, se hace pequeño, humilde y se pone a la altura de aquel que lo necesita. El  es comprensivo, paciente, suave, bueno y se deja querer. Busca la Verdad con mayúscula, porque solo la Verdad te hace libre. Libre para escoger lo justo y servir al que lo necesitan. Justo para abrir los brazos a todos los que creen estar afuera o a los que se creen dentro.

El amor es liberador y se abre a todos. Está en y con el grupo, pero no encerrado por y con el grupo, sino abierto al grupo en Xto. Jesús. Porque, Él es la referencia, el guía, quien nos salva y nos da la capacidad para amarnos y permanecer unidos. Y es eso lo que hoy queremos pedirte e insistir, Señor, que Tú seas siempre el centro de nuestra mirada y que, estemos o no en el grupo, Tú seas la antorcha que nos sostenga unidos y nos mantengas perseverantes en el amor de unos para con los otros. Amén.

domingo, 26 de septiembre de 2021

ILUMINA MI ESPÍRITU SEÑOR PARA QUE SEAS TÚ MI REFERENCIA

 

No son malos ni tampoco sobran. Los grupos, asociaciones y movimientos eclesiales son necesarios pero no son los que salvan. Solo Tú, Señor, salvas. Y, por tanto, solo Tú eres mi referencia y mi libertad. Abro, pues, mi espíritu a la acción del Espíritu Santo para que sea Él quien dirija mis pasos y oriente el camino de mi vida. En Ti, Señor, pongo todas mis esperanzas y a Ti confío todas mis fuerzas y acciones que, por y para tu Gloria, mi vida sea auxiliada, asistida y dirigida por la acción del Espíritu Santo.

Sé, Señor, que corremos serios peligros cuando, sin darnos cuenta nos olvidamos de Ti y damos prioridad a los grupos, a sus fines y objetivos. E incluso, nos consideramos diferentes a los que no están en nuestro grupo. Inconscientemente pensamos que somos el grupo al que todos deben y tienen que pertenecer.  ¡Sálvanos, Señor, de ese peligro!

Porque, Tú nos has señalado el Camino, que, precisamente, eres Tú, Camino, Verdad y Vida. Tú nos has enviado al Espíritu Santo para que oriente nuestra vida y nos dirija según tu Voluntad y para el bien de todos. Y el Espíritu no sabe de grupos ni de pensamientos ni diferencias. ¡Ven Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en nosotros la llama de tu Amor! ¡Sopla y dirige nuestras vidas según tu Voluntad! Amén.

sábado, 25 de septiembre de 2021

SERÁ INÚTIL TRATAR DE COMPRENDER, SOLO TE PIDO, SEÑOR, QUE NOS ILUMINE Y AUMENTES NUESTRA FE

 

Sé, Señor, que es problema de fe. Mi fe es débil y muy frágil. Necesito que la afirmes en mi corazón dubitativo y vacilante. Esa es mi primera petición. No puedo asimilar ese Infinito Amor que Tú me manifiesta, me revelas y me demuestra entregando a tu Hijo en una muerte de Cruz. No llego a entender tanto amor y si me empeño en buscar razones que puedan justificarlo, me pierdo y menos lo entiendo. 

No hay razones que puedan explicar lo que has hecho y lo que haces cada día, Señor. No se puede entender. Esa es la palabra que repito y repito desde lo más profundo de mi corazón. Solo te pido, Señor, que me ilumines y aumentes mi fe, porque quiero y necesito creer. Sin fe mi esperanza se debilita y se desvanece. Es entonces cuando el mundo, demonio y carne se aprovechan y atacan. Seducen con sus pasiones, con sus apetitos y sus ofertas concupiscentes. Y, solo, Señor, claudico y me someto a la esclavitud  del mundo, del demonio y la carne.

Por todo ello, Señor, utilizo este humilde rincón de oración para pedirte y suplicarte que me des el don de la fe, que ilumines mi mente y, sin más búsqueda de razones y por qué, enciende mi corazón y aumente mi fe para que todo mi ser y obrar descante en tu Cruz. En Ti, Señor, crucificado, muerto y Resucitado. Es ahí donde debe estar fijada y apoyada mi mirada y mi corazón. Amén.

viernes, 24 de septiembre de 2021

EN LA ESCUCHA DE TU PALABRA Y EN DIÁLOGO CONTIGO, SEÑOR, NOS MOSTRARÁS LA VERDAD.

 

 

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS. 

No pierdas el tiempo en buscar donde no está la fe. Ni, tampoco, esperes a que otros te la puedan dar. Porque, ni tú solo ni otros pueden encontrarla y, menos, darla. La fe es un don de Dios que solo el Señor puede dar. Eso sí, otros pueden ayudarte, ponerte en camino, darte con su vida y palabra testimonio y provocar en ti ese deseo de búsqueda. Pero, solo en el Señor podrás encontrarla.

Posiblemente, por eso y para eso, tomando naturaleza humana se ha hecho como tú y como yo, y, poniéndose a nuestro lado ha buscado y provocado iniciar una conversación contigo y, también conmigo. ¡No desaprovechemos esta oportunidad y entremos en diálogo con Él! Nos espera y nos abre sus brazos y nos aclarará las dudas que tengamos. Sí, ten confianza y háblale.

