Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

domingo, 23 de septiembre de 2012

CUANTO ME CUESTA...


 Como cuesta seguirte mi Señor......... Como cuesta.
seguirte, Señor. ¡Cuanto me cuesta!, porque no acepto el niño que llevo en mi corazón, y no lo dejo crecer según tu Voluntad. Me empeño en dirigirlo según mis proyectos e ideas. ¿Sabes?, en el fondo de mi corazón creo que son mejores que las Tuyas. Al menos eso deduzco porque siempre las priorizo antes las Tuyas.

Y aunque me autoengaño diciéndome que las Tuyas son primeras, siempre acabo llevando las mías al terreno de las obras y la vida. Llego a la conclusión que las estimo más que las Tuyas. Sin embargo tengo que concluir que mi razón y mi fe me dicen que Tú eres el Camino, la Verdad y la Vida.

Sé que me siento atado, sometido y esclavizado a mis inclinaciones humanas, débiles y apegadas, pero a pesar de mis limitaciones quiero seguirte y confiarme en Ti. Poco entiendo y como Pablo siento en mis propias carnes que hago lo que no quiero ni siento, y no termino de hacer lo que me gustaría y siento. 

Quiero terminar por abrazar a ese niño bueno que llevo dentro: puro, ingenuo, humilde, inocente, confiado, justo y bien intencionado, pero tengo que admitir que me resulta difícil por no decir imposible si no lo hago desde Ti, por Ti y en Ti.

Quiero, Señor, ponerme en tus Manos y dejarme llevar por tu Espíritu para, algún día, alcanzar la dicha de poder abrazar a ese niño que Tu, por tu Infinita Misericordia, has metido en mi pequeño corazón. Amén.

sábado, 22 de septiembre de 2012

QUISIERA SER TIERRA BUENA...

 Lo sembrado en tierra buena significa el que escucha la palabra y la ...
y dar los frutos que Tú, Señor, esperas de mí. Quisiera ser tierra agradecida de tus mimos y cuidados, Padre mío, y responder a tus caricias con hermosas flores que adornen tu amor y misericordia. Quisiera ser esa tierra cuyos frutos sean hermosos cantos de alabanza e himnos a tu Gloria.

Me apena no responder a esa siembra que Tú has derramado sobre mí y no ser digno de que siembres en mi casa, porque solo tu Palabra es suficiente para que broten de mí esos frutos que dan la vida eterna. 

Soy consciente de mis pecados y mi sequía, y esperanzado en tu Misericorda me pongo a tus pies, Padre mío, con la esperanza de que tu Palabra cultive y arranque esos frutos que Tú has plantado en mi corazón.

Dame, Señor, la capacidad de saber aprovechar ese caudal de Gracia que derramas sobre mí, y dejar que ese torrente de agua fructifique mi tierra y genere esa cosecha que derive en los frutos a los que estoy llamada a producir. Amén.

viernes, 21 de septiembre de 2012

ME CUESTA PONERME JUNTO...

 Photo: Himno: SEÑOR, TÚ ERES MI PAZ Y MI CONSUELO.
 al otro, al que está a mi lado. Primero miro quien puede ser, y más tarde juzgo su apariencia, su currículum y su nivel social. No puedo Señor despojarme de esas actitudes. Me cuesta tanto que sin la acción del Espíritu nada puedo.

Por eso, Señor, me fijo en Ti, quiero sentarme a tu mesa, ser invitado por Ti, porque sólo Tú puedes sanarme. Sólo Tú puedes transformar mi corazón y hacer que de sentirme arrogante y superior, me comporte como lo que soy, hermano y servidor de los dones recibidos.

Primero, Señor, sana mi alma, mi vanidad, mi orgullo, mi soberbia, mi egoísmo, mis apegos, mi insolidaridad,  mi cerrazón, mi incomunicación, mis silencios y todo aquello que me hace sentirme diferente a mis hermanos. Y luego, sana mi cuerpo, porque también necesito el pan de cada día que me alimenta de forma materia.