Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

domingo, 13 de octubre de 2019

TODO ES DON GRATUITO

Lucas 17: 11-19   Iba Jesús camino de Jerusalén cuando entró en una pequeña aldea. A su encuentro salieron 10 hombres enfermos de l...
La vida es un regalo. No sabemos por qué nos ha sido dada, ni, tampoco, nadie ha contado con nosotros para dárnosla. Ni, incluso, nuestros progenitores, colaboradores directos con Dios en dárnosla, nos han pedido permiso. Así que sin que nadie haya contado con nosotros hemos venido a este mundo, pero, cierto es que Alguien si ha querido y pensado en nosotros y ha decidido traernos a este mundo. ¡Y lo real es que estamos en él!

Ahora, ¿cuál debe ser nuestro camino y nuestro destino? El tiempo de nuestra vida debe enseñarnos y servirnos para descubrirlo., pero, sobre todo, para dar gracias por todo lo recibido, de forma gratuita y sin ningún merecimiento. Es posible que esa vida regalada no sea tan hermosa como nos hubiese gustado, pero de una forma u otra, esa vida nos es muy valiosa para encontrar la que realmente buscamos y para lo que fundamentalmente hemos sido creados.. Es decir, para vivir plenamente feliz eternamente.

Mirar para otro lado es ridículo y absurdo, pues sabemos el final de este camino terrenal, y, por la fe, esperamos gozar eternamente en el otro mundo. Sin embargo, para eso es necesario despertar nuestro corazón adormecido y, quizás, instalado y acomodado, en un corazón dado, generoso, disponible  y misericordiosamente amoroso, agradeciendo todo lo recibido gratuitamente, de la misma manera que debemos ofrecerlo y darlo.

Sobre todo, la gran oportunidad para la que esta vida, a la que hemos nacido, nos sirve es para, dándonos en amor misericordioso, alcanzar la Verdadera, Plena y Eternamente Gozosa. Amén.

sábado, 12 de octubre de 2019

NECESITO, SEÑOR, TU GRACIA


Resultado de imagen de Lc 11,27-28
Verdaderamente lo importante es escuchar, leer y cumplir la Palabra del Señor, pero, imprescindible es partir de una actitud humilde y reconocer que mis esfuerzos y voluntad no bastan para cumplirla. Reconocerme pecador y limitado y que la Palabra está por encima de mis posibilidades y capacidades es el punto de partida para abrirme a tu Gracia, Señor, y por la acción de tu Espíritu recibir las fuerzas necesarias para cumplirla.

Por todo ello, Señor, te pido y te digo hoy, mañana, en este momento y siempre que necesito tu Gracia para, actuando libremente y poniendo ante Ti todo lo que también de Ti he recibido, cumplir tu Voluntad según tu Palabra. Confiando en tu promesa de que pidamos, busquemos y llamemos, estoy convencido de que me escuchas y de que cumples lo que prometes y espero firmemente y con plena seguridad recibir las fuerzas necesarias para vivir el resto de mi vida en tu Palabra.

Eso sí, no sé cuándo ni cómo, porque tus proyectos, Señor, no son mis proyectos, pero confío en, por la acción del Espíritu Santo, aceptarlo, asumirlos y, pacientemente, abandonado en tus Manos, poder cumplirlo para, por tu Infinita Misericordia ser bienaventurado según tu Palabra. Gracias, Señor por darnos una Palabra que nos une, que nos hace iguales, que nos considera a todos hermanos e iguales en dignidad y que nos reune en torno a nuestro Padre del Cielo.

Gracias, Señor, por crear en torno a tu Palabra una sola familia universal que nos engloba a todos sin distinción de raza, ideologías, credos u otras diferencias. Todos bajo una misma fe y un mismo Padre. Amén.

viernes, 11 de octubre de 2019

LÍMPIANOS, SEÑOR, DE TODO MAL

Imagen relacionadaHOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS. 


No estamos en un mundo bueno ni tampoco creyente. Hay muchas dudas y buscamos milagros que nos convenzan, que siempre, dicho sea de paso, no nos dejaran convencido del todo. La fe será siempre la cabalgadura que nos lleve por el camino que nos señala el Señor. Nada nos convencerá ni nos hará ver claro, pues eso desplazaría la necesidad de la fe. Y la fe es necesaria hasta que llegue la hora de estar en la presencia del Señor. Entonces sólo quedará la caridad - 1ª Co 13 - el amor, porque tanto la fe como la esperanza habrán llegado al final de su camino.