Señor, sabes quién soy y como soy. Yo no te conozco bien y quisiera conocerte mejor. Descúbreme tu Rostro, Señor, y ayúdame a encontrarte en esos marginados, pobres y ciegos donde tú sueles y prefieres estar según nos dice. Yo también quiero estar contigo en esos lugares y con esos que Tú prefieres. Dame la Gracia de encontrarte y conocerte. Amén.

jueves, 23 de septiembre de 2021

SÉ, SEÑOR, QUE ESTÁS DENTRO DE MÍ

 

Me empeño, quizás movido por mis apetencias e inclinaciones humanas, a buscarte en las cosas de este mundo. Y no te encuentro. Posiblemente, me retire pronto de continuar la búsqueda, pues las seducciones con las que el mundo me tienta, me pueden y me vencen. Y, si mi empeño es fuerte, terminaré por darme cuenta que Tú, Señor, no perteneces ni estás - por supuesto - en este mundo.

No te encuentra entre las riquezas, ni en el poder; tampoco en las diversiones descontroladas ni en el éxito o fama. No te esconde tras los honores - porque no los buscas - ni tampoco estás entre los poderosos. Luego, ¿dónde te encuentras, Señor? 

La respuesta que me das es simple: "Dentro de ti, en el centro de tu corazón". Sin embargo, es posible que te haya apartado para un rincón y me sea difícil, ante todas las cosas hermosas de este mundo, que te vea. Por eso, Señor, postrado ante Ti desde este mi humilde rincón de oración, te busco y quiero verte. Es eso lo que realmente te pido desde ese pobre corazón donde quizás te haya perdido y no haya sabido guardarte en el lugar más privilegiado y central.

Sé que no me será fácil encontrarte, y menos si  te busco fuera de mí. Te pido que me des la sabiduría de saber dónde buscarte y de descubrir tu presencia en mi corazón. Te pido, Dios mío, que te hagas presente en mi vida y que me des una señal que yo pueda ver y advertir tu presencia para seguirte sin titubeos ni vacilaciones. Sé que has entrado en mí desde la hora de mi bautismo y quiero pedirte la Gracia de descubrir tu Amor y tu Infinita Misericordia. Amén.

miércoles, 22 de septiembre de 2021

TÚ ERES, SEÑOR, MI SEGURIDAD, MI PODER Y MI FUERZA

 

Señor, si Tú me envías, sabiendo quién soy y cómo soy, es porque confías en mí. ¿Cómo puedo yo negarme y no confiar en Ti? ¿Acaso pienso que mi palabra es mas sabía que la Tuya? ¿Acaso creo que me bastan mis fuerzas? Perdona, Señor mi osadía y mi atrevimiento. Perdona, Señor, mi imprudencia y mis pecados. Dame, Señor, la sabiduría de entenderte y de comprender que solo en Ti puedo encontrar el poder y la fuerza de liberarme de mis ataduras y esclavitudes.

Tú, Señor, eres la Roca que me salva y en la  que quiero apoyarme. Dame la Gracia de saberlo y de llevarlo a mi vida. Toda mi seguridad, mi fortaleza, mi apoyo y, por supuesto, mi salvación están en Ti, Señor. Y en Ti, mi Señor, quiero poner todas mis dudas, miedos, temores y debilidades para caminar obedeciendo tus mandatos.

Porque, Tú, Señor, eres el Camino, la Verdad y la Vida que me lleva a esa morada junto a la Casa de tu Padre. Amén.

martes, 21 de septiembre de 2021

AYÚDANOS, SEÑOR, A DESCUBRIR LA FUENTE DEL AMOR

 

Posiblemente hay muchos momentos en nuestra vida que experimentamos un gran gozo que nos llena de una gran paz y felicidad. Y, no precisamente, por algún éxito u obra grande, sino por experimentar el deseo de darte o recibir amor. Tanto, en lo uno como en lo otro experimentamos un gran gozo y paz.

Sí, realmente nuestro gozo, felicidad y paz no están en el poder, sino en el amor. Y es por eso, Señor, que te pedimos que cambies nuestro endurecido corazón, egoísta y de piedra, enfermo de poder y de riqueza, por un corazón humilde, paciente, comprensivo, bueno, generoso, dado y disponible a amar y ser amado. Un corazón misericordioso capaz de amar con misericordia.

Porque, tanto amar como dejarse amar encierran, por nuestra naturaleza pecadora - gran dificultad. Nos cuesta abrirnos, tanto para darnos como para recibir. ¿Lo experimentas? Hoy, después de experimentar esos deseos y dificultades, nos atrevemos, Señor, a pedirte que nos des esas fuerzas y deseos de amar, y de corresponder a tu Amor tratando de amar y darnos a los demás. Porque, en la medida que amamos, manifestamos nuestro amor a Ti, Señor. Amén.

lunes, 20 de septiembre de 2021

TE PIDO, SEÑOR, QUE MI VIDA SE UN HAZ LUMINOSO QUE ALUMBRE TU PALABRA

 

Toda vida transmitirá lo que realmente vive. Conocemos a las personas por sus formas de actuar y por sus actos. Decimos, éste es así por lo que transmite con sus obras y palabras, y...etc. 

