Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.
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martes, 9 de febrero de 2021

GLORIOSA MADRE DE DIOS

Thomas Merton

 

“Gloriosa Madre de Dios, ¿volveré alguna vez a desconfiar de ti o de tu Dios, ante Cuyo trono eres irresistible intercesora? ¿Apartaré alguna vez mis ojos de tus manos, de tu rostro o de tus ojos? ¿Miraré alguna vez a otra parte que no sea rostro de tu amor, para hallar consejo auténtico y veraz y conocer mi camino todos los días y en todos los momentos de mi vida?

Trata como me has tratado a mí, Señora, a todos los millones de hermanas y hermanos míos que viven en la misma miseria que yo he conocido. Guíalos aunque no quieran y ejerce sobre ellos tu enorme influencia, oh Santa Reina de las Almas y Refugio de los Pecadores.

Llévalos a tu Cristo del mismo modo que me llevaste a mí. Illos tuos misericordes oculos ad nos converte, et Jesum, benedictum fructum ventris tui, nobis Ostende: “Vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos y muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre”.

Muéstranos a tu Cristo, Señora, después de nuestro destierro, sí; pero muéstranoslo también aquí y ahora, mientras aún somos peregrinos”.

Thomas Merton

miércoles, 15 de agosto de 2018

MARÍA, MADRE DE DIOS

Resultado de imagen de María asunta al Cielo
Te quedas con la boca abierta cuando tomas conciencia que María, esa joven sencilla, humilde y tan normal fue elegida para ser nada más y nada menos que la Madre de Dios. María, de la que hoy la Iglesia católica celebra su Asunción a los cielos, dogma de fe que todo cristiano acepta y cree de forma absoluta. Y es que es tan normal y lógico que sería un disparate absurdo no creer o pensar lo contrario.

Estaba ya en el ambiente y aceptado por todo cristiano. ¿Cómo no va a llevar y a pedirle al Padre que suba al Cielo a su Madre? ¿Hay algún hijo que no quiera para su madre lo mejor? Y es que somos tan pequeños que no nos cabe en la cabeza que una mujer tan sencilla, humilde y entresacada del pueblo sea elegida para ser la Madre de Dios.

¿Qué méritos puede haber hecho María?¿Es qué podemos hacer méritos para merecer algo delante de Dios? La elección de María y la del pueblo de Israel, como pueblo de Dios, no podemos entenderlo. Al menos a mí no me cabe en mi pobre y limitada cabeza. Sin embargo, algo tuvo y tiene María para ser elegida Madre Dios, y también Madre nuestra. Destaca su humildad y su obediencia. Humilde para, siendo la Madre de Dios, permanecer al mismo nivel que los pobres y los pequeños, los preferidos de su Hijo. Humilde y sencilla para, no esperar ser servida, sino estar disponible a servir.

Y, sobre todo, confiada en la Voluntad de Dios. Un Dios al que somete libremente su voluntad y del que se fía según su Palabra. Y, María, entregada a la Voluntad de Dios queda llena de Gracia y de todas las virtudes que deben acompañar a la Madre de las Madres. 

En este día celebrativo, donde no hay ningún pueblo que deje de recordarte y proclamar tu grandeza, Madre, queremos pedirte que nos acompañes e intercedas por todos nosotros ahora y en la hora de nuestra muerte, para que vivamos siempre en la presencia y en la Palabra de tu Hijo, nuestro Señor Jesús. Amén.

lunes, 15 de agosto de 2016

ELEGIDOS COMO MARÍA


No mires para otro lado, porque tú, al igual que yo, hemos sido elegidos como María. Ella ha cumplido su misión, pero, ahora te toca a ti y también a mí. Quizás tu misión no es la misma, pues la de María es la máxima, pues ser elegida para Madre de Dios no es superada por ninguna otra dignidad. Una madre es cosa muy grande, pero ser la Madre de Dios es lo más grande.

Pero, dejando esa especial misión, tú y yo tenemos otra misión, con toda seguridad, más humilde, pero digna para Gloria de Dios, que cumplir. Una misión que se encuentra donde estamos y como estamos. Una misión que consiste en hacer su Voluntad, y que debemos esforzarnos en descubrir. Y no hay posibilidad de descubrir algo sin esfuerzo. Hacerlo e intentarlo nos llevará y exigirá sacrificios y esfuerzos, que, necesitarán tiempo y paciencia.

Fijarnos en María nos ayudará a encontrar el camino y la serenidad que nos haga descubrir que quiere Dios de nosotros. Todo consiste en ponernos a caminar. Y caminar es desinstalarnos, salir de nuestra cueva y reducto y, olvidándonos de nosotros mismos, pensar en los demás. Se nos antoja difícil, pero es el camino. Un camino que pone sus propias exigencias y nos remite a unirnos e intimar con el Señor, para pedirle fuerzas, sabiduría, paciencia y voluntad para seguir hacia delante. 

No es fácil cumplir la Voluntad de Dios. Ya nos decía Jesús en el Evangelio del domingo lo difícil que resultaba seguirle. Y, nos dice, que también ahora lo es. Muchos están pagando con sus propias vidas el mantenerse firme en la fe. Vamos contra corriente y proclamar la Verdad  nos acarrea muchos problemas. Pidamos fuerza y voluntad para no desfallecer y sobre ponernos a las contrariedades que los obstáculos de este mundo se interponen en nuestros caminos.

Por eso, Padre, arropados bajo el Manto de María, te pedimos que nos llenes de paciencia y sabiduría para saber discernir el bien del mal y, apartando el mal apliquemos siempre el bien para todos los hombres. Amén.

lunes, 15 de septiembre de 2014

LA ESPERANZA DE LA CRUZ



No es la Cruz lo que aparenta, porque cuando todo parece indicar tristeza, sufrimiento y dolor, Jesús en su agonía y Muerte transforma la desesperanza en esperanza, y de la muerte renace la vida. Vida abundante y eterna. Por eso la Cruz desde ese mismo momento se transforma en Cruz de esperanza, Cruz de alegría y Cruz de victoria.

Hoy Señor, cuando tu Madre presencia tu Muerte al pie de la Cruz con su corazón atravesado por una espada, nosotros queremos, junto a ella, acompañarla y afirmarnos en tu seguimiento y confianza. Porque ese dolor de muerte se levanta, por tu Resurrección, en un clamor de gozo y alegría que nos llena de esperanza y de felicidad.

Te pedimos, Madre del Cielo, que intercedas por cada uno de tus hijos y, apoyados en tu testimonio, tu cercanía, tu amistad y maternidad nos ayude a relacionarnos con tu Hijo y a intimar con Él aceptando la cruz de nuestra vida para en Él santificarla y glorificarla por su Gracia. Amén.