Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

jueves, 29 de marzo de 2012

LA MEJOR ORACIÓN

 


Nos afanamos en buscar oraciones, oraciones que son formas de expresar al Padre cuanto le queremos y deseamos hacer su voluntad, porque querer no es otra cosa que hacerle, a la persona querida, la vida feliz, y en el caso de nuestro Padre Dios, será hacer su Voluntad, porque a Dios la única, entre comillas, felicidad que le podemos dar es dejarnos amar por Él.

Sin embargo, olvidamos con frecuencia que la mejor oración la tenemos diariamente a nuestro lado. Son aquellas personas con las que convivimos. Una sonrisa, un gesto amable, un buenos días alegre, disponible, en actitud de servicio, de cercanía, de escucha, de comprensión, de... Esa actitud es la mejor de las oraciones, y la que nunca termina, constantemente las veinticuatro horas, hasta cuando dormimos.

Es la contemplación permanente en presencia del Padre, y la que verdaderamente más agrada al Señor, porque con ella no solo le expresamos nuestro amor sino que lo vivimos en los demás. Hacemos su Voluntad. 

Por eso, independientemente que nuestras oraciones gustan de ser hermosas, de expresarles al Padre todo lo que le queremos y amamos, y de que lo queramos hacer lo mejor y más bello posible, lo que importa es que nuestra vida quede encarnada en su presencia y que esa presencia la expresemos en la vivencia diaria en el amor al prójimo, tal y como Jesús, el Hijo de Dios vivo, nos enseñó.

Hoy, cuando la vida se nos hace más difícil por las situaciones que viven muchas familias; hoy, cuando todo parece ponerse cuesta arriba con este laicismo desbocado y sin sentido. Hoy, cuando la democracia no se vive en su honradez y justicia, sino según los intereses de cada uno. Hoy cuando la política se ha convertido en ideales particulares y ambiciones egoístas. Hoy, cuando todo parece perdido, pidamos al Padre ser luz entre los hombres, aceptando, sirviendo, asumiendo, denunciando... pero siempre bendiciendo y amando como ha hecho nuestro querido Papa hoy en Cuba. Amén.

miércoles, 28 de marzo de 2012

UN DÍA AGOTADOR E INTRANQUILO

 ... que te hace sentir bien,pero siempre hay algo que te hace...

Creo que lo mejor que puede tener una persona es lo que más le cueste aceptar. ¿Por qué? Simplemente porque eso es lo que más le costará asumir y, en consecuencia, es lo que más valor tendrá desde el punto de vista de renunciar a sí mismo y ofrecerse a los demás.

Por eso, ese será el sacrificio que más agradará al Señor. No porque te haga sufrir o te exija gran esfuerzo, sino porque ese esfuerzo te ayudará a crecer, a ser más persona y tener autodominio de ti mismo. Los momentos más duros de nuestra vida suelen ser los momentos donde más maduramos y crecemos. Claro, si los asumimos y los aceptamos con responsabilidad y compromiso.

Desde esa perspectiva, el nacimiento de un hijo con alguna minusvalía física representa una gran oportunidad para entregarnos a él o ella y mejorar como persona, porque eso nos exige dar amor, y el amor nos hace mejores. Desde ahí, toda la familia crece y mejora, y se une. El nuevo ser que ha venido, lejos de representar un trastorno y complicación, nos ayuda a unirnos, a valorarnos y a ser mejores. Es el caso de muchos niños y niñas minusválid@s que hoy, por comodidad y descompromiso, se matan.

Siempre en la dificultad se crece si se acepta desde la óptica del amor, y, sobre todo, injertados en el Espíritu Santo. Por eso, este día agotador que he tenido se lo ofrezco al Señor. No he podido rezar mis oraciones diarias con tranquilidad, y he ido un poco de cabeza y acelerado. Tengo la sensación que el día se me ha escapado de la presencia de Dios, y así noto su ausencia y paz.

Sí, al menos, he podido ir a la Eucaristía, ¡menos mal!, pero me siento intranquilo y cansado. Después de pasar tiempo y tiempo, el problema de la avería del agua sigue en casa. Experimentas que cuando te ocurre algo, ese algo te desplaza a Dios. Y me he dado cuenta, y me rebelo contra eso. Por eso, ahora, cuando tengo algo de tiempo, y he tenido que sobre ponerme, me paro para reflexionar y hacer la correspondiente a la de hoy.

Y mi oración sale de la experiencia vivida hoy. ¡Señor!, quiero ofrecerte todas mis debilidades, todas mis torpezas y todos mis intereses. Creo que los he puesto a los tuyos, o al menos a los que a ti te gustaría. Fui a resolverlo y pensé más en mis propias fuerzas que en Ti. Pasé por delante de Ti y ni siquiera te visité. Todavía, a estas horas no he rezado todas las oraciones que trata de hacer cada día.