Su forma de actuar nos descubre que tras sus actos se esconde su testimonio y, por tanto, su luz. Esa luz que cada uno dejamos al mostrarnos tal y como somos. Y, reconociendo que somos pecadores, sabemos que nuestra luz tiene mucho también de oscuridad y de sombra.

Por tanto, desde esta pobreza y humildad, Señor, queremos pedirte que ilumines nuestros oscuros corazones y nos des la fortaleza, la sabiduría y la paz para convertir nuestras sombras y oscuridades en luz que alumbre el camino, no solo el nuestro, sino también al que, junto a nosotros, camina a nuestro lado. Danos, Señor, la serenidad de perseverar, de esforzarnos y de ser pacientes para superar nuestras oscuridades y abrirnos, confiados, a la acción del Espíritu Santo.

Haz, Señor, que nuestras vidas sean haces de luz luminosos que alumbre y proclamen tu Palabra, para que los que, estén presentes en nuestras vidas reciban ese haz de luz luminoso que le lleve a un encuentro personal contigo y abran sus corazones a tu Palabra. Amén.

domingo, 19 de septiembre de 2021

NO PERDAMOS NUNCA EL CAMINO QUE NOS SEÑALA LA CRUZ

 

Cristo no nos ocultó ese camino de Cruz que el mismo iba a recorrer. Se lo dijo a sus discípulos tratando de que no se despistaran y casi en privado. No quería que le molestasen. Sin embargo, leemos en el Evangelio de Marco - Mc 9,30-37 - que los discípulos estaban en otros menesteres. Posiblemente, lo mismo que nos ocurre hoy, nuestro corazón sigue a Cristo, pero nos preguntamos: ¿Realmente es Cristo el centro de nuestro corazón?

Esa es la pregunta, Señor, que queremos respondernos hoy, y como descubrimos nuestra impotencia, nuestra pobreza y nuestras limitaciones, queremos , humildemente, suplicarte que nos ilumines, nos fortalezca y nos des  voluntad y valentía para caminar tras de Ti mirándote y abrazando tu Cruz. Porque, tu Cruz, Señor, es también nuestra cruz, que aunque pequeña y humilde, es la que Tú, que nos conoces y sabes de nuestra capacidad y resistencia, nos has dado.

Queremos llevarla dignamente y con todas la fuerzas de la que somos capaces. Queremos llevarla humildemente y abiertos a la acción del Espíritu Santo. Queremos seguirte entregándote nuestra vida para que Tú, en el Espíritu Santo, disponga de nosotros. Queremos ser fieles a tu Amor y Misericordia y dejarnos modelar por tu Espíritu para, fortalecidos en Ti, soportar con valentía, alegría, gozo y paciencia la cruz que nos lleva a compartirla

sábado, 18 de septiembre de 2021

HERIR AL INFINITO DE BENJAMÍN GONZÁLEZ BUELTA, SJ

 

 

No crece la vida de Dios

desde la muerte humana,

sino la plenitud humana

desde la muerte de Dios.

 

No realza la fortaleza de Dios

la debilidad nuestra,

la debilidad de Dios

construye nuestra fortaleza.

 

Porque sólo los ídolos

se alimentan de la sangre ajena,

pero Dios derrama la suya

para salvar la nuestra.

 

El cauce frío del hierro

que desgarra la carne,

orada con el mismo golpe

el corazón encarnado de Dios .

 

Y donde un golpe nos hiere

acude incesante el agua viva,

pues sólo puede manar Amor

por el boquete abierto al Infinito.

viernes, 17 de septiembre de 2021

¡AY DE MÍ SI NO EVANGELIZARA!

 

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS. 

 

En la carta de Pablo a los corintios - 1 Co 9,16-19.22-23 -  que te invito a que leas, aparece esta expresión: ¡Ay de mí si no evangelizara! Y es que, si has llegado a encontrarte con Jesús, su Palabra llena tu corazón hasta el punto que se derrama en tu vida, y se nota. Eso es precisamente evangelizar. No se trata de grandes discursos ni de ser un pozo de sabiduría. Se trata de dejar que el Espíritu Santo, que, precisamente has recibido en tu bautismo, entre en tu corazón y te diga lo que tienes que hacer.

Por eso, Espíritu Santo, llamamos tu presencia para que, instalado en mi pobre corazón, me ilumines y pongas las palabras que realmente debo decir. Palabras que vayan en correspondencia y coherencia con mi vida. Sintoniza, Espíritu de Dios, mis obras con mis palabras, para que mi humilde siembra, por tu Gracia, dé los frutos esperados.

No perdamos la paciencia ni la perseverancia. Hay muchas formas de transparentar la presencia de Dios en nosotros, y, es eso precisamente evangelizar, transparentar la presencia de Dios a los demás. Revístenos, Señor, de tu Gracia para que todos nuestros actos y palabras sean fiel reflejos de tu presencia y adviertan a los demás de tu Infinito Amor y Eterna Misericordia. Amén.

jueves, 16 de septiembre de 2021

TU AMOR, SEÑOR, ME INVITA A PERDONAR

 

Señor, estoy vivo por tu Infinita Misericordia. Y tengo esperanza por tu Infinita Misericordia. He recibido de ti la vida y todo lo que con ella me ha sido regalado. Señor, yo quiero poner en tus Manos todo lo que he recibido para ponerlo al servicio del amor. Y, para eso, necesito amar. Un amor que, obviamente perdona, pues, sin perdón será difícil entender el amor.

Por tanto, Señor, necesito perdonar y eso me descubre que tengo que despojarme de todo aquello que me estorba: egoísmos, avaricia, odio, venganza, arrogancia, poder, riqueza...etc. Todo lo que levanta una barrera en mi corazón impidiéndome perdonar y, por tanto amar.

Porque, yo sé, Señor, que Tu perdonas todas mis faltas, mis debilidades, mis pecados. ¿Cómo puedo yo presentarme delante de Ti sin perdonar a mis hermanos? ¿Acaso pienso que sin perdón, Tú, luego, me perdonas? Lo dices muy bien en el Evangelio, el perdón va unido al amor. Por eso, Señor, te pido y suplico que llenes mi corazón de verdadero amor para que mi perdón sea también mucho y pueda también recibir mucho perdón por todas mis faltas y pecados. Amén.

miércoles, 15 de septiembre de 2021

DAME LAS FUERZAS, SEÑOR, PARA CARGAR MI CRUZ SOBRE MIS HOMBROS

 

Es obvio que mi cruz pesa, pero si es la que me toca, seguro, Señor, que, contigo, tendré las fuerzas necesarias para soportarla y llevarlas sobre mis hombros. Sé que, a lo largo del camino su peso puede ser insoportable, pero, también sé que, contigo, Señor, la carga se hace liguera y más suave. Por eso, te ruego, mi Señor, que me acompañes en mi camino de cruz, porque, yo quiero cargarla contando contigo.

Experimento que mis fuerzas fallan, se desgastan y siento deseos de abandonar la lucha. Mis hombros se desgastan y quedan maltrechos. Pero, ¡Señor, a Ti te pasó lo mismo! ¡Y no protestaste, no te rebelaste ni salió de tu boca ninguna queja!  ¿Por qué, Señor, no soy capaz de mirarte y tomar fuerzas y ejemplo de Ti?

Tú, Señor, lo lograste y venciste a la muerte, ¡Resucitaste! ¿Por qué me fe se desvanece y se debilita? ¿Acaso no creo en Ti? Dame, Señor, esa fuerza que necesito y aumenta mi fe para cargar sobre mis hombros esa cruz que me pertenece soportar. Y, sobre todo, aceptarla y añadirla a tu Cruz para que, por tu Gracia, sea fuente de purificación para todos nuestros pecados.

Gracias, Señor, porque, a pesar del dolor, que Tú me alivias, experimento que mi carga - aunque su peso permanezca - se hace más llevadera y ligera. Encuentro, aún con el dolor, sentido a mi vida y a mis sufrimientos, porque, Tú, mi Señor, has venido a aliviarnos, a salvarnos y a darnos las fuerzas para vencerlos permaneciendo a tu lado en gozo de plenitud eterna. Y, gracias también por tu Madre, que me la das como Madre y, junto a ella encuentro cobijo, fuerza, testimonio y ánimo para permanecer fiel a la Cruz donde está nuestra salvación. Amén.

martes, 14 de septiembre de 2021

DAME, SEÑOR, FUERZA Y VOLUNTAD PARA CARGAR CON MI CRUZ

 

No es nada fácil cargar con la cruz que nos toca vivir. La cruz de nuestro tiempo; la cruz de nuestra familia; la cruz de nuestras circunstancias y la cruz de nuestras apetencias y egoísmos. Cada época, cada momento tiene su cruz y, según el nuestro, nos tocará una cruz diferente. Es evidente que en estos momentos vivimos una cruz común, la del Covid19 y, sin embargo, con unas circunstancias muy diferentes en cada lugar.

Es claro y notorio que el pueblo de Israel, según las épocas, vivió diferentes camino de cruz: la esclavitud en Egipto,  el desierto, la deportación, Se...etc. Y, también es cierto que, cada uno durante la trayectoria de su vida tienen diferentes momentos de cruz y dolor: una muerte, una enfermedad, una desilusión...etc. Pero, esas diferentes cruces que aparecen en el camino de nuestras vidas tienen un denominador común: aceptarlas, cargarlas sobre nuestros hombros y, mirando a la Cruz de la Crucifixión creer en el Crucificado y en la Resurrección.

Dame, Señor, fuerza y voluntad para cargar con mi cruz. Una cruz que, escondida en cada momento e instante de mi vida se me atraganta, me endurece mi corazón y me cuesta aceptarla y acomodarla sobre mis hombros para llevarla junto a Ti. Una cruz que muchas veces se me presenta en los problemas y asuntos familiares; una cruz que, otras veces, se manifiesta en la acedia del abandono, del deseo de dejarlo todo, del desfallecimiento. Hay muchas cruces que, sin darnos cuenta, nos amenazan y nos oprimen para que bajemos nuestra mirada y nos quedemos en las comodidades y seducciones de este mundo.

No permitas, Señor, que seamos vencidos por nuestras propias pasiones, por nuestras concupiscencias y por nuestros egoísmos. Te pedimos la Gracia de perseverar en esos momentos de tedio, de acedia, de desfallecimiento y de sostenernos siempre firmes en la fe. La fe en esa Cruz, donde Tú has dado tu Vida y con la que has ganado para nosotros la Misericordia de nuestro Padre Dios. Amén.

lunes, 13 de septiembre de 2021

¡SEÑOR, AUMENTA NUESTRA FE!

