Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

domingo, 23 de abril de 2017

EL SEÑOR NO ESCATIMA PRUEBAS

Jesús, no sólo da la Vida por cada uno de nosotros, sino que trata de convencernos presentándose, en sus discípulos, a cada uno de nosotros. Se reune con ellos y les presenta signos y huellas que dan testimonio de su Persona. La Resurrección es un hecho real y quiere que ellos lo vean con sus propios ojos y con sus propias manos.

Tomás, que no estaba en ese momento, se resiste. También te pasa a ti y a mí. Hay muchos momentos que nos resistimos, que vacilamos y nos dejamos embaucar por las dudas. Nos defendemos con nuestra razón y exigimos pruebas, milagros y hechos extraordinarios. Queremos que el Señor, como en un circo, nos deslumbre con su poder. Realmente somos indignos de merecer nada.

El Señor pasa por alto todo eso. Su Misericordia es Infinita y así lo propone al Padre. Su amor y su méritos satisfacen al Padre que nos perdona misericordiosamente. Sabe de nuestras debilidades y tentaciones y da poder a sus apóstoles, en el Espíritu Santo, para que nos perdonen nuestros pecados.

Te damos gracias, Señor, por esas pruebas de amor, y por tu Infinita Misericordia, que no merecemos. Nos postramos ante Ti y te pedimos que nos des la fe para ver, sólo apoyados en tu Palabra transmitida por tu Iglesia desde ese día de Pentecostés hasta hoy. Danos esa Gracia de perseverar si vacilar y de ser fuertes ante las tentaciones de este mundo que trata de apartarnos de Ti.

Y, de nuevo, Señor, aumenta nuestra fe sin la necesidad de estar buscando testimonios y pruebas que nos hablen de Ti. Creemos en tu Palabra y ella sola nos basta. Amén.

1 comentario:

camino dijo...

Te damos gracias, Señor, por esas pruebas de amor, y por tu Infinita Misericordia, Gracias.