El pecado habita en este mundo y  nos ha contagiado. Pero, por la Gracia y Misericordia de Dios hemos sido purificados y lavados por el Espíritu Santo en la hora de nuestro bautismo. Sin embargo, en nuestra andadura por este mundo experimentamos las amenazas y peligros de volver a quedarnos manchados. Nuestra debilidad es grande y el Maligno, sabedor de ello, nos tienta y nos seduce aprovechando nuestras debilidades, pasiones y apetencias.

Te damos gracias, Señor, por habernos dejado la puerta del bautismo, por el que somos auxiliados y asistidos por el Espíritu Santo, pero, sobre todo, Señor, por ese Sacramento de la reconciliación que, por tu Gracia, recibimos la Infinita Misericordia que nos devuelve a la Vida de la Gracia y nos descontamina de todo pecado que infecta nuestra vida y la pierde.

Gracias, Señor, por ese hermoso regalo, y aprovecho para pedirte que nos auxilies y pongas en mi camino la ocasión y el medio para que, por la Gracia del Espíritu Santo y el poder conferido por Ti, Señor, limpie mi alma de todo pecado. En esa esperanza nos apoyamos, Señor, confiado en tu Palabra y en tu Amor Misericordioso. Danos también la paciencia necesaria para sostenernos firmes sobre la Roca de tu Palabra y de tu Amor, y aumenta y sostén nuestra fe firme y confiada en tu presencia con nuestra firme y segura respuesta a tu Palabra. Amén.

jueves, 10 de octubre de 2019

INUNDA MI ALMA, SEÑOR, DE TU ESPÍRITU

Resultado de imagen de Lc 11,5-13


H I M N O

Autor del cielo y el suelo,
que, por dejarlas más claras,
las grandes aguas separas,
pones un límite al hielo.

Tú que das cauce al riachuelo
y alzas la nube a la altura,
tú que en cristal de frescura
sueltas las aguas del río
sobre las tierras de estío,
sanando su quemadura,

danos tu gracia, piadoso,
para que el viejo pecado
no lleve al hombre engañado
a sucumbir a su acoso.

Hazle en la fe luminoso,
alegre en la austeridad,
y hágale tu claridad
salir de sus vanidades;
dale, Verdad de verdades,
el amor a tu verdad. Amén.
Laudes del jueves - 
XXVII semana del Tiempo Ordinario

miércoles, 9 de octubre de 2019

EN CUMPLIMIENTO DE SU VOLUNTAD

Resultado de imagen de Lc 11,1-4
La oración del Padrenuestro manifiesta esa Voluntad del Padre que es prioritaria en la vida de Jesús. Todo está puesto en Manos del Padre y mi voluntad será la del Padre. Esta actitud es la que vive Jesús en cada momento de su vida y, eso, es lo que se ve, se nota y se transmite.  No se trata, pues, de una oración doctrinal ni unas jaculatorias piadosas. Se trata de un diálogo con el Padre en el que le confesamos nuestra fe en que está en el Cielo y en la voluntad de ser dócil a su Palabra.

Padre del Cielo, también nosotros, siguiendo a tu Hijo Jesús, queremos pedirte que nos des la fortaleza y sabiduría para vivir en tu presencia reconociéndote y santificándote como nuestro Padre y haciendo presente tu Reino entre nosotros según tu Voluntad. Padre, te pedimos esa fuerza y capacidad para aceptar todas las cosas que la vida nos depara y que nos provea de todo lo que necesitamos para cumplir tu Voluntad.

También, Padre, te pedimos que nos enseñes a vivir en tu Misericordia y sabernos queridos y perdonados de nuestras faltas y errores por tu Infinita Misericordia. Pero, sobre todo, Padre, te pedimos que nos transformes nuestros corazones endurecidos por la soberbia y el egoísmo y sepamos, de la misma manera que tu nos perdonas, perdonar a nuestros hermanos.

