Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

sábado, 23 de junio de 2018

CUESTIÓN DE DECIDIR

Resultado de imagen de Mt 6,24-34
Me decía un amigo esta tarde que él no lo tenía claro. Se refería a la fe. Le gustaría, pero no tiene fe en que está llamado a vivir eternamente. Es una persona estupenda, de muy buen corazón, honesta y dada a la solidaridad, la verdad y generosa. Pero, le cuesta o no tiene el don de la fe. Quizás, y es verdad, que no se lo ha planteado y tampoco la ha pedido. Quizás el mundo le ha complacido y le ha ido bien. No lo sé, pero ahora con 84 cumplidos espera que en cualquier momento, aunque goza de una salud muy buena, le llegue el momento de la despedida.

Tengo gran amistad con él y confianza para hablar de estas cosas, y le digo que está llamado a una vida que nunca termina y que será más plena que esta. Una vida en plenitud y para siempre. Pero, el resultado es siempre el mismo. No conocen a Jesús no creen en su Palabra. También, con el médico que me implantó el desfibrilador hablamos de la fe y del amor. Confesó que si un tiempo estuvo cerca y parecía tener fe, ahora sólo cree en la vida y le encanta y cuando se acabe se acabó. 

Le dije que eso era un gran pobreza. Por mucho que aspire a vivir bien, llegarán momentos malos y de dolor. La vida aquí, a pesar de compartir momentos felices no te da la plenitud que tú buscas y puede ser tarde cuando lo descubras. El diablo te juega una mala pasada con el mundo que te ofrece lleno de espejismos y fantasías caducas. Necesitamos descubrir nuestra máxima aspiración que es vivir en plenitud eternamente. Y eso sólo se consigue optando por Dios y dejar todo lo demás, dinero, pasiones, placeres o egoísmos.

Si no lo ves, pídelo e insiste. Vale la pena pedirle al Señor que nos dé esa luz que necesitamos para descubrirle y esa fortaleza que, también necesitamos, para seguirle dejando a un lado todos los demás señores con minúscula. Tú, Señor, eres el Señor con Mayúscula de mi Vida. Amén.

viernes, 22 de junio de 2018

TESOROS CADUCOS

Resultado de imagen de Mt 6, 19-21 por Fano
HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS.


Nuestra mirada está contaminada por el pecado y cegada por la oscuridad. Somos bastante necios al creer que nuestra felicidad la podemos encontrar en este mundo. Una felicidad apoyada en el dinero, el poder, el sexo, los placeres...etc. Una felicidad efímera, pues aparece y desaparece sin dejarnos satisfechos ni plenos de gozo y felicidad. Una felicidad que nos esclaviza y que nos obliga a repetir y repetir para sostener el gozo hasta el punto de cansarnos.

Experimentamos que caemos en sus redes y quedamos esclavizados hasta el punto que nos será difícil salir. ¡Qué ciegos estamos! No somos capaces de ver la realidad y pensar que esta no es la felicidad que queremos porque no nos soluciona nada. Aquí, en este mundo, todo termina, y lo que termina no sirve de mucho. Necesitamos y aspiramos a lo eterno. Eterno y en plenitud y eso no está aquí abajo.

¿Y cómo buscarlo? Jesús nos lo dice claramente en el Evangelio de hoy, limpia tu ojo para que tu cuerpo esté sano y tenga luz. Y teniendo Luz vea bien el camino por donde tiene que ir, un camino de verdad y de vida. Pidamos esa Gracia y caminemos con el Señor, Luz del mundo, para que iluminados por Él podamos ver también el verdadero tesoro que tenemos que atesorar. 

No encuentras la luz en las tinieblas, porque el mundo en el que vivimos está en tinieblas. Busca la Luz en el Señor, porque sólo Él es el Camino, la Verdad y la Vida. Amén.

jueves, 21 de junio de 2018

DIOS CONOCE NUESTRAS NECESIDADES

Resultado de imagen de Mt 6, 7-15
Algo que todos sabemos y que damos por supuesto es que Dios sabe quienes somos, que necesitamos y que nos conviene. Es nuestro Padre y nuestro Creador, por lo tanto sabe que hay en nuestro corazón y que realmente nos puede ayudar a mejorar. Sin embargo, a pesar de todo eso, nos falta la confianza y la fe. Y por eso rebuscamos las palabras y tratamos de escondernos en ellas.

