Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

sábado, 27 de junio de 2020

ES LA FE LA QUE TE MANTIENE VIVO

Pin en Nuevo Testamento
Sin fe no se puede caminar porque, la fe es la que te mantiene vivo y la que te da la fuerza para sostener tu corazón ardiente y con fuerza. Y esa fe no se obtiene con voluntad, con estudios, con dinero ni con nada. Sólo con oración, una oración de petición a nuestro Padre Dios para que nos la dé,gratuitamente, claro, porque no tendríamos dinero, ni méritos para poder pagarla. Una fe como regalo de ese Infinito Amor Misericordioso de nuestro Padre Dios.

Danos, Señor, esa fe que necesitamos para, como hizo aquel centurión, ir hacia Ti para pedirte que nos salve y nos sane de todos nuestros pecados que nos amenazan con separarnos y alejarnos de Ti. Una fe que nos comprometa a seguirte, no sólo en el cumplimiento de la liturgia y oraciones, sino en la vivencia de esa tu Palabra llevándola y viviéndola en nuestra vida. Igual que Tú, Señor, con hechos y obras.

Me pongo en tus Manos, Señor, y como ayer aquel leproso quería y se acercó a Ti, yo, también hoy quiero acercarme a Ti y pedirte con todo el efuerzo del que soy capaz que quiero abrir mi corazón y llenarlo de tu fe. Yo quiero y te pido, esperanzado que Tú, si quieres, sé que puedes hacerlo. Y en esa esperanza sigo adelante y confío en Ti. Aceptaré, Señor, lo que Tú quieras darme. Amén.

No hay comentarios: