Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.
Mostrando entradas con la etiqueta nacer de nuevo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta nacer de nuevo. Mostrar todas las entradas

miércoles, 10 de abril de 2024

ORACION: NACER DE NUEVO

Jesús, como a Nicodemo, me invitas a nacer del Espíritu, pero nacer del Espíritu no es fácil, no es empresa que pueda acometer solo.

Estoy acostumbrado a tener todo está bajo mi control, a que todo dependa de mí: de mis fuerzas y mi talento, de mis creencias y mis normas, de mi manera de ver y analizar la realidad. Estoy acostumbrado a marcar el rumbo, a ir donde quiera.

Hazme entender que nacer del Espíritu es otra cosa. Es estar dispuesto a marchar contigo adonde no pensaba ir, mirar contigo donde antes desviaba la mirada, es acercarme y abrazar contigo realidades y personas que antes rechazaba. 

Dame unos oídos muy abiertos y atentos para percibir susurros y latidos de vida, para descubrir tu presencia y escuchar tus llamadas donde aparentemente solo hay fragilidad y desnudez, aridez y desierto. 

Ayúdame a confiar en ti plenamente, a dejarme llevar por tu mano, a tener el corazón abierto de par en par para que tu Espíritu me transformarme, para que tu fuerza me aliente y me recree, para cumplir contigo mis mejores sueños. Amén.

Desde mi parroquia, por el párroco
D. Juan Carlos Medina Medina.

viernes, 18 de diciembre de 2020

ABRO MI CORAZÓN AL NIÑO QUE NACE


HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS. 


Cada día estoy invitado a nacer de nuevo. Un nacimiento, claro está, no físico, sino espiritual, renovado y con ojos nuevos para ver la vida con esperanza, alegría y con el gozo de saberte salvado por el amor de Dios. Un Amor que se concreta en ese nacimiento del Niño Dios, encarnado en naturaleza humana, y nacido de María, la joven elegida para ser su Madre.

Fuera de la órbita de Dios la vida pierde todo su sentido y se vuelve monótona, cansada y rutinaria. Y sin esperanza no hay vida. Todo se oscurece y quedas atrapado en tu propia red. El horizonte es la muerte y la esperanza deja de existir. Ahora, ¿se puede vivir sin esperanza? Es una buena pregunta que tienes tú mismo que darle respuesta.

Sería muy importante discernir sobre lo que realmente buscas y a dónde te diriges. Porque, en profundizar en esas preguntas te ayudaran a nacer de nuevo espiritualmente y a llenar tu vida de esperanza. Por todo ello, pedimos entender, al menos fiarnos, como hizo José, por los impulsos del Espíritu Santo. Ese Espíritu Santo que hemos recibido en la hora de nuestro bautismo, y que nos invita a caminar a su lado y siguiendo sus impulsos y acciones para abrirnos a la Voluntad del Padre. 

Voluntad que no es otra que la de hacer lo que su Hijo, que nace, encarnado en Naturaleza humana, nos indica y nos enseña. Por tanto, abramos nuestros corazones a ese Niño Dios que nace y pongamos en Él todas nuestras esperanzas para que nuestros corazones sean transformados en unos corazones nuevos y renovados.