Jesús nos enseña a orar y nos dice que no hace falta hablar mucho. Nos invita a rezar con el Padrenuestro, que nos lo enseña y que con eso basta. Realmente, el Padrenuestro nos marca un estilo de vida y lo verdaderamente importante. En él reconocemos a nuestro Padre Dios y al llamarle Padre nuestro nos unimos a todos los hombres, pues tener el mismo Padre nos hace hermanos. Reconocemos y descubrimos la necesidad de santificarle y de vivir en su Reino y Voluntad tanto aquí abajo, en la tierra como en el Cielo.

Le pedimos por nuestras necesidades. Él nos conoce y sabe lo que, no sólo necesitamos, sino lo que realmente nos conviene. Pero, sobre todo, le pedimos que nos ayude a perdonar para también ser perdonados, porque según con la misericorida que vivamos así también seremos tratados. Será muy importante pedirle que nos libre de la tentación y del peligro del mal. Pero a todo eso, tenemos también nosotros, porque hemos sido creados libre, colaborar y esforzarnos en poner todo lo que podamos de nuestra parte.

Pidamos esa sabiduría, la de pedir lo que realmente nos ayuda a amar, a ser mejores, a perfeccionarnos como nos invita Jesús. Pidamos la fortaleza y voluntad para vivir cada día el Padrenuestro. Amén.

miércoles, 20 de junio de 2018

PARA GLORIA DE DIOS

Resultado de imagen de Mt 6,1-6.16-18
En muchas ocasiones confundimos nuestro papel y actuamos buscando nuestra gloria y no la Gloria de Dios. Es esa nuestra misión y a lo que Jesús nos invita, a obrar para Gloria de Dios. Todo nuestras obras deben ir dirigidas para Gloria de Dios y no buscando nuestra propia gloria, que es lo que hacemos cuando pretendemos lucirnos con nuestra limosna o con nuestras oraciones. No debe preocuparnos que caigamos en ese error y pecado, pero sí debemos reconocerlo y esforzarnos en salir de él. Todo nuestro ser y obrar debe ir en función de y para Gloria de Dios.

Está permitido caer, pero terminantemente prohibido detenernos y regresar. Siempre adelante y a cada caída levantada. Para eso tenemos las dos grandes herramientas que nos fortalecen y nos limpia. Los sacramentos de la Penitencia y la Eucaristía. En ellos podemos reforzarnos, limpiarnos, renovarnos y volver al camino. Siempre adelante y buscando en todas nuestras obras la Gloria de Dios. Porque es Él el artífice de todo lo que hacemos y todo de Él lo hemos recibido.

Todo lo hacemos por amor a Dios y en Él debemos estar escondidos, pues su Mirada siempre nos tiene presente. Demos gracias al Señor por reconocernos pecadores y por sostener esta recta intención de tratar de escondernos en Él, para que sea Él quien se refleje en mi vida y en mis actos. Te pido, Señor, que todos aquellos que se acerquen a mí vean tu presencia y no la mía y mi vida sea fiel reflejo de la Tuya. Amén.

martes, 19 de junio de 2018

UNIDOS AL SEÑOR PARA PERDONAR

Resultado de imagen de Mt 5,43-48


Se nos ha dicho en el Evangelio del domingo, el amor de Dios crece en nuestro corazón de forma gratuita y mientras nosotros dormimos o descansamos los frutos maduran en nuestro corazón. Significa eso que todo depende de Dios y se nos ha dado gratuitamente. Y eso nos descubre que sin Él no podemos hacer nada.

Por lo tanto, no pensemos que podemos perdonar si no estamos unidos al Señor. Quizás a un amigo, familiar o conocido podemos perdonarle alguna vez, pero no muchas. Y menos a un desconocido, estraño o enemigo. Y el amor se mide, no por su cantidad, sino por su gratuidad y su incondicionalidad. Esa es su verdadera medida. Recordemos los dos reales de aquella viuda pobre que Jesús resaltó por encima de todos aquellos fariseo que destacaban sus donativos en el arca del Tesoro-Lc 21, 1-4-.