Me doy cuenta del mal hijo que soy. Y eso me enseña a aguantar a mis propios hijos, y a darme cuenta que yo contigo soy incluso peor que ellos conmigo. Creo que todo lo que me ocurre, muchas veces Tú lo permites para que me dé cuenta de muchas cosas. Y, a veces, como hoy, dan resultado.

A medida que hablo y hablo, la paz me va invadiendo y me experimento más en paz y tranquilidad. Creo que lo importante, y lo que Tú quieres es simplemente que te contemos nuestras cosas y que la pongamos en tus Manos. Tú sabrás hacer cosas mejores que nosotros.

Y Tú, Señor, sabes que yo quiero, igual que otros muchos. Queremos ser tus discípulos y que Tú nos conduzcas y nos enseñes el camino y lo que debemos hacer. Sí, sabemos que no va a resultar fácil, pero estamos confiados que encontraremos la salida, porque de eso estamos seguros, Tú vas con nosotros. Un abrazo Señor y hasta mañana.

martes, 27 de marzo de 2012

Buscando a Dios desde el Cautiverio

(Imagen de libertosdoopressor.blogspot

Hoy he querido compartir con todos unas jaculatorias muy personales de quien
 fue en vida José Antonio Primo de Rivera detenido en marzo del 1936 para ser
 fusilado el 20 de noviembre de 1936 en la prisión de  Alicate, España, luego
del triunfo del Frente Popular. Lo he encontrado en un comunicado por la web
que dice: La pasión de José Antonio, la editorial Plaza & Janés acaba de publicar
 un impactante libro-documento de José María Zavala titulado La maleta de José
Antonio. 

Me llama la atención como alguien estando detenido y conociendo que de un
momento a otro pueden acabar con su existencia se vuelve totalmente hacia la
 oración y meditación… a la confianza divina… a la aceptación de la voluntad
divina. No alberga sentimientos de odio, de venganza, de desesperación…sino
por el contrario va preparándose para el desenlace volcando su amor hacia los
que quedan… por un mundo donde haya paz y libertad religiosa.
Es curioso, hoy en día, ante tantos problemas personales, sociales las personas
afligidas, muchas veces  víctimas de tantas injusticias caen voluntariamente en
 la desesperación cerrando toda posibilidad de volverse a Dios desde la oración,
la confianza… donde la voluntad divina se vuelve inaceptable e incomprendida.
Muchas veces optan por quitarse la vida siendo ellos mismos sus propios
enemigos. 
Para mí la gran diferencia estriba en las personas de fe… pero de una fe vivida
en todo momento, en toda situación… una fe siempre en aumento… de poquito
 a poquito que va llevándonos a una libertad espiritual total porque nos hace
 crecer en la confianza y en el abandono a la divina voluntad siempre.

José Antonio logro conservar entre sus efectos personales, dentro de una maleta,
un Cuaderno cuadriculado de bolsillo dándole el título de “Librito de Oraciones”
escrito en lápiz de su puño y letra. Iba escribiendo preces como recordatorios
para su meditación espiritual... a San José pidiéndole una buena muerte, al ángel
de la guarda y "al santo bendito de nuestro nombre", por "la conversión de
pecadores, infieles y herejes a nuestra Santa Religión", por los enfermos y
agonizantes, por el alma de los familiares difuntos o "por las almas del purgatorio en general".

Semanas antes de morir escribió unas jaculatorias e intenciones que revelan sus
 convicciones más íntimas:  a San José pidiéndole una buena muerte, al ángel
de la guarda y "al santo bendito de nuestro nombre", por "la conversión de
pecadores, infieles y herejes a nuestra Santa Religión", por los enfermos y
agonizantes, por el alma de los familiares difuntos o "por las almas del purgatorio
en general".
"- Jesús Crucificado, perdón para España.
- Jesús Crucificado, perdón para tus perseguidores.
- Jesús Crucificado, ocupa todo mi corazón.
- Jesús Crucificado, hacerme mortificado y penitente.
- Jesús Crucificado, darme verdadero dolor de mis pecados y salvar a España".
"Estas oraciones para pedir el triunfo de la Religión y la confusión de sus enemigos y la unión de todos los católicos".

