Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

sábado, 3 de julio de 2021

LA DUDA, UNA INFATIGABLE VIAJERA QUE NOS ACOMPAÑARÁ TODA NUESTRA VIDA

 

La duda, a pesar de nuestros reiterados intentos de escapar a su presencia, la tendremos siempre presente en nuestro camino por este mundo. Es incansable y aprovechará cualquier debilidad o situación favorable para recordarnos que está a nuestro lado y dispuesta a entablar conversación. Está muy bien preparada y siempre presentará argumentos que hagan zozobrar nuestra barca. Es experta en levantar tempestades y situaciones que nos hagan desviarnos de nuestro rumbo natural para el que hemos sido creados.

Es normal que nos suceda eso y que estemos dispuestos en cada paso de nuestro camino a ser probados y tentados. Necesitamos demostrar que nuestra fe es firme y está bien apoyada. Por eso, tenemos que saber donde apoyarla, si sobre arena movediza - el mundo - o sobre Roca firme - Jesús - que nos ha dejado a su Iglesia para acompañarnos y fortalecernos.

Hoy podemos comprobar que Tomás, aquel discípulo con serias dudas, fue precisamente liberado de sus dudas por la comunidad donde estaba apoyado. Aquellos compañeros le apremiaron a creer en sus testimonios, pues, ellos habían visto al Señor. Y, Tomás no tenía mala intención, sino la necesidad de desterrar esas dudas que le impedían fiarse del Señor, de ese Señor que él había conocido y que había visto aparentemente derrotado y crucificado en la Cruz. Porque, la Cruz sin la Resurrección es el fracaso de los fracasos.

Por la Gracia del Señor, que sabe lo que se dilucídaba en su corazón, Tomás tuvo la oportunidad de comprobar lo que exigía comprobar, y su respuesta ya la sabemos. Léela y medítala en el Evangelio. Es más se repite en cada Eucaristía que se celebra. Sin embargo, las dudas pueden seguir amenazándonos y exigiéndonos que afirmemos nuestra fe. Por eso, necesitamos pedirle al Señor que no nos deje caer en las manos del mundo, demonio y carne y que nos dé siempre la fortaleza de apoyarnos en su Palabra. Porque, Él es el Camino, la Verdad y la Vida. Amén.

viernes, 2 de julio de 2021

EN EL ESFUERZO DE RESPONDER A ESA LLAMADA PRENDIDA DENTRO DE MÍ

 

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS. 

 

Es verdad que vivimos inquietos y buscando esa llama de felicidad que permanezca encendida y perenne para siempre dentro de nuestro corazón. San Agustín dijo que vivimos inquietos y no descansaremos hasta llegar a Ti, Señor. Porque, en realidad, nacemos para, a través del recorrido de nuestra vida, encontrarte, Señor, y descansar en tu Amor y en tu Paz. Porque, Tú, eres nuestro destino, nuestro Camino, nuestra Verdad y nuestra Vida.

¿Dónde, si no, podemos encontrar nuestra felicidad y paz eterna? Nos equivocamos si tratamos de buscarla en este mundo caduco. Y existe esa posibilidad de buscar en este mundo. Primero, porque somos libres; segundo, porque, aprovechando esa libertad, el demonio está empeñado en engañarnos y seducirnos. Y tiene mucho poder para hacerlo. Por eso, Señor, descubrirlo y darnos cuenta es ya una enorme Gracia que nos regala, y, segundo, ponernos en tus Manos y, dándonos cuenta que yendo solos seremos vencidos. Es la Gracia de las Gracias, por expresarlo de alguna manera exultante y llena de alegría.

Gracias, Señor, por tanta Gracias recibidas de tu mano generosa y misericordiosa. Gracias por tanto amor demostrado en la entrega de tu Vida para rescatarnos de la esclavitud del pecado. Gracias por esa llamada de cada día despertándonos de los peligros de caer en manos del exterminador demoníaco que amenaza con perdernos y engañarnos con esa felicidad falsa, perecedera y caduca de este mundo. Gracias, Señor.

No podemos acabar esta humilde oración - reflexión  sin pedirte que nos des fortaleza, sabiduría y perseverancia para sostenernos en el camino de tu seguimiento y de responder, aunque sea poco a poco, entregando nuestras vidas a amar como Tú, Señor, nos ama. Amén.

jueves, 1 de julio de 2021

ALIGERA, SEÑOR, EL PESO DE MI CAMILLA

 

 

Llevar una carga encima hace incómodo el camino. La experiencia nos descubre que no es cómodo caminar llevando peso encima. Ese mandato de Jesús: ‘Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa’ bien puede significar la responsabilidad de cada cual con cargar con su propia camilla. Es decir, con las respectivas cargas que la vida te presenta. 

El peso de nuestros propios pecados nos joroba y, a veces, nos impiden avanzar. Se nos nubla la mente y la carga de nuestros pecados - malos pensamientos e intenciones -  nos derriba y nos paraliza. Necesitamos, Señor, que tu mano nos aligere la carga.

Sin tu ayuda, Señor, la carga de nuestros pecados terminará por paralizar nuestra vida y dejarnos inmóvil en la camilla. ¡Ven Señor, y líbranos de nuestras parálisis para que, aligerados del yugo y la carga de nuestros pecados, podamos seguirte embriagados de esperanza y fe!. Amén.

miércoles, 30 de junio de 2021

SEÑOR, DAME LA GRACIA DE ENTENDER QUE TÚ ESTÁS POR ENCIMA DE TODO

 

Tú, Dios mío, eres lo primero y lo que debe primar y reinar en el centro de mi corazón. Sin embargo, soy consciente de mis debilidades y de mis inclinaciones a las riquezas, al poder y a las comodidades que esta vida me presenta, me ofrecen y con las que me seducen. Hay momentos de mi vida en las que me siento atrapado como esos dos endemoniados de los que habla hoy el Evangelio. 

Y experimento la tentación de alejarme de Ti, incluso rechazarte y pedirte que salgas de mi vida. Llego incluso, Señor,  a pensar que mi dios es el dinero y el poder y, como aquellos hombres de la otra orilla te invito a salir de mi tierra - corazón - y a marcharte de mi vida. 

¡Perdóname, Señor! Perdóname mis disparates, mis debilidades, mis egoísmos y mis pecados. Perdóname mis impaciencias, mi poca y deficiente fe, mi inconstancia y vacilante perseverancia. Ten Misericordia de éste pobre ignorante pecador y libérame de las tentaciones del demonio, que acecha mi vida para encadenarme, como aquellos endemoniados, y sometido, destruirme. 

Dame la fortaleza, la sabiduría y la paciencia para sostenerme firme y perseverante en tu confianza y apoyarme en la fe de tu Palabra que da la Vida Eterna. Amén.

martes, 29 de junio de 2021

VÍSPERAS - SAN PEDRO Y SAN PABLO

 

 

               H I M N O

San Pedro y san Pablo, unidos
por un martirio de amor,
en la fe comprometidos,
llevadnos hasta el Señor.

El Señor te dijo: "Simón, tú eres Piedra,
sobre este cimiento fundaré mi Iglesia:
la roca perenne, la nave ligera.
No podrá el infierno jamás contra ella.
Te daré las llaves para abrir la puerta."
Vicario de Cristo, timón de la Iglesia.

Pablo, tu palabra, como una saeta,
llevó el Evangelio por toda la tierra.
Doctor de las gentes, vas sembrando Iglesias;
leemos tus cartas en las asambleas,
y siempre de Cristo nos hablas en ellas;
la cruz es tu gloria, tu vida y tu ciencia.

San Pedro y san Pablo: en la Roma eterna
quedasteis sembrados cual trigo en la tierra;
sobre los sepulcros, espigas, cosechas,
con riego de sangre plantasteis la Iglesia.
San Pedro y san Pablo, columnas señeras,
testigos de Cristo y de sus promesas

lunes, 28 de junio de 2021

TENDRÁS QUE HACER MUCHAS RENUNCIAS PARA SEGUIRLE

 

No hay seguimiento si no hay renuncias, porque, para seguir a Jesús es imprescindible la renuncia. Renuncia de uno mismo a sus propios egoísmos y proyectos, porque, en el seguimiento a Jesús prevalece el Proyecto de Jesús que es el que nos salva y nos da Vida Eterna. Por tanto, dejar todo aquello que te apetece y seduce humanamente se hace necesario para que dentro de tu corazón, el centro, sea Jesús.

La vida está llena de tentaciones que te impiden amar. Amar hasta el extremo de vaciarte de ti para darte al otro. Porque, precisamente, el amor verdadero consiste en eso, en amar como Jesús nos ama. Nos lo ha demostrado, entregando su propia Vida en la Cruz. No hay otra forma de Amar, porque, amar de otra forma será sucedáneo del amor, pero nunca amor verdadero como el que nos ha mostrado Jesús. Todo se reduce a simples apariencias.

Si no estás dispuesto y disponible a entregar tu vida, que, no tiene que ser impíicitamente la muerte física, sino que también puede significar una muerte de ti mismo al renunciar a tus propios egoísmos e ideales mundanos. Seguir a Jesús comporta asumir y aceptar ese compromiso de amor, que no es nada fácil. Y que para poder llevarlo a cabo necesita ir de la Mano Misericordiosa del Espíritu Santo e, injertado en Él, para poder superar y vencer todas las tentaciones que te invitan y seducen a seguirte a ti mismo.

Sabemos que no podemos seguir a dos señores. Por tanto, pidamos con insistencia y perseverancia esa Gracia, y tengamos confianza en que, yendo de la mano de nuestro Señor, encontraremos la fortaleza y la voluntad de resistirnos al pecado sosteniéndonos firmes en el seguimiento al Señor. Amén.

domingo, 27 de junio de 2021

INVÁDEME, SEÑOR - IGNACIO IGLESIAS, SJ

P. IGLESIAS, UN GRAN PREDICADOR (1925-2009) - VIDA SOBRENATURAL
Ignacio Iglesias, SJ

 

Tu, que eres la fuente del deseo

y el agua que lo sacia;

el fuego que lo enciende

y la llama que no quema mi zarza; (Ex 3,2-3)

 la brasa de mis huesos,

que no calla (Jer 2O,9)

-Dame de tu valor para embridar los míos,

los que nacen y mueren en mi casa;

como fugaz visita,

que deja más dolor cuando se marcha.

Invádeme, Señor.

Me rindo a tus deseos.

Ya son míos. Soy otro. El mismo; no un extraño;

pero ardiente y feliz,

Divinizado.