 

No me cansaré de pedirte y suplicarte, Señor, que aumentes mi fe. Porque, de mí fe dependerá que yo te siga, te obedezca y crea en tu Palabra. Porque, de mi fe dependerá que yo persevere, me sostenga ante las tempestades y continúe por tu Camino. No el mío, sino el Tuyo. 

Dame, Señor, esa fe como la de aquel Centurión que fue capaz de creer en tu Palabra y que, para que se realizará, la distancia no sería ningún impedimento. Dame fe, Señor, para que, aún, estando lejos de Ti pueda creer que estás cerca; para que, no viéndote, pueda sentirte y saber que caminas conmigo. Dame fe, Señor, para que tenga esa esperanza de saber que Tú me cuidas, me proteges y me señalas el camino que lleva a tu Casa y en la que me tienes preparada una morada.

Sí, Señor, quiero tener esa fe humilde, pobre, inocente como la de los niños sin madres, sin padres, indefensos y perdidos que claman a un Padre Dios bueno que los proteja y les de todo eso a lo que tienen derecho y el mundo les niega. Sí, Padre, en Ti quiero creer y, sabiéndome débil, pequeño e indefenso, te pido que me conserves la inocencia de seguirte y creer, como Padre que eres, que solo Tú me llevas a esa Casa donde me espera un Amor Infinito y Misericordioso para toda la eternidad. Amén.

domingo, 12 de septiembre de 2021

¡SEÑOR!, YO, COMO PEDRO, TAMBIÉN ME CONFUNDO

 

También a mí me cuesta entenderte, Señor, y aceptar este mal que permites en este mundo en el que ahora vivimos. Me cuesta aceptar a los que queman tus iglesias, cometen sacrilegios, matan a los niños en el seno de sus madres, destruyen el santo matrimonio y la familia y muchas barbaridades más. ¿Cómo es posible que Tú, Señor, permitas esto? ¿Es esa la cruz de la  que hablabas y la que tenemos que cargar?

Hoy, Señor, como también hicieron Pedro y demás apóstoles, queremos seguirte, aunque muchas cosas se nos atraganten y no entendamos. Aunque, incluso, tengamos que perdonar, precisamente a esos que nos amenazan y nos destruyen. Confiamos en Ti, Señor, en tu Palabra y en tu Misericordia Infinita. Danos paz, fortaleza y sabiduría para soportar todas esas dudas, confusiones, sacrificios y dificultades que este mundo nos presenta.

Creemos en Ti, Señor y queremos seguir tu Camino, tu Verdad y tu Vida. ¿A quién vamos a acudir? Este mundo no nos da lo que realmente buscamos, esa felicidad eterna. El mundo te ofrece una felicidad irreal y aparente que, de la misma manera que se presenta, se desvanece. Tú, Señor, tienes Palabra de Vida Eterna y, a pesar de la cruz que cargamos sobre nuestro hombros, creemos en tu Misericordia y que, por tu Amor, esa carga será ligera y la podamos soportar. En Ti, Señor, ponemos todas nuestras esperanzas y a Ti nos confiamos. Amén.

sábado, 11 de septiembre de 2021

CULTIVA MI CORAZÓN, SEÑOR, PARA QUE DÉ FRUTOS BUENOS

 

Necesitamos estar en el Señor para que nuestro corazón, por su Gracia, sea un huerto donde los frutos que se cultiven sean frutos de amor. Reconocemos y sabemos que nuestra árbol - corazón - para seguir con el símil evangélico, es un árbol enfermo, contaminado por la mala tierra - pecado - y, en consecuencia inclinado a que su cosecha se mala, dé frutos malos.

Y nada podemos hacer si no contamos con el Labrador que nos pode, nos abone y nos riegue con el agua de la Gracia para que nuestra tierra, bien abonada, haga que las raíces de nuestro árbol - corazón - se hundan en la tierra y mueran para que den buenos frutos.

Por lo tanto, pidamos al Señor que convierta nuestra tierra en tierra buena y bien abonada. Pidamos, también, que nuestra fe y nuestras obras, consecuencia de nuestra fe, estén sedimentadas y apoyadas en Cristo, el Señor. Porque, Él, es la Roca que nos da fortaleza, nos sustenta y nos fija, por la fe, a resistir todas esas embestidas con las que el mundo trata de seducirnos y enfermarnos.

Pidamos al Señor que transforme nuestro corazón y que nos convierta en tierra buena, tierra de bondad que da buenos frutos. Y, también, que nos apoyemos en Xto. Jesús, Roca firme que sostiene nuestra fe contra todas las tempestades y tormentas que azotan nuestras raíces cristiana atacando y amenazando nuestra fe. Amén.

viernes, 10 de septiembre de 2021

NO QUIERO QUEDARME EN LA OSCURIDA. QUIERO SEGUIR TUS PASOS, SEÑOR

 

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS. 

