Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.
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martes, 25 de diciembre de 2018

DANOS SABIDURÍA, SEÑOR, PARA VERTE

Resultado de imagen de Jn 1,1-18
Son días de regocijo y de fiesta. La calle parece diferente, hay mucho bullicio y ruido. Luces y candilejas que nos roban el pensamiento y nos llevan a un espejismo de felicidad. Pero, ¿qué se celebra? La gente no lo sabe bien. Han oído que ha nacido un niño, pero no lo buscan ni desean verlo. Ellos ahora sólo piensan en comilonas, regalos, fiestas y alegría vacía y hueca, porque, mañana, volverán al mismo lugar y a la misma realidad.

Absorto en mis pensamientos pienso en aquel momento. Cuando realmente nació el Niño Dios pocos se enteraron. A penas unos pastores y poco más. No hubo ruido ni ninguna clase de fiesta. No se celebraba ninguna navidad, pues nadie había advertido el nacimiento de la verdadera esperanza y salvación. Tuvieron que pasar treinta años para que un tal Juan el Bautista proclamará que el Mesías estaba pronto a venir y que teníamos necesidad de prepararnos y arrepentirnos de nuestros pecados.

Y descubro que antes no había celebración de navidad. Muchas generaciones vivieron sin descubrir la alegría y la esperanza de conmemorar el nacimiento de la salvación en ese Niño Dios. Y quizás muchos, todavía hoy continúan sin enterarse que realmente se celebra. Pero, eso sí, se apuntan a la juerga, al consumo y a todo lo que sea alegría pasajera. ¿Y después?

Y no es que esté en contra de la fiesta y la alegría, sino que todo eso debe ser una consecuencia de la verdadera esencia de lo que celebramos hoy, el nacimiento del Hijo de Dios. Dios encarnado. que se hace Hombre y habita entre nosotros para anunciarnos que su amor y su propuesta de salvación. Esa es la verdadera alegría que nos debe de fortalecer e impulsarnos a vivir en paz, en justicia, verdad y amor. 

Pidamos esa Gracia y que el nacimiento del Niño Dios nos llene de sabiduría que nos ilumine y podamos encontrarnos y descubrir el amor del verdadero Hijo de Dios. Amén.

                                                                   FELIZ NAVIDAD

martes, 20 de diciembre de 2016

EXPECTANTES A TU VENIDA, SEÑOR

Hay dos manera de esperar, con los brazos cruzados y caminando hacia el encuentro. Con los brazos cruzados no parece ser buena actitud, pues esperar no significar pasividad sino todo lo contrario, actividad de estar preparado y con la casa recogida para recibir al que viene. Y eso supone trabajo, camino y estar expectante a esa llegada.

Por lo tanto, la segunda actitud parece la buena. Poque caminar significa estar activo y en movimiento y vigilates a la venida. Este tiempo que ahora volvemos a vivir nos recuerda esa actitud, la de estar vigilantes y expectante, no sólo ahora, sino en todo instante de nuestra vida. Porque esperar significa también estar en actitud paciente y escuchante. 

Y es esta actitud, la de permanecer en camino, es la que queremos pedir y suplicar al Espíritu Santo. Y hacerlo mirando a María y a José, los padres de Jesús. Ellos supieron estar atentos y vigilantes y cambiar el camino de sus vidas para tomar el que Dios les indicaba. Hoy, de manera especial, miramos a la Virgen, y destacamos sus virtudes de humildad, de sencillez, de generosidad, de estar abierta a entregar su vida y sus proyectos, para tomar los que Dios le entrega.

Y pedimos al Señor que nos de la Gracia y fortaleza de actuar como Ella, y de estar preparados pacientemente para que, cuando el Señor disponga, estar abierto a acogerlo y acoger libremente sus mandatos y vivirlos según la acción del Espíritu Santo.. Amén.