Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

martes, 9 de julio de 2013

MANDA OBREROS A TU MIES



Nos cuesta luchar contra nosotros mismos. Estamos inclinados a dejarnos llevar por la corriente. Por la corriente de los instintos, de las apetencias y del camino fácil. De aquellos caminos que no nos exigen esfuerzos ni luchas ni trabajos. Es más fácil, y una gran tentación, dejar crecer la hierba tal le venga en ganas, sin preocupaciones ni problemas.

Sin embargo, somos conscientes que más tarde vendrá la tormenta. Sufriremos las consecuencias de nuestros propios desordenes, de nuestros a abandonos y desidias. Sabemos que el mal engendra males y que lo bueno, el mejor camino es hacer las cosas bien. Pero, para ello se necesitan obreros, porque son pocos los que se avienen a construir el Reino de Dios y a practicar la justicia y la paz.

Pocos son los que están dispuestos a trabajar en la Viña del Señor por el bien de todos los hombres. Y necesitamos a muchos, pues somos pocos. Por eso, hoy te pedimos Señor que envies obreros a tu mies para que la Verdad se haga Luz para todos los hombres, y tu Reino de justicia y Paz se establezca en la tiera.

lunes, 8 de julio de 2013

AUMENTA MI CONFIANZA Y MI FE

Añadir leyenda

No lo sé Señor, pero me temo que mi fe y confianza en Ti no sea la que Tú esperas de mí. Sí, me digo que creo y confío en Ti, pero luego experimento que mi vida no va acorde con esa fe y confianza que digo confesar. ¿Para qué engañarme? No podré esconderme de Ti.

Y por mucho que me esfuerce no logro aumentar ni un pelo mi confianza y mi fe. Mis esperanzas están puestas en tu Gracia y Misericordia. Dependo de Ti, mi Señor, y te suplico que aumentes mi fe y confianza. Hoy me hablas de lo que te ocurrió con aquel magistrado que depositó toda su confianza en Ti, y te pidió confiado en que resucitaras a su hija.

También, me cuentas lo que hizo aquella mujer invadida por flujos de sangre que, confiada en tu poder, se propuso tocarte con la esperanza de ser sanada. Y lo consiguió. ¡Y yo, Señor!, ¿qué me propongo hacer? ¿Me voy a quedar quieto, paralizado y en silencio? ¿O voy a ponerme en camino, a avanzar y arriesgarme con la esperanza de tocarte y ser despierto a la fe y la confianza en Ti?

Quizás sea un buen momento ese III encuentro de Blogueros en Valladolid. ¿Tendré allí una buena oportunidad de poder tocarte?, ¿o de pedirte que aumentes mi confianza y fe en Ti? No lo sé, pero el hecho de empezar a caminar y tratar de asistir puede ser una buena señal de que quiero tocarte. En la confianza de que podré alcanzarte voy a ponerme en camino.

domingo, 7 de julio de 2013

NO SOPORTO LA DUREZA NI LA SOLEDAD DEL CAMINO



Se me hace pesado, duro, difícil, solitario... Las piernas se me paralizan y me pesan como si dos columnas de hierro se trataran. El cansancio me nubla la vista y el corazón amenaza con pararse. Mis labios están a punto de proclamar: ¡Basta, aquí me quedo! 

¿Qué hacer? ¿Dónde te escondes Señor? Tú me has enviado, y ya se me empieza a olvidar tus Palabras de envío. El cansancio me puede y mis piernas desfallecen. Sin embargo, mis últimas palabras claman tu misericordia y suplican tu auxilio. Dame las fuerzas para levantarme y seguir el camino.

A pesar de mi agonía, quiero y me empeño en confiar en Ti. Tú no puedes fallar. Tu Palabra siempre se cumple. Tú tienes Palabra de Vida Eterna. ¡Lléname de paz, Señor, y repone mis fuerzas para emprender de nuevo la marcha hasta donde Tú me has señalado! En Ti y por Ti puedo acabar mi recorrido y cumplir tu Voluntad. Da respuesta a todos mis interrogantes, mis dudas e incertidumbre. Fortalece mi fe y aumenta mi confianza.

¡Señor!, no tengo a dónde ir. Tú eres mi Camino, mi Verdad y mi Vida. Hazte presente en mi vida y apodérate de ella. Quitame mi libertad y hazla tuya, pues estando en Ti soy verdaderamente libre.