 

Esa es mi intención, a pesar de que el camino no me resulte lo grato que mis apetencias, mis deseos humanos y mis pasiones exijan y pidan. Es la lucha contra mí mismo. Es la lucha contra mis deseos concupiscentes y mis inclinaciones al confort y la comodidad. Es mi lucha contra mis miedos y mis cruces. Pero, ese, Señor, es el camino que Tú has elegido y el que Tú has recorrido poniéndote en primer lugar ante tus discípulos y seguidores. Y nos has preguntado si realmente queremos seguir sus pasos o también queremos irnos como hacen otros muchos - Jn 6, 67 -.

El mundo nos tienta y trata de seducirnos. Nos pone impedimentos hasta el extremo de amenazarnos de muerte, pero, Tú, Señor, nos has dicho que nuestro camino, como el Tuyo, es un camino de cruz. Danos, eso venimos hoy a pedirte, Señor, luz, y abre nuestro ojos para ver, para no quedarnos en la oscuridad, para, fortalecidos por tu Gracia, avancemos firmes y convencidos de tu Infinita Misericordia y de tu ilimitado Amor.

Queremos ver, Señor, y salir de la oscuridad en la que nos envuelve este mundo. Un mundo de comodidades, de mentiras y traiciones, de injusticias y búsqueda del placer por y para el placer. Un mundo donde la búsqueda de la felicidad pasa por la explotación, la esclavitud y la pobreza y sacrificio de otros. Un mundo donde no impera la verdad ni la justicia no es un mundo querido por ti, Señor.

Por eso, conscientes de nuestras debilidades, de nuestra oscuridad y pecados, te pedimos, Señor, que nos des luz, fortaleza, voluntad y deseos de buscarte, de mirarnos y limpiar nuestras vigas para, más limpios y transparentes poder humildemente quitar las motas de nuestros hermanos. Amén.

jueves, 9 de septiembre de 2021

INVOCACIÓN AL SEÑOR (SAN AGUSTÍN)

 

Grande eres, Señor, y muy digno de alabanza1; grande tu poder, y tu sabiduría no tiene medida2. ¿Y pretende alabarte el hombre, pequeña parte de tu creación, y precisamente el hombre, que, revestido de su mortalidad, lleva consigo el testimonio de su pecado y el testimonio de que resistes a los soberbios?3 Con todo, quiere alabarte el hombre, pequeña parte de tu creación. Tú mismo le excitas a ello, haciendo que se deleite en alabarte, porque nos has hecho para ti y nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en ti.

Dame, Señor, a conocer y entender qué es primero, si invocarte o alabarte, o si es antes conocerte que invocarte. Mas ¿quién habrá que te invoque si antes no te conoce? Porque, no conociéndote, fácilmente podrá invocar una cosa por otra. ¿Acaso, más bien, no habrás de ser invocado para ser conocido? Pero ¿y cómo invocarán a aquel en quien no han creído? ¿Y cómo creerán si no se les predica?4

Ciertamente, alabarán al Señor los que le buscan5, porque los que le buscan le hallan y los que le hallan le alabarán.

Que yo, Señor, te busque invocándote y te invoque creyendo en ti, pues me has sido predicado. Te invoca, Señor, mi fe, la fe que tú me diste e inspiraste por la humanidad de tu Hijo y el ministerio de tu mensajero.

miércoles, 8 de septiembre de 2021

FE, UN IMPULSO DE ABRIRME AL AMOR CON MAYÚSCULA

 

En el camino de nuestra vida, la experiencia nos sacude y despierta para que salgamos de esa comodidad instalada dentro de nosotros mismos. Crecemos en la fe, pero llega un momento - dudas y tentaciones - que nos cerramos e impedimos que nuestra fe avance y crezca. Los miedos, la incertidumbre e inseguridades nos paralizan. Y, por otro lado, nos sentimos instalados, cómodos y acomodados piadosamente en la rutina de cada día - nuestra piedad - y en nuestra relación personal con el Señor.

¿Qué nos sucede? ¿Quizás hemos llegado al final de la medida, tanto de nuestra fe como de nuestra santidad? Sin lugar a duda, la fe es un camino que solo terminará cuando se pare nuestro corazón. Mientras debemos seguir caminando, avanzando y creciendo. Y, sin dejar de pedirla, de llamarla, de buscarla, porque, la fe es un don de Dios. ¡Señor, aumentanos nuestra fe!

Sin dejar de pedirla ni un solo día, ni un solo instante. Danos, Señor, la fe que alimenta nuestra esperanza y fortalece nuestra voluntad para, a pesar de nuestras debilidades y pecados, nos sostengamos firmes y disponibles en y para seguir tus pasos sin desfallecer. Te pedimos que nos sostenga y nos llene de esa fortaleza para creer en tu Palabra y hacer tu Voluntad. Amén.

martes, 7 de septiembre de 2021

LA ORACIÓN ES LA PUERTA DE LA AMISTAD CON DIOS

 

La única manera de relacionarnos con nuestro Padre Dios es a través de la oración. No le vemos, pero le conocemos a través de la Palabra que su Hijo, nuestro Señor, nos ha anunciado. Y, también, a relacionarnos con Él a través de la oración. 

Nos ha enseñado esa hermosa oración del Padrenuestro donde sintetizamos la adoración y alabanza con la misericordia y las necesidades de cada día. Y donde ponemos de manifiesto la necesdidad de relación amorosa y misericordiosa con todos. Incluso con aquellos que nos han ofendido.