El mundo es una ocasión de pecado, pues tiene muchas circunstancias y situaciones de seducción. Cada instante de nuestro camino trae también, Padre, su tentación. Ayúdanos a superarlas tal y como hizo tu Hijo Jesús en su paso por el desierto. Líbranos del Maligno, que está pendiente de nuestras debilidades para incitarnos al pecado, a la desobediencia, a las apetencias y concupiscencias que nos harían caer en el egoísmos y en el pecado. 

Padre, confiados en tu Palabra y en tu Misericordia, nos ponemos en tus Manos y siguiendo el Camino, la Verdad y la Vida que tu Hijo, nuestro Señor, nos ha señalado, caminamos en la esperanza de llegar a Ti para, según tu promesa compartir la Gloria que Tú nos has dado por los méritos de tu Hijo, nuestro Señor. Amén.

martes, 8 de octubre de 2019

ORAR PARA SERVIR

Resultado de imagen de Lc 10,38-42
Sin notarlo ni ser consciente nuestra vida se va sumergiendo en el trabajo hasta el punto de quedar atrapados en el tiempo y sometidos a la esclavitud laboral. Sin embargo, a pesar de ello nuestro trabajo será fecundo y generoso con respecto a los demás en la medida que nuestro corazón sea semejante al de Xto. Jesús. Porque, un corazón simplemente humano es por su propia naturaleza un corazón egoísta y sólo en Manos del Espíritu Santo puede transformarse en un corazón suave, sencillo, manso y humilde, capaz de entregarse al servicio de los demás, tal y como hizo Jesús y como nos enseñó. 

Por todo ello, Señor, te pedimos que nos transforme nuestro corazón egoísta en un corazón generoso, compasivo y abierto al servicio y alivio de los que sufren y padecen esclavitud, egoísmo y sometimiento de los poderosos y dictadores de este mundo. 

Te damos gracias, Señor, por todo lo que nos has dado y te pedimos también que no lo guardemos, como ocurrió con aquel siervo que enterró el talento recibido, sino que lo negociemos con nuestro esfuerzo y riesgo para ponerlo en función del bien de los demás. Danos, Señor, esa fortaleza y capacidad para no desfallecer y para saber gastar nuestro tiempo en hablar contigo, abrirte nuestro corazón, escucharte y poner por obra tus enseñanzas en nuestra vida.

Es ese el Tesoro más preciado, Señor, y el que te pedimos para, teniéndolo, llevarlo a nuestra vida y ponerlo por obra. Gracias, Señor. Amén.

lunes, 7 de octubre de 2019

SIN DIOS NO HAY AMOR

Resultado de imagen de Lc 10,25-37 por Fano
Hemos sido creados semejantes al Señor, y eso significa que nos parecemos algo a Él, pero esa semejanza no tendrá efecto si nos apartamos de su presencia. Si de Él hemos salido, a Él volveremos. Por lo tanto, todo lo que sea alejarnos de la presencia del Señor es pérdida y muerte. Necesitamos, no sólo estar cerca de Él sino permanecer en Él e intimar con Él a través de la oración.

Porque, es el contacto permanente con Él a través de la oración lo que nos va a permitir experimentar que con y en Él todo es posible. Y eso significa que será posible amar, pero no al estilo humano donde todo lo que se da se guarda y se valora para, en recompensa y compensación, recibir el valor de lo dado. Será posible, decíamos, un amor al estilo de Jesús. Significa eso que será un amor gratuito, sin condiciones y pleno hasta el extremo de entregar la vida.

Una vida que quizás no sea cruenta, pero sí sacrificada día a día en el servicio entregado, en la disponibilidad diaria y la obediencia a darse gratuitamente. Posiblemente, esa medida de amor sea más sangrante y más sacrificada que la entregada toda y al instante. Una vida servida y dada gota a gota, en la escucha, en la atención, en la disponibilidad, en la comprensión, en el servicio y en la solidaridad al que más lo necesita, al marginado y al excluido.

Eso, Señor, es lo que pedimos, un corazón generoso, comprensivo, escuchante, atento y disponible a auxiliar, a comprender, a escuchar, a aliviar y a servir de forma gratis y por amor. Y eso sabemos que nuestro corazón egoísta y endurecido no lo podrá realizar sin tu auxilio y tu Gracia. Por eso, Señor, te pedimos que transformes nuestro corazón de piedra en un corazón de carne, tierno, suave, humilde y sencillo para que ame como Tú nos amas. Amén.