Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

lunes, 2 de noviembre de 2015

ORAR PRIMERO, PARA LUEGO VIVIR LAS BIENAVENTURANZAS



Sería una locura querer vivir las bienaventuranzas sin llevar el corazón lleno de oración. Todo viaje exige un mochila, donde transportamos agua, alimentos y las cosas más necesarias para poder soportar el camino. Pues bien, la oración es toda la mochila que necesitamos para intentar vivir las bienaventuranzas. Mucha oración a todas las horas. Sin ni siquiera dejar un día para descanso.

Porque la oración es un descanso, un desahogo, un contacto, una vitamina, una compañera, una luz, un esfuerzo, una voluntad y un diálogo constante con el Espíritu de Dios que nos acompaña y que nos dirige, precisamente, a través de la oración.

Orar es levantar el corazón a Dios, entregárselo plenamente convencido, y vivir a sus impulsos. Sólo en esta actitud podemos caminar por el camino señalado y bienaventurado que Jesús nos propone. Y en el cual seremos dichosos y alegres. No solamente ahora, sino eternamente.

Por eso, Padre del Cielo, te pedimos todos juntos desde este rincón de oración, la luz y la sabiduría necesaria para no desfallecer y, poniendo toda nuestra voluntad, empeñarnos en vivir el espíritu de las bienaventuranzas, y con nuestro esfuerzo y transparencia, dejar pasar esa luz que caracteriza a todos los que te siguen, y que contagia a todos los hombres de buena voluntad.

Y que, confiando en nuestro Padre Dios, y en ti, Señor Jesús, seamos capaces de esperar tu llegada. Que será cuando nos hayas preparado esa hermosa estancias en la Casa de tu Padre, a donde has ido a preparárnosla. 

Padre, que no perdamos esa oportunidad de estar esperando esa maravilla gozosa que no podemos imaginar, y que nos llena de esperanza y de felicidad. Y sabemos que la manera de esperarla es viviendo nuestra vida en el espíritu de las bienaventuranzas. Amén.

domingo, 1 de noviembre de 2015

NUESTRA VITAMINA PARA EL CAMINO: LA ORACIÓN



Un buen vaso de oración al levantarnos; otro a media mañana como buen aperitivo, para soportar el ajetreo de la jornada matutina. Luego, el reconfortante almuerzo, y el respetuoso agradecimiento por tener alimentos que comer y compartir en familia. Sin olvidar lo que podamos hacer con los demás.

Más tarde, la merienda que nos aviva y despierta en la soñolienta tarde, para terminar con la agradecida oración de despedida por todo lo ocurrido durante el día. La oración es la vitamina que siempre debemos llevar en el bolsillo del corazón, pero no para tenerla guardada para los momentos de peligro o emergencia, sino para que cada instante de nuestra vida se vea reforzada con la presencia gozosa del Espíritu de Dio y su fuerza iluminadora para cada paso que damos.

Te damos gracias, Padre, por ese rosario de bienaventuranzas que nos señalas y que nos animas a vivir. Te damos gracias, Padre Bueno, por todas esas orientaciones que nos marcas como renuncias y luchas para liberarnos de nuestras esclavitudes. Te damos gracias. Padre, por tu eterna presencia en el camino, porque sin Ti no podríamos, ni pensar, ni intentar y menos cumplir ese camino de desapegos, de servicios, de renuncias y amor que Tú nos propones.

Te damos gracias, Señor, porque detrás de ese papel que envuelve todos esos esfuerzos y renuncias, no hay olor a muerte, sino se desprende un olor amoroso, tierno, gozoso, de alegría, de vida eterna y dicha de la que Tú hoy nos habla. 

Y con las gracias, Señor, quiero pedirte que me llenes de tu Espíritu, de tu sabiduría y fortaleza, para que, escondido en tu Humildad y Misericordia, pueda ir dándome y encontrando el único y verdadero camino que lleva a Ti. Amén.

sábado, 31 de octubre de 2015

EL SERVICIO VIENE DESDE ABAJO




Sería difícil servir desde arriba. Y entendemos desde arriba la actitud de considerarnos mejores, suficientes y jefes. Es difícil ser pastor, misión de proteger y cuidar las ovejas, y fácil convertirnos en capataces, jefes y directores a los que otros sirven.

Ocurre eso muchas veces que, en lugar de pastores somos capataces. Me gustó oír esa comparación del propio Papa Francisco.. Y es verdad, por muy poco dejamos el último puesto de pastor del rebaño, que vigila, cuida y alimenta espiritualmente a sus ovejas una a una, poniéndonos, cada cual en su misión o lugar, al servicio de ellas, a pasar a ser el capataz, que manda, dirige y organiza, siendo servido por las ovejas de su rebaño. 

Quizás, sin darnos cuenta, nos puede estar pasando eso. Por eso, postrados en su presencia, pidamos al Señor esa humildad que necesitamos; esa fortaleza necesaria; la sabiduría de discernir y situarnos en lo que necesariamente debemos hacer, la luz para encontrar el camino y la caridad para poder vivirlo con el verdadero amor y entender que, sólo dándonos, y para ello situarnos en el último lugar, podemos alcanzar los primeros puestos.

Primeros puestos que consisten en gozar eternamente en la presencia del Dios Padre, que nos abre la puerta de su Corazón para que vivamos en Él la dicha eterna de su Gloria. Amén.

viernes, 30 de octubre de 2015

LIMPIA MI HIPOCRESÍA

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA UNIDA Y DEFENSA DE LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS




Creo que muchas veces soy hipócrita, o, al menos, he tenido que luchar contra ella. Por la Gracia de Dios, creo, que no ha sido muchas veces, y que trato de no engañarme, pero, igual que las tentaciones de pensamientos no puedes evitarlas, aunque sí luchar, las hipocresías te asaltan ante la oportunidad de lucirte o de aparentar lo que no eres. Y creo que eso está a la orden del día en muchas personas.

Somos hipócritas cuando aparentamos ser mejor que lo que realmente somos. Y eso le ha pasado a todo el mundo, y a mí también. Somos hipócritas cuando no nos transparentamos como lo que somos, y tratamos de escondernos en nuestras apariencias y disimulos. Realmente no nos damos cuenta, o pensamos que no ha sido intencionado y que tratamos de rechazarlo, pero muchos momentos se nos pueden escapar.

Por eso, Señor, consciente de mis debilidades y mis fallos, te pido que me limpies de mis falsas apariencias, y de presentarme como lo que no soy. Incluso a través de mis reflexiones y escritos, porque otros pueden imaginarse a una persona modélica o ejemplar, y nada de eso. Soy, sinceramente, un pobre hombre que trata de ser mejor, y lo que escribe es lo que quiere ser, y por lo que lucha cada día.

No quiero transparentar nada de lo que no me esfuerce en ser, y cuando digo, esfuerce, quiero significar que trato de acercarme y de esforzarme a eso que brota de lo más profundo de mi corazón. Pero no vean sino lo que realmente hay y se es: "Una persona como ustedes, todos vamos en el mismo carro, que trata de vivir cada día, con más fracasos que éxitos, la Palabra de Dios".

Esa Gracia es la que pido, Señor, me sea concedida, para que mi corazón sea transformado y convertido a vivir, no sólo en la apariencia, sino en la verdadera realidad, la Vida de la Gracia que tanto anhelo y proclamo. Amén.

jueves, 29 de octubre de 2015

MOMENTOS DE PELIGRO Y DE TENSIÓN



La Iglesia, instituida por Jesucristo para continuar su misión apostólica, no camina por caminos diferentes a su Fundador. Sufres los mismos desplantes y amenazas; sufre los mismos insultos y blasfemias; es víctima del mismo ridículo, de la misma indiferencia y padece persecuciones y muertes.

Ayer, hoy y, posiblemente mañana, seguirá ocurriendo lo mismo. La Iglesia, y con ella todos los cristianos y discípulos del Señor, padecerán su misma pasión de sufrimientos y muertes a consecuencia de ser fieles a la fe en nuestro Señor Jesús.

Porque la Verdad molesta y denuncia a todos aquellos que quieren falsearla y adecuarla a sus intereses para su propio beneficio. Porque la Verdad descubre todos los abusos de los que quieren explotar, someter, esclavizar y utilizar a los demás para su propio enriquecimiento. Porque la Verdad defiende la igualdad de todos los hombres y una convivencia justa en derechos y libertades con armonía y en paz.

Por todo eso y mucho más, los opresores, los mentirosos, los egoístas y comodones quieren excluirlas para satisfacerse a sus anchas y convenir en hacer lo que les venga en gana en consonancia con sus egoísmos y apetitos. Por todo eso quieren quitarla del medio, y, para ello, utilizan toda la astucia de que son capaces tratando de enfrentar a la misma Iglesia desde dentro y fuera.

