Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

jueves, 7 de marzo de 2013

SALMO 85





Inclina tu oído, Señor, escúchame,
que soy un pobre desamparado;
protege mi vida, que soy un fiel tuyo;
salva a tu siervo, que confía en ti.

Tú eres mi Dios, piedad de mí, Señor,
que a ti te estoy llamando todo el día;
alegra el alma de tu siervo,
pues levanto mi alma hacia ti;

porque tú, Señor, eres bueno y clemente,
rico en misericordia
con los que te invocan.
Señor, escucha mi oración,
atiende a la voz de mi súplica.

En el día del peligro te llamo,
y tú me escuchas.
No tienes igual entre los dioses, Señor,
ni hay obras como las tuyas.

Todos los pueblos vendrán
a postrarse en tu presencia, Señor;
bendecirán tu nombre:
"Grande eres tú, y haces maravillas;
tú eres el único Dios".

Enséñame, Señor, tu camino,
para que siga tu verdad;
mantén mi corazón entero
en el temor de tu nombre.

Te alabaré de todo corazón, Dios mío;
daré gloria a tu nombre por siempre,
por tu gran piedad para conmigo,
porque me salvaste
del abismo profundo.

Dios mío, unos soberbios
se levantan contra mí,
una banda de insolentes
atenta contra mi vida,
sin tenerte en cuenta a ti.

Pero tú, Señor,
Dios clemente y misericordioso,
lento a la cólera, rico en piedad y leal,
mírame, ten compasión de mí.

Da fuerza a tu siervo,
salva al hijo de tu esclava;
dame una señal propicia,
que la vean mis adversarios
y se avergüencen,
porque tú, Señor,
me ayudas y consuelas.

Gloria al Padre y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
Por los siglos de los siglos. Amén.

miércoles, 6 de marzo de 2013

ENSEÑAR VIDA



Jesús nos ha traído la vida, y sus enseñanzas nos transmiten vida, deseos de vivir que se confunden con deseos de verdad. Porque vida y verdad se mezclan en una sola palabra. La vida, cuando es verdadera vida, está apoyada en la verdad. Porque solo la verdad nos hará libre, y solo la vida merece la pena vivirla desde la verdad y la libertad.

Por eso, vida que no esté apoyada en la verdad, no es libre. Y vida encadenada y esclavizada, tampoco es vida. Por eso, solo Aquel que es Camino, Verdad y Vida puede transmitir la verdadera vida. Y es esa vida la que vale la pena vivir.

De tal forma, que para dar vida, hay que transmitir vida. Y solo así se puede enseñar: "transmitiendo vida, verdad y justicia". Por eso, Jesús, no viene a abolir nada, sino a desenterrar la verdadera verdad y vida, para sepultar todo aquello que habla de pecado y muerte.

Señor, ilumina nuestras vidas para que, injertadas en Ti, por obra y gracia del Espíritu Santo, seamos capaces de transmitir vida, verdad y justicia.

martes, 5 de marzo de 2013

¿UNA ORACIÓN PASIVA, INDIFERENTE?



Puede ser que eso nos esté ocurriendo. Cada día rezamos, ¿pero nuestra oración está motivada, vivida desde los acontecimientos de la vida, o, simplemente es pura rutina y formulismo? Porque cuando se reza, se pide fuerzas para cambiar eso que nos preocupa y nos amenaza, ya sean problemas o dificultades que hemos de soportar.

También, hay momentos de oración de intersección para cambiar algo que a nosotros está vedado. El ritmo o destino de la naturaleza solo la puedes cambiar Tú, Señor, y eso te pedimos muchas veces. Pero, en muchas otras cosas te pedimos favores que nos corresponden a nosotros cambiar, y, pensamos, que con pedir tenemos. La indiferencia nos puede llevar a creernos que ahí empieza y termina nuestra oración.

Cada oración tiene un compromiso, y si el compromiso no aterriza en la vida, la oración puede evaporarse y confundirse en el aire del mismo cielo. La oración supone frutos, y esos frutos son consecuencias de nuestra acción de cultivar la propia oración. No salen por arte de magia. Sí, necesitan la Gracia, sin ella es como tierra sin agua, pero la Gracia cuenta con nuestra propia tierra, nuestra oración amasada con el estiércol de nuestra vida. Y es ahí donde se producen los frutos que Dios espera.