En esta época donde la Cultura de la Muerte va tomando territorio en todo el mundo.Pienso si estaremospreparados para un comportamiento como el de José Antonio. Por otro lado recordemos a nuestro Jesús que nos dice: “El discípulo  no es más que el Maestro”… Hermanos católicos preparémonos para vivir una fe hasta las últimas consecuencias. Vayamos preparándonos viviendo una fe simple, sencilla, motivadora, real, convincente… una fe que sea fuego que nos lance a darlo todo por Amor a Cristo y a su Iglesia. ¿Cuántos hermanos no están viviendo el martirio de la fe en estos momentos de historia para nuestra Iglesia?... simplemente por ser cristianos y ser para otras denominaciones ingratos por nuestro amor a Cristo y a su Iglesia. Seamos consecuentes con nuestras convicciones y objetivos.

 Seamos portadores de la paz y del esplendor de la verdad.

Y añade: "Cruzada de reparación y honor al Santo Crucifijo. Hágase a diario".
José María Zavala nos dice: “El cuaderno se remata con un "ofrecimiento al Señor".

Entre todas se destacan estas jaculatorias muy personales…jaculatorias que poderiamos hacer hoy dia,  actualizándolas con el nombre de nuestra patria. Porque...  ¿acaso no estamos viviendo experiencias semejantes a las que vivió Jose Antonio en su epoca?

Desde la soledad del sagrario.

lunes, 26 de marzo de 2012

PURIFICA, SEÑOR, NO SÓLO MIS PALABRAS, SINO TAMBIÉN MIS PENSAMIENTOS.

LLORO... porque llorar purifica mi alma y alivia mi corazón...

Porque no solo con nuestras palabras hacemos daños, sino también con nuestros pensamientos. Nos comunicamos por frecuencias. Las palabras son frecuencias que llegan a nosotros, a nuestros oídos, y nos transmiten ideas y pensamientos, pero también nuestros pensamientos, sin llegar a convertirse en palabras, son transmitidos y llegan, por frecuencias, a nuestro entendimiento.

Por eso muchas veces nos sorprendemos de cosas que nos parece no haberlas oídos, pero que están dentro de nuestro entendimiento. Y es que todo es percibido por nuestro entendimiento y todo se guarda. Y sale cuando menos lo esperamos. Por eso hay que tener cuidado con nuestros pensamientos.

Y, Jesús nos dice que no sólo lo que digamos o hagamos será tenido en cuenta, sino hasta nuestros pensamientos son también culpables de lo que pensemos. Tanto robar como desear hacerlo tiene su parte de pecado, porque no lo que está fuera contamina, sino lo que sale de lo más profundo de nuestro corazón. Es ahí donde reside todo el mal que nos tienta y nos presenta lucha.

Por eso, poniéndonos en manos del Espíritu, pidamosle que nos de la fortaleza necesaria para nunca dejar que se fragüe en nuestro corazón el nacimiento de pensamientos que culpabilicen y ofenda. Pidamosle que, como Jesús, seamos sanos, bien intencionados, generosos y misericordioso en estar siempre predispuestos a la buena intención para que todos aquellos que se acerquen a nuestro lado noten tu presencia, Señor, y no la nuestra.

Y de esta manera, se sientan perdonados, aceptados, comprendidos y amados y puedan ser partícipes de una convivencia incluyente, sin marginaciones ni rechazos. Amén.

domingo, 25 de marzo de 2012

CUANDO LA FE SE TAMBALEA


Muchas veces el creyente se tambalea en el camino de la fe, se siente ...
 

Son momentos de duda, de tribulación, de desconcierto y de confusión. Son momentos en los que tu fe y la mía se enturbia y se desvanece. Son momentos en los que apetece huir, emborracharse con las luces del mundo y dejarse coger por el olvido del placer y de la indiferencia. Nos instalamos en nuestra zona de confort, plácidos, a gusto, confortables...

Son momentos de preguntas sin respuestas, y, mejor dicho, de preguntas no hechas ni intenciones de tratar de responder. Son momentos de vacíos y de voluntades quebradas, de caminos oscuros y pasos perdidos, de horizontes sin esperanza y de premios de muerte. Detrás no hay vereda sino abismo.

Sin embargo, muerta la fe, la confianza mantiene la esperanza, porque quien confía revive la fe perdida cuando la sombra de la muerte acecha y hace presencia. La confianza llama a la vida, y la vida vuelve porque espera a su llamada. Por eso, Él vino a darnos vida, y vida en abundancia. Sólo una llamada o un gesto de auxilio, hace que sintamos su presencia.

Mantengamos la confianza en el Señor, porque de la confianza nace la fe. Podemos perder la fe, pero nunca la confianza, porque en ella está escondida nuestra esperanza. La esperanza de nuestra salvación y de que Jesús ha venido a decirnos que ha bajado a salvarnos de parte de su Padre.

Digamos, pues. al Señor que estamos prestos a compartir nuestra muerte con la de Él, porque si en Él morimos, con Él resucitaremos también, y una Resurrección eterna y gozosa en su presencia. Amén.