Hoy, Padre Bueno del Cielo, te pedimos que nos liberes de todo ese peligro que nos amenaza, y si ese cáliz hemos de beber, danos la fuerza suficiente para, por la Gracia de tu Hijo Predilecto, Jesús, podamos aceptar con valentía, paciencia, firmeza y valor todos los sufrimientos y padecimientos que la vida de este mundo nos depara hasta llegar a Ti.

Confiados en tu Gracia, y consciente de tu presencia entre nosotros en tu Santo Espíritu, caminamos en la esperanza de vernos asistidos y confortados para salvar todos los obstáculos que nos impiden llegar limpios hasta Ti. Amén.

miércoles, 28 de octubre de 2015

APROVECHA EL TIEMPO




No es cuestión de perder la oportunidad de la cual te vas a arrepentir, no ahora, sino toda la eternidad. El tiempo hay que aprovecharlo, porque sólo tenemos esta vida para hacerlo. Y la vida se va enseguida, casi sin darnos cuenta.

Seguir a Jesús exige oración. Sin oración se nos haría imposible descubrirle y seguirle. La oración es el vehículo que Él nos ha dejado para estar constantemente en contacto. Sin la oración nada bueno se haría, porque todo lo bueno procede y viene de Dios.

Oramos para discernir y reflexionar sobre nuestras acciones. Elegir el camino y caminar por él se nos hace difícil y oscuro. Sin la Luz del Espíritu nos sería imposible avanzar con rectitud. Necesitamos pedirle que nos acompañe, para, guiados por su Mano, evitar errores o soportarlos pacientemente, sacando provecho de su experiencia.

Te pedimos, Señor, sabiduría para tomar las oportunas decisiones con buenas intenciones y mirando el bien de todos. Te pedimos, Señor, que nuestro diario actuar sea un esfuerzo de amor en procurar siempre que el prójimo sea bien tratado como me gustaría que me trataran a mí. Porque ese es el sentido de la misión que Tú nos has mandado:  "Amar como Tú nos amas".

Danos paciencia, fortaleza y capacidad de discernimiento para soportar todo aquello que no sea capaz de entender, y de aguardar, confiado en la Sabiduría de tu Espíritu, que me sea revelado según su Voluntad y si es para mi bien. Porque sólo Tú sabes que es bueno y que nos conviene. Y protégenos, Señor, de todos los males que nos acechan y buscan nuestra perdición. Amén.

martes, 27 de octubre de 2015

DAME, SEÑOR, LA GRACIA DE SER LEVADURA PARA FERMENTAR EN LA MASA



Has escogido, Señor, la semilla más pequeña para demostrar tu poder. Lo pequeño lo haces grande, y así comparas tu Reino con la semilla de mostaza, la más pequeña y la que se hace más grande. 

También has escogido a los más pequeños, los pobres y excluidos , y a los que nos sentimos incapaces de hacer cosas grandes, salvo cuando estamos injertados en Ti, Señor. Porque Tú eres el Señor de todo lo Creado, y así te ha parecido bien hacer las cosas.

Te pedimos, Señor, la sabiduría y la fortaleza de proclamar tu Verdad con paciencia y perseverancia, sabiendo que, poco a poco, crecerá y llegará a todos los rincones del mundo. Porque la Verdad ha sido proclamada para extenderse por todos los lugares y para llegar a todos los hombres. Y llegará, a pesar de tantas dificultades y obstáculos que, los que quieren impedirlo, pongan en el camino.

Eso sí, Señor, que no abandonemos el cultivo de esa pequeña semillita, aunque no veamos resultados, y que sostengamos la confianza de que echará raíces y frutos que llegarán a todas partes del mundo. 

Tú, Señor, tienes Palabra de Vida Eterna, y si comparas tu Reino con la lavadura que fermenta la masa y se hace grande hasta compartirse con y para muchos. Yo quiero pedirte, Señor, que transformes mi corazón en esa levadura que, introducida en la masa, la fermente y la llene de tu Gracia y tu Palabra.

Dame, Señor, esa capacidad para poder ser semilla y levadura, y donde quiera que vaya mi vida, sea una oportunidad de sembrar y fermentar tu Palabra de salvación. Amén.