Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

martes, 23 de mayo de 2017

NUNCA SE HA IDO

Ha subido a la derecha del Padre, pero su Espíritu permanece con nosotros. Convenía que se fuera al Padre, pero en su lugar ha venido el Paráclito, el Espíritu de Dios, que nos asiste y nos acompaña en nuestra aventura de vivir en su Palabra y dar testimonio.

Pidamos su presencia y creamos en Él. Recibiremos la fuerza que nos dará luz, sabiduría y todo lo que necesitemos para, siguiendo nuestro camino, vivir en la Palabra del Señor. Demos testimonio corespondiendo a su Amor e imitándole con los hombres. Respondamos a las injurias y burlas de los hombres, como Él respondió y, necesitados de su Gracia, para tal misión, pidámosla con verdadera confianza y fe.

Pues como un Padre que sabe lo que sus hijos necesitan, nos la dará. Ya nos lo ha dicho y recordado: Pedid y se os dará... -Mt 7,7-. Aumenta nuestra fe, Señor, y fortalece nuestra voluntad para que, como hijos agradecidos, sepamos responder y vivir en tu Palabra y Voluntad. Amén.

Gracias, Señor, porque permaneces entre nosotros y nos recuerda y has dicho que estarás con nosotros durante todo nuestro camino. Y que regresarás para llevarnos contigo. Danos la paciencia y la paz para saber soportar todas las inclemencias del tiempo y esperarte con alegría y esperanza, valga la redundancia. 

Creemos en Ti, Señor, y, a pesar de nuestra tristeza, consecuencia de nuestra ignorancia y necedad, danos la sabiduría de confiar y aguardar con expectante escucha y esperanza tu regreso, para abandonados a tu Amor confiarnos a tu Misericordia. Amén.

lunes, 22 de mayo de 2017

NO ESTAMOS SOLOS

Por activa y por pasiva, tal y como solemos expresarnos en nuestro lenguaje coloquial, El Señor nos ha reiterado bastantes veces que no nos va a dejar solos. Se aproxima su Ascensión, pero, simplemente, para dejar paso al Paráclito, que nos va acompañar el resto de nuestro camino hasta llegar al Padre.

Jesús, el Señor, sabe de nuestras limitaciones y debilidades, y del peligro que significaría dejarnos solos y a merced del Príncipe de este mundo. Quedaríamos atrapado en sus garras y seríamos presa fácil para él. Necesitamos la presencia del Consolador, del Defensor, del Paráclito que nos acompaña y nos dirige por senderos tranquilos y sosegados y lejos de las amenazas de peligros y tentaciones.

Es verdad que no nos será fácil, pues tendremos pruebas difíciles que nos harán padecer y sufrir. Ya nos lo advirtió el Señor cuando nos descubre que el discípulo no es más que el Maestro, pero nos anima a que injertados en Él saldremos vencedores. Y hoy nos anuncia la llegada y el envío del Paráclito que nos va a acompañar y a fortalecer en esos momentos de durezas y obstáculos.

Necesitamos estar atentos y abiertos a su acción. Y le pedimos que nos dé la sabiduría y la voluntad de ser fieles a su Palabra; le pedimos que nos aumente nuestra fe; le pedimos que nos transforme nuestro corazón endurecido y calloso por el egoísmo y la soberbia, en un corazón generoso, compasivo, abierto, escuchante y misericordioso para con todos los hombres. 

Le pedimos que seamos capaces de dejarnos invadir por el Paráclito que el Padre nos envía, para que también nosotros seamos capaces de llevarlo, como si de otros paráclitos se tratara, a otras personas que lo necesitan para, en Él, descubrir el Camino, la Verdad y la Vida que les pueda conducir a la Casa del Padre. Amén.

domingo, 21 de mayo de 2017

AMAR ES LA ÚNICA SOLUCIÓN


El amos es el problema. Tanto para ser feliz como para condenarme. Porque sin amor no se es feliz y la vida carece de sentido y la pierdes para siempre. Y, sólo con el amor encontrarás la felicidad y la vida eterna. Y esto no lo dice nadie, porque nadie tiene autoridad para decirlo. Lo dice el único que puede decirlo, el Señor Jesús. El hijo de Dios Vivo.

Su mandato es el amor, y sólo con el amor podemos guardar sus mandamientos y recibir al que el Padre, en su nombre, enviará para que permanezca con nosotros y nos enseñe el camino. Por lo tanto, no nos confundamos. Sabemos que nosotros no podemos cumplir los mandamientos, pero si podemos con la ayuda del Señor. Y para eso es enviado el Espíritu de la Verdad, para que nos la enseñe y nos fortalezca y dé la sabiduría necesaria para entenderla.

Te pedimos, Señor, que nos enseñes a amar y nos des la voluntad, la sabiduría y la fuerza necesaria para poder hacerlo. Amar a los enemigos, que nos lo ponen difícil y fuera de nuestro alcance, pero que sólo en Ti, Señor, podremos superarnos y hacerlo. Amar como Tú nos amas.

No nos resulta fácil, ni de entender ni de saber cómo hacerlo, pero debemos creer en Ti, Señor, porque Tú puedes hacerlo. Y nos lo has prometido: y yo pediré al Padre y os dará otro Paráclito, para que esté con vosotros para siempre, el Espíritu de la verdad, a quien el mundo no puede recibir, porque no le ve ni le conoce. Pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros.

Señor, eso te pedimos con todas nuestras fuerzas y nos abrimos a la acción del Espíritu Santo, para que en Él podamos recorrer el camino y cumplir con tus mandatos. Amén.