Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.
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sábado, 17 de junio de 2017

PALABRA Y CONFIANZA

Hay mucha gente que no gozan de confianza. Es posible que su vida y sus actos no respondan a sus palabras, y, por mucho que juren, no le dan crédito a sus palabras. Poner a Dios o al Cielo por testigos no hace sino estropear más su credibilidad. Sobre todo si su palabra carece de verdad. Será una falta tratar de jurar apoyando tu palabra en la de Dios o en el Cielo. ¿Quién has pensado que eres para pedir el respaldo y crédito de Dios a tu palabra? Está fuera de sentido tratar de poner a Dios por testigo.

Y es que resulta que no se puede vivir de una manera y actuar de otra. Cuando la palabra no casa con la vida, se supone que algo falla. Y eso ocasiona que se pierde la credibilidad. Y hasta la dignidad. Porque, si se vive en la mentira, tu palabra pierde crédito. Menos aún si te atreves a jurar poniendo a Dios por testigo.

Por eso, desde este humilde rincón de oración, pedimos perdón por nuestras mentiras o por nuestros fracasos y medias verdades. Pedimos perdón por nuestras debilidades, inseguridades, ignorancias y, también, por nuestras incoherencias. Y pedimos que nuestros labios hablen en verdad. Siempre apoyados en la verdad que descansa en nuestro Señor Jesús, pues sólo Él es el Camino, la Verdad y la Vida.

Danos, Señor, la sabiduría, la fortaleza, la coherencia y la valentía de estar siempre en la verdad, y no tener necesidad ni la tentación de usar tu Nombre para ponerlo por testigo y juramento a lo que nuestros pecadores labios hablan y dicen. Danos, Señor, la paciencia y la templanza de, llenos de paz y confianza, responder siempre como Tú nos indica: sí, sí, o, no, no.