Hagamos una oración comprometida, cultivada en la tierra de nuestro ser, y abonada con el acontecer diario de nuestra vivencia en Cristo Jesús y guiado por su Espíritu.

lunes, 4 de marzo de 2013

¡SEÑOR!, NO SÉ SI SON BUENOS MIS FRUTOS



Ese es mi problema, y lo que hace mi carga más pesada y difícil de llevarla. Porque siento la debilidad de mis pecados, y me fallan las fuerzas de mi entrega y generosidad. Sí, no estoy satisfecho con mi cosecha, ni tampoco con los frutos que ofrezco a mi Señor. Me siento avergozado y temeroso de que el Señor no quede contento con mi ofrenda.

Sin embargo, por otro lado, me siento esperanzado porque creo en su Misericordia, y porque confío en su sabiduría y conocimiento de mis pecados y debilidades. Su venida ha sido para redimirme y sacarme de esta abulia que me martiriza y me ensoberbecer. No vino el Señor para premiarme, sino todo lo contrario, para perdonarme y redimirme. Por eso, me siento, a pesar de mis fracasos, perdonado y salvado.

Pero, así y todo, no puedo permanecer con los brazos cruzados. Quiero fertilizar mi propio árbol, mi particular higuera, y cultivarla a limite de mis posibilidades para sacar de mi tierra infertil lo mejor de sus frutos. Necesito tu agua de Gracia, Señor, para, regada mi tierra, rinda los mejores frutos de mi cosecha en tu Nombre.

domingo, 3 de marzo de 2013

ORACIÓN



"LA PRUEBA: UNA PRO-VOCACIÓN

Jesús, Salvador nuestro,
Tú que eres compasivo
y misericordioso,
perdona nuestra falta
de confianza en Ti
en los momentos de prueba.
Gracias por la infinita paciencia
y ternuraque tienes con nostros,
nos vas cuidando y esperando
 que demos frutos de santidad.
Haz que la prueba sea 
para nosotros
una oportunidad para crecer
y madurar en el amor.
"Bendice alma mía al Señor
y no olvides sus beneficios".

sábado, 2 de marzo de 2013

EN TU PRESENCIA



¡Señor!, como siempre me pongo delante de Ti, porque quiero creer que Tú estás ahí, en el Sagrario. Pero no te siento, ni tampoco te escucho. Yo sé que Tú si me escuchas, pero yo no, a pesar de intentarlo y de empeñarme en ello. Quiero pero no alcanzo a escucharte. Y me da miedo que termine escuchándome a mí mismo, y sea yo mismo quien me pregunte y me conteste.

Es tanto mi empeño en escucharte que a veces creo oírte, pero luego dudo si realmente eres Tú quien me has hablado, o vuelvo a ser yo quien me interpreto. Me confundo y dudo de si eres Tú quién me habla, o soy yo quién me contesto.

Pero, a pesar de todo, quiero creer, y en eso me empeño, y te lo súplico. Dame la capacidad de oírte y de saber entender que quieres que haga.

viernes, 1 de marzo de 2013

¡PADRE!, ENSÉÑAME A ORAR.


 Porque sin saber orar bien, no podré vivir bien. Y vivir bien es vivir en tu presencia, en tu amor y justicia. Por mucho que queramos, dentro de nosotros se esconde el deseo de justicia y de amor, y a pesar de nuestro rechazo, por nuestra humanidad pecadora y débil, estaremos siempre intentando acallar nuestra conciencia con buenos actos que obedecen más a nuestros remordimientos que a nuestro amor.

Pero queremos ser mejores. Todos los hombres aspiran a ser mejores. Rechazan el mal y la injusticia. No basta sino mirar todo el entorno que nos rodean y comprobar que la verdad es el bien común y todo lo que los hombres quieren. Y esa Verdad solo está en Ti, Señor. Dánosla y fortalécenos para que sepamos, injertados en Ti, ser más justos y caritativos.

Señor mío y Dios mío, enséñanos a orar y a escucharte, porque solo contigo y en Ti encontraremos el camino de la felicidad eterna que buscamos.