Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.
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sábado, 8 de septiembre de 2018

ESTÁ Y CAMINA ENTRE NOSOTROS

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Nuestro Dios no es un Dios lejano, externo, que está afuera y actúa desde arriba, ni tampoco nos indica y señala el camino estando Él lejos. ¡Nada de eso! Tampoco es un Dios que nos da leyes, códigos o decálogo para que los cumplamos sin más. ¡No!, la grandeza de nuestro Dios es que se abaja, se hace pequeño, hombre como nosotros y vive entre nosotros, para, desde nosotros y con nosotros, proponernos el Amor de su Padre Dios y su Infinita Misericordia.

Él es el Dios con nosotros - Emmanuel - nacido de mujer con naturaleza humana. Es un Dios con historia y genealogía humana, como nosotros. Es un Dios que vinculado a la naturaleza humana y nacido de Madre humana camina con y junto a nosotros. Por eso, Señor, elevamos nuestros ojos hacia Ti y queremos agarrarnos de tu Mano para no perdernos e ir por el Camino, la Verdad y la Vida que Tú nos señalas y nos propones libremente.

Queremos seguir tus pasos acompañados de tu Madre, también nuestra Madre, y de todo el pueblo que, unidos y reunidos en Ti, confían en tu Palabra, tratan de escucharla y de hacerla vida en sus vidas. Unidos y compartiendo, porque ese compartir y unidad nos fortalece y nos hace más fuerte en el Espíritu Santo contra las tentaciones y obstáculos que la vida nos presenta.

Gracias, Señor, por ser un Dios hecho Hombre. Un Dios cercano, amigo, compañero, de carne y hueso como nosotros. Un Dios que sufre, que tiene sed y hambre, un Dios que camina, que se cansa, que necesita descanso, pero que se apoya en la oración con su Padre, se fortalece en la enseñanza hablando de lo que el Espíritu de su Padre le comunica y se esmera en darse en servicio hacia los demás.  Un Dios encarnado en Naturaleza humana como la nuestra y que entre nosotros nos habla del amor de su Padre y nos propone su Camino, Verdad y Vida.

martes, 20 de enero de 2015

EL VALOR DE LA PERSONA



En nuestro mundo no se da el valor en su medida a las personas. Posiblemente hayan objetos o cosas a los que se le dé más valor que a las personas. Vemos que hay muchos recortes que van destinados a la atención de las personas, y que se dilapida muchos gastos en cosas superfluas y que no arreglan nada ni son de una necesidad imperiosa.

¿Cómo se puede entender esto? ¿Cómo es posible que una persona sufra y corra su vida peligro, mientras otros gastan en fiestas, fuegos artificiales, viajes a ferias y demás...? ¿Cómo es posible que la ley esté por encima de la persona y no sea sometida para servirle? Son preguntas que descubren un mundo inmaduro, que avanza técnicamente, pero no madura en sentido común y, sobre todo, en amor.

Porque el amor se ha convertido en egoísmo. Se busca ganar, tener poder y riqueza para placeres, gozo, bienestar y comodidades... Pero luego experimentamos impotencia al percibir que no podemos cambiar el mundo en que vivimos, ni las cosas que nos suceden. Todo pierde su valor en cuanto le llega el tiempo de su caducidad. Incluso, lo aparentemente imperecedero, perece porque no tiene sentido. 

Porque sin la vida nada tiene valor, pues las cosas son hechas para la vida, y sin vida nada tiene sentido. Por eso, la muerte mata el sentido de la vida. Y sólo la eternidad le devuelve su sentido. Y eso es lo que busca el hombre, vivir en gozo pero siempre. No buscar eso es equivocarse y morir. 

La ley debe estar sometida para el bien del hombre, y eso es lo que nos dice Jesús en el Evangelio de hoy. Pidamos al Señor que, iluminados en su Espíritu, encontremos el verdadero sentido a esta vida, donde el hombre sea el centro de todas las cosas creadas para regresar al Padre. Amén.

martes, 21 de enero de 2014

TAMBIÉN NOSOTROS NO SOMETEMOS



Ahora no es que el sábado se respete y no se trabaje, sino que es fiesta para unos y trabajo para otros. Y los que descansan aprovechan para hacer otros trabajos. Pero no es esa la diferencia importante con respecto a la época de Jesús, sino que ahora se trabaja incluso el domingo. No se respeta el día del Señor.

Cada año es peor. Ya se abre y trabaja los domingos y las familias no tienen tiempo para celebrar el día del Señor. Las costumbres ahora las dominan los nuevos sacerdotes y fariseos, la economía y los intereses y beneficios del trabajo. El hombre se siente sometido a trabajar o a quedarse sin trabajo. La esclavitud sigue imperando aunque disfrazada de libertad u otros disfraces.

Hoy tenemos que decir que no está el hombre para el trabajo y la economía, sino al revés. Es el trabajo y la economía las que deben estar en función del bien del hombre. Experimentamos que todo sigue igual o peor. 

Por eso, sintiéndonos unidos en la misma fe, elevamos nuestras oraciones al Padre para pedirle que derrame luz sobre los hombres y los ilumine a fin de que descubran que todo, incluso el trabajo y la economía, debe estar en función del hombre y para el hombre.