Necesitamos hablarle al Señor de nuestros interrogantes, nuestras dudas, inquietudes, necesidades e incluso pecados. Pedirle misericordia por nuestras caídas y debilidades y confiar que como buen Padre nos perdona por su Infinita Misericordia. Necesitamos sentirnos cerca de Él y, con verdadera confianza, compartir todas nuestras alegrías como también todos nuestros sufrimientos. 

La oración es el momento donde hacemos un aparte con el Señor para, silenciando nuestra vida interior poder mirarnos, asistidos por el Espíritu Santo, interiormente - valga la redundancia -  e ir cambiando nuestro endurecido corazón según la Palabra y la Voluntad de nuestro Padre Dios.

Por eso, desde este humilde rincón de oración, pidamos a nuestro Padre Dios que nos dé la fe, perseverancia, fortaleza y capacidad para sostenernos en la oración serena, reflexiva e introspectiva cada día de nuestra existencia. Y que, permaneciendo en su presencia, por su Gracia, ir dando pasos que nos ayuden a caminar en su Palabra y Voluntad. Amén.

lunes, 6 de septiembre de 2021

AMAR TE DA LIBERTAD

 

Cuando se ama se actúa por y para el bien. Nunca el amor busca perjudicar sino todo lo contrario, persigue el bien, la verdad y la justicia. De alguna manera la libertad se conjuga en el amor. Cuando alguien actúa con amor lo hace libremente, sin mediaciones, ni pasiones, ni intereses. Lo hace simplemente porque desea hacer el bien sin buscar ninguna recompensa. Esa es la verdadera actitud de la libertad.

Dios actúa por y con Amor. Es libre, porque nada ni nadie le obliga a tomar una decisión ni a actuar por algún motivo o interés. Lo hace libremente por Amor. Nunca entenderemos ese Amor de Dios hasta que estemos en su presencia. No lo merecemos y es simplemente, por su Infinita Misericordia.  

Le cura el brazo a aquel enfermo en la sinagoga por verdadero amor. Y lo hace desde la plena libertad de saberse el Hijo de Dios Padre. Un Dios Padre que nos ama y que nada malo puede hacer. Todos sus actos son verdaderas obras de amor misericordioso. Es el hermoso y gran misterio del Amor de Dios que nunca entenderemos hasta que lleguemos, por su Infinita Misericordia, a estar delante de su presencia.

Dame, Señor, la capacidad de amar con verdadero amor. Ese amor que me hace libre, que me impulsa a amar la verdad y la justicia. Dame, Señor, la fortaleza y voluntad de vivir en la búsqueda constante e insistente de amar sin exigir ni  desear recompensa ni beneficios ni compensaciones. Simplemente par amor. Un amor desinteresado, incondicional, sin intereses ni beneficios. Un Amor como el tuyo, que desde lo más profundo de mi corazón no entiendo ni podré entender, pero que busco y experimento estar llamado a él. 

Dame, Señor, encontrar esa felicidad que deseo y quiero en el amor. Porque, es ahí donde se esconde la felicidad que todos erróneamente buscamos en otros lugares de este mundo. Y que solo, Señor, se encuentra en Ti. Precisamente en tu Amor. Amén.

domingo, 5 de septiembre de 2021

MANTENIENDO LA VIGILANCIA (HAFIZ)

 

Por la mañana
cuando comencé a despertarme
apareció de nuevo
ese sentimiento
de que Tú, Amado
me has estado mirando toda la noche
manteniendo la vigilancia,
ese sentimiento
de que, tan pronto como ocmencé a despertar
besaste con tus labios mi frente
y encendiste una lámpara sagrada
en mi corazón.

sábado, 4 de septiembre de 2021

ENSÉÑANOS, SEÑOR, A SERVIR CON AMOR

 

Hacer obras buenas por y para que vean que soy buena persona, no voy a decir que está mal, pero, si diré que sirve para poco. Sí, realmente ayuda, pero si son realizadas para engordar y magnificar tu vida, tu importancia, tu ego narcisista y admiración, de poco te valen. Toda obra por grande y repetidas veces que se haga si no nacen de la buena intención del amor y por amor, serán obras sin valor.

Por eso, Señor, te pedimos desde este rincón de oración que nos enseñes a servir con y por amor. No es cosa fácil vencer tus propias apetencias y hábitos. Despojarte de tus apegos exige un gran esfuerzo y una recia voluntad y, posiblemente, con tus propias fuerzas no podrás conseguirlo. Necesita un impulso, una chispa de motivación, ese granito de fe que te alimenta y llena de esperanza para, en manos del Espíritu Santo, superar todas esas dificultades que tratan de seducirte y minar tus esfuerzos y actitudes.

Experimento en mí mismo todas esas actitudes y, la batalla de cada día es resistir y resistir. Pero, resistir, ¿en y para qué? Porque, cuando no hay una meta trascendente que mira por encima de las cosas que te ofrece este mundo, tarde o temprano te llega el desfalleacimiento. Solo, apoyado en el Señor podemos avanzar y superar todos los obstáculos. Y el principal motor es el amor. Amar como el Señor - Xto. Jesús, nos ama y nos enseñó, con su Vida y Obras, a amar. 

