Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

miércoles, 6 de octubre de 2021

ORANDO Y CON EL MAZO DANDO

 

Una oración tiene un condición sine qua non y si esa condición no se cumple no hay oración. O es una oración simulada, apoyada en la apariencia y falsa. Porque, la oración tiene que ser viva, activa y concretarse en la misma vida. Es ese refrán que dice: a Dios rogando y con el mazo dando. Es decir, la oración tiene que injertarse en la vida misma y hacerse vida, es decir, saltar de la palabra a la vida misma. 

Y está claro que nuestra vida está muy por debajo de nuestras oraciones. Al menos la mía. Mi vida no va acorde con mis oraciones ni con mis intenciones. Y experimento el dilema tal y como decía san Pablo: hago lo que no quiero y no hago lo que quiero.

 Esa es mi lucha de cada día, vivir con más coherencia. Sin embargo, experimento que no me doy plenamente, que guardo tiempo y apetencias para mí y camino confundido y a veces inquieto y desconcertado. Me mantiene la esperanza y la misericordia de Dios.

Por otro lado, pienso que puedo estar exigiéndome más de la cuenta y eso puede ser peligroso y cosa del demonio que nos está siempre importunando. La oración del Padrenuestro me tranquiliza porque tengo un Padre que es Infinitamente bueno y poderoso, y no me dejará, si confío en Él, en manos del príncipe de este mundo. Y quiero santificarlo, y lo hago, aunque sé que nunca estoy a la altura. Y quiero anunciar su Reino es este mundo y, lo intento con las reflexiones, catequesis, libros y tertulias que aprovecho cuando tengo la ocasión. 

Y busco pequeños y humildes compromisos en la familia como obedecer todo lo que me piden en el servicio, en ayudar y tratar también de escuchar. Y experimento también que el Espíritu de mi Padre Dios me auxilia y mi guía. Por todo ello, gracias Padre. Ayúdame a rezar cada día mejor, tanto de palabra como con mi vida esa hermosa oración que tu Hijo el Señor, nos ha enseñado con su Palabra y su Vida. Amén.

No hay comentarios: