Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

sábado, 28 de febrero de 2015

SIN AMOR NO PUEDES AVANZAR



Es indudable que necesitas amar para crecer en conversión. Sin amor no puedes avanzar. Necesito amar, Señor, y eso te pido desde este humilde rincón de oración. Soy un pobre pecador que quieres seguir tus pasos y sin Ti nada puedo hacer.

Experimento mi incapacidad, al menos yo solo no puedo, porque tropiezo contra mi propio egoísmo y el egoísmo de los demás. Y no digamos cuando se trata de enemigos, de gente que busca hacerte daño y que guardan segundas intenciones malas contra ti.

No tengo fuerzas, Señor, para amar de esa manera. No llego sino a amar a aquellos que piensan o son afines a mis gustos, aficiones o apetencias. Me cuesta amar a los que me dan problemas y presentan dificultades. Por eso, Señor, pido tu concurso, tu ayuda y tu Gracia, para doblegar mi corazón, amansarlo y llenarlo de mansedumbre.

Sólo así podré transformarlo y llegar a amar. No sólo a mis amigos, sino también a aquellos que me hacen mal y se presentan como enemigos. Porque esa es la señal y la característica que distinguen a los cristianos de los que no lo son: el amor a los enemigos. Tal y como Tú, mi Señor, has hecho y enseñado.

Danos, Señor, un corazón de carne cargado de ternura, de bondad y de misericordia, para ser capaz de amar como Tú amas. Amén.

viernes, 27 de febrero de 2015

ABIERTO AL PERDÓN PORQUE TÚ, SEÑOR, LO DICES

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA UNIDA Y DEFENSA DE LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS




Experimento que no puedo. No soy capaz de perdonar a mis enemigos. ¡No puedo, Señor!, y no puedo porque mi naturaleza humana, débil y pecadora, no me permite hacerlo. Mi corazón, endurecido como piedra, no admite compasión ni misericordia al enemigo. ¿Cómo entonces me mandas perdonar, Dios mío?

En el silencio de mi angustia descanso desesperado, y espero buscando respuestas que me ayuden a entender tu exigencia. Pasa el tiempo y no llego a entenderlo. Quizás no pueda, pero si logro comprender que Tú, que has entregado a tu Hijo para salvarme, no puedes ahora exigirme algo imposible de cumplir.

Permanezco pensativo y empiezo a abrirme. Abrir mi corazón a tu Gracia y entregarme a tu acción. Claro, a mí me será imposible, pero contigo seré mayoría aplastante. Injertado en Ti, Señor, podré vencer el odio de mi corazón y suavizarlo para no guardar rencor contra mis adversarios. No sé cómo lo harás, pero si sé que Tú lo puedes todo.

Abro, Señor, mi corazón al perdón de todos los hombres, a pesar de mis pecados y de mis propias limitaciones. Y lo hago, Señor, parodiando a Pedro cuando echó las redes al mar simplemente porque Tú se lo has dicho. Yo también lo hago porque Tú, simplemente Tú, mi Señor, me lo dices y me lo exiges.

Si Tú, Dios mío, lo dices, yo lo hago, porque sólo Tú tienes Palabra de Vida Eterna. Amén.

jueves, 26 de febrero de 2015

ES BUENO PEDIR



A nadie le amarga un dulce, ni a caballo regalado se le miran los dientes. Son refranes que algunas veces hemos oído en el refranero popular y que experimentamos que coinciden con la realidad. Es bueno pedir y recibir, sobre todo, y así se entiende, cosas buenas.

El hecho de pedir nos tranquiliza y nos fortalece, pero cuando se trata de pedir a un padre, todo es diferente. Porque sabemos que un padre nos atiende siempre. Al menos eso es lo que esperamos todos. Pero, todavía es más diferente, cuando ese Padre es Dios. En Él confiamos y sabemos que somos escuchados.

Pero, más todavía, sabemos que ese Padre lo puede todo, y todo nos lo puede dar. Sucede, sin embargo, que, como buen Padre, quiere lo mejor para nosotros, y evitará darnos lo que no nos conviene,  a pesar de que nosotros no lo entendamos. Ocurre que podemos creer que no nos escucha, porque no vemos que nos ha dado lo que hemos pedido.

Posiblemente, eso que tú y yo pedimos no sabemos si es lo que nos conviene, aunque nosotros estemos convencidos que sí. Más tarde, en el tiempo, vemos más claro y nos damos cuenta que aquello hubiese sido malo. Por eso confiamos en Él, porque no solo nos da lo que necesitamos, sino que evita darnos cosas malas que nos pierdan.

Gracias, Señor, por sentir tu Gracia y tu ayuda,  a pesar de en algunos momentos no entender tus respuestas o silencios. Gracias, Señor, por estar ahí, por ser mi esperanza y por sostener mi caminar de cada día. Gracias, Señor, por esperar confiadamente el momento de mi partida y vivir con gozo ese momento glorioso de estar en tu presencia y conocerte tan directo que ya no me haga falta la fe de creer en Ti.

Gracias Señor porque espero confiado en tu Palabra que el momento de mi muerte sea el momento más glorioso de mi vida. Pues a él me dirijo y camino abandonado en tu brazos. Dame la sabiduría y la ocasión de verlo llegar. Amén.