Un amor incondicional y gratuito. Un amor consciente y dado con alegría y voluntariamente. Un amor sin esperar recompensa, ni admiración, ni, siquiera, recibir gracias. Un amor que hace y desaparece por la puerta de atrás. Un amor que solo lo podemos encontrar y recibir de Xto. Jesús. Por eso se lo pedimos, insistiéndole y suplicándole, que nos enseñe a amar.

 Danos, Señor, la Gracia de saber amar a tu estilo. No al nuestro, sino como tú nos has enseñado. Danos la paciencia de saber esperar y confiar en tu Palabra y de perseverar a pesar de nuestros fallos y caídas. Gracias, Señor. Amén.

viernes, 3 de septiembre de 2021

ABRE, SEÑOR, MI CORAZÓN PARA SOPORTAR LOS MOMENTOS DE AYUNO Y DOLOR

 

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS. 

 
 

Sí, la vida nos ha enseñado que durante su recorrido habrá momentos de dolor y necesidad de ayuno y mortificación, y otros en los que habrá alegría y fiesta. De eso se compone nuestro camino, y, lo lógico es disfrutar y alegrarse  en los momentos que la vida nos da esa oportunidad y compartirlos con el Novio - nuestro Señor - que está siempre presente en nuestra vida.

Es una de las ventajas que tenemos hoy,  sabemos que Jesús está siempre a nuestro lado. Y ayuna con nosotros, sufre con nosotros, llora con nosotros, pero, también se divierte con nosotros. Ellos, los judíos contemporáneos de Jesús no sabían eso aunque lo tenían delante de ellos mismos. El encuentro con Jesús siempre es alegre y festivo. ¿Habrá mayor alegría que encontrarse con el Señor? Respóndete a ti mismo.

Pidamos eso, la sabiduría de saber que en las duras y las maduras, nuestro Señor está siempre con nosotros. Y que nuestra alegría es grande compartiéndola con Él y en su presencia y soportable y ligera cuando nos llega el momento de también cargar con nuestra cruz correspondiente. Porque, de una forma u otra, estamos con el Novio - el Señor - y con Él todo se convertirá en gozo y felicidad. Esa es nuestra esperanza y nuestro gozo. Amén.

jueves, 2 de septiembre de 2021

TAMBÍEN YO QUIERO INVITARTE A QUE ENTRES EN MI BARCA, SEÑOR.

 

No quiero quedarme afuera mirando, porque, sé que me voy a desconsolar. Tú, Señor, eres el Patrón de mi barca. Al menos yo libremente y voluntariamente quiero darte ese título y cargo en mi propia barca. Quiero que entres en mi vida y navegues en ella por los mares de este mundo, en muchos momentos bravío y peligroso. Dame, Señor, .la paciencia, la firmeza y la osadía de apartar de mi corazón las seducciones que este mundo me presenta para embarcarme contigo en mi propia barca.

Porque, si Tú, Señor, eres el Patrón de mi barca, mi corazón va más tranquilo y confiado en tu Palabra, en tu rumbo y en tus orientaciones. Es verdad que tendré que poner de mi parte todo lo que he recibido de antemano de tu bondad y misericordia infinita, pero, yendo a tu lado, Señor, venceré todas las dificultades que se interpongan en mi vida y quieran separarme de Ti.

Sé que no soy merecedor de nada. Y, como Pedro, me confieso pecador e indigno de Ti. Te pido perdón y que, por tu Infinita Misericordia, me acojas en tu Amor Misericordioso, permitiéndome navegar en mi pobre y humilde barca junto a Ti. Pienso y me anima la esperanza de que mi pesca, junto a Ti, Señor, también sea abundante por tu Gracia. Amén.

miércoles, 1 de septiembre de 2021

¿EXPERIMENTO LA NECESIDAD DE ENCUENTRO CON EL SEÑOR?

 

Sería bueno mirarnos y sacar nuestras propias conclusiones respecto a la necesidad que tenemos de encontrarnos con el Señor. Sabemos que en el camino vamos a tener a ese demonio que nos va a dificultar la tarea y a tratar de confundirnos despertando nuestras propias pasiones concupiscentes y ambiciones de riqueza y poder. No lo vamos a tener fácil. Sin embargo, Jesús viene a salvarnos y a poner remedio a esas tentaciones que nos amenazan con alejarnos de Él.

Debemos tener muy claro que, solos estamos vencidos. ¿Para qué la venida de Jesús si fuésemos capaces de vencer al demonio nosotros solos? Esta, pues, claro, que necesitamos la asistencia y la ayuda constantemente del Señor. Y, para eso está nuestro Señor Jesús. Ha venido para ayudarnos y sacarnos del peligro. Con su ayuda seremos invencibles. Pero, para eso no podemos apartarnos de su presencia. Y estamos con Él estando también con los demás, en cualquier lugar del mundo. Donde dos o tres se reúnen en mi nombre, incluso unidos en el Espíritu de Dios, allí se hace presente Jesús - Mt 18, 20. -.

Pidamos al Señor que despierte en nosotros esa necesidad de estar con Él y de buscar espacios de oración para relacionarnos de una manera personal e intensa más directamente y en silencio. Pidamos fortaleza  y sabiduría para saber pedir las cosas que necesitamos, principalmente las que nos ayudan a cumplir su Voluntad. Y, finalmente, pidamos para que sepamos amar. Amar como el mismo Jesús, con su Vida y sus Obras, nos ha enseñado. Amén.