Aprovechemos este momento de oración y desde este humilde rincón, unidos a todos los que. pasando por aquí, quiera unirse, recemos un Padrenuestro reflexionado y pausado pidiendo que nuestro endurecido y egoísta corazón se ablande, se suavice y se transforme pareciéndose un poco más al corazón de Jesús. Amén.

lunes, 18 de junio de 2018

NECESITAMOS SIMPLEMENTE ORAR Y ORAR

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La semilla no necesita de ti. Sólo necesita que la hundas en la tierra, y crece irremediablemente sin contar contigo. Quizás necesita que le dejes el campo bien preparado, con la suficiente humedad y abonos para que ella por sí sola empiece a crecer hasta dar frutos. Mientras, tú no adviertes nada y no te das cuenta hasta ver el fruto.

Así también es la obra de Dios en el corazón de cada hombre. Sólo necesita que te abras a la acción del Espíritu Santo y le dejes cultivar tu corazón. Un corazón sembrado para amar y perdonar. Un corazón que rehúye de la violencia y que el combate con el perdón y la misericordia. Un corazón abierto al riego, gota a gota, de la Gracia de Dios que va haciendo germinar frutos de amor dentro de tu corazón.

Y sin darte cuenta experimentas el deseo y la fortaleza de ofrecerte, a pesar del daño recibido, al perdón, a la reconciliación y a devolver bien por mal. Esos son los frutos que Dios ha sembrado en tu corazón y los frutos que, abandonado en sus Manos, irás dando y ofreciendo, no sólo a tus amigos, a tus familiares, a los de tus grupos, barrio y ambiente, sino también a los enemigos, a los que están distantes de ti en pensamiento y obras. Incluso a los que son diferentes y piensan diferentes.

Amar, que lleva consigo el perdón, es la respuesta perfecta, buena y la mejor para acercar al otro, y para tenderle un deseo de paz, justicia y verdad. Amar es el camino que Jesús eligió y la respuesta que el mundo necesita. Amar es la solución, por disparata que a algunos les parezca, la que zanja todos los problemas y cultiva el fruto de la paz. Frutos que todos deseamos, buscamos y queremos.

Pidamos con fe y con confianza ese fruto nacido del amor y el perdón. Abramos nuestros corazones a la siembra de la buena semilla y dejemos que el Sembrador la cultive y le dé la Gracia y fortaleza de vencer el rencor y la violencia para generar amor y perdón. Amén.

domingo, 17 de junio de 2018

REGANDO LA SEMILLA DE NUESTRO CORAZÓN

Resultado de imagen de Mc 4,26-34
La oración es el agua con la que regamos la semilla de nuestro corazón. Un agua que nos llueve del cielo cada vez que hablamos con nuestro Padre Dios. Un agua que brota del manantial de su Amor y que fertiliza nuestro corazón dando frutos de amor, porque son frutos que vienen de Dios.

Somos semejante a Él, porque así nos ha creado y nuestros frutos serán buenos frutos porque salen de un corazón semejante a Él y, sobre todo, por su Gracia y gratuidad. Nada obedece y sucede por nuestro trabajo, pues la semilla plantada en la tierra es un misterio. No sabemos qué sucede y como se origina una nueva vida vegetal que crece sin nosotros hacer nada y da hermosos frutos que no alcanzamos a explicar como se forman y originan en las ramas de esa insignificante semilla que, simplemente, hundimos bajo la tierra.

Realmente, es un misterio que no llegamos a comprender. Muchas veces me he preguntado cómo puede suceder eso. Planto una insignificante semilla y, sin darme cuenta, mientras yo duermo y me cruzo de brazo, la semilla crece, se desarrolla y alcanza una altura tan grande que las aves viene a anidar y protegerse de sus ramas. Igual ocurre en nuestra vida, todo sucede por obra y gracia de Dios y de forma gratuita. No merecemos nada ni tenemos ningún mérito. La vida y la salvación es un regalo inmenso y gratuito que Dios nos da. Su Amor es Infinito y tampoco llegamos a comprenderlo sino cuando estemos en su presencia.

Pidamos paciencia, sabiduría, perseverancia y docilidad para poner todo lo que está de nuestra parte para colaborar con Dios y sentirnos inmensamente agradecidos por todo lo que nos da y por esa Vida Eterna que nos promete. Gracias, Señor, porque todo nos viene de Ti y a Ti volverá. Amén.