Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.
Mostrando entradas con la etiqueta ciegos. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta ciegos. Mostrar todas las entradas

domingo, 10 de octubre de 2021

PADRE BUENO, GRACIAS POR TU INFINITA MISERICORDIA

 

Verdaderamente estamos ciegos. Ciegos por este mundo confuso, espeso de nubes que nos impiden ver y que, esclavizados por nuestra naturaleza humana enjaulada en el pecado, nos experimentamos impotentes para poder libéranos y buscar ese deseo inevitable de ser felices eternamente. Igual que ese joven del Evangelio, Maestro bueno, recurrimos a Ti para pedirte la fortaleza necesaria para poder despojarnos de todo aquello que nos impide ver tu Misericordia Infinita por y con la que nos rescata y perdona nuestros pecados.

Gracias, Señor, por tanto amor. Queremos sostener nuestra mirada para acoger la Tuya y dejarla entrar plenamente en nuestro corazón. Queremos, y eso te suplicamos, que podamos experimentar ese Amor intenso y profundo con el que Tú nos mira y, sobre todo, acogerlo para experimentar el Amor Infinito con el que nos miras y deseas darnos esa plena felicidad y gozo que buscamos.

Señor, danos la sabiduría de entender que sólo en Ti podemos encontrar esa felicidad eterna que, como ese joven del Evangelio, nosotros también buscamos. Y que tengamos la fortaleza necesaria para no fruncir el ceño, sino todo lo contrario, abrirnos con entusiasmo y gozo a esa su Mirada que Jesús nos regala y nos ofrece para llenarnos de pleno gozo y felicidad. Porque, en Él está lo que buscamos. Amén.

viernes, 7 de diciembre de 2018

BÚSQUEDA Y FE

Resultado de imagen de Mt 9, 27-31
HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS. 

Todos sabemos que la fe es lo principal. Cuando alguien no cree expresa que no tiene fe y lo confesamos abiertamente. No creo, no tengo fe. Y sin fe no se puede seguir a nadie. Seguir a Jesús exige fiarse de sus Palabras y creer en lo que dice y promete. Muchas obras y hechos hizo Jesús para que creyésemos. El Evangelio de hoy nos presenta a dos ciegos a los que el Señor, después de preguntarles si creían que podía curarles, y escuchar sus respuestas, les  da la vista.

Una vista física que no tenían, pero una vista con ojos de fe que ya poseían y que, por eso, le buscaban y se acercaron a Él. También nosotros necesitamos esa fe. Esa fe que, primero, debemos buscar con nuestros movimientos que la descubren y la hacen visible. Una fe que, agradecemos al Señor y que ese mismo agradecimiento nos fortalece y nos regala la fe. Porque, sólo la podemos recibir de Él, pero tenemos también, para eso nos ha regalado la libertad, que pedírsela y buscarla...

Y eso ya son síntomas de que empezamos a creer. El correr, el buscarle, el caminar, el preocuparnos por saber dónde está y ponernos en su presencia nos descubre nuestra fe. Sí, los que le pedimos, le suplicamos, oramos y tratamos de hablar con Él, tenemos fe. Quizás no sea la suficiente para mover al Señor; quizás no sepamos pedirla ni buscarla; quizás nuestras intenciones van por otro camino, pero, Señor, queremos buscarte y encontrarte de verdad. Porque, Tú eres el Camino, la Verdad y la Vida, y sin Ti no iremos a ninguna parte. Aumenta, Señor, nuestra fe y haz que veamos con los ojos del corazón donde, quizás, está dormida nuestra fe. Amén.

lunes, 27 de marzo de 2017

YO SÉ DÓNDE ESTÁS, SEÑOR


No tengo excusas ni justificación. Aquel ciego sí las tenías, pues él no sabía quien eras, Señor. Después de darle la vista creyó que era un profeta, pero nada más. Sin embargo, fue dichoso, pues Jesús mismo se le presentó y le dijo: «¿Tú crees en el Hijo del hombre?». El respondió: «¿Y quién es, Señor, para que crea en él?». Jesús le dijo: «Le has visto; el que está hablando contigo, ése es». Él entonces dijo: «Creo, Señor». Y se postró ante Él.

Quizás nos ocurre como aquellos otros, que creemos que vemos y estamos ciegos. Y nuestra ceguera permanece. Y perdemos tu rastro Señor y tomamos otros caminos. Ábrenos los ojos, Señor, para oler tu perfume de amor y encontrar tu camino. Tu Palabra nos lo revela y nos dice que nos esperas en el Sagrario. Nuestra santa Madre Iglesia, continuadora de tu Misión, nos señala tu Camino y nos descubre tu Amor y tu sacrificio generoso para el rescate por nuestros pecados. Y nos indica dónde te encuentras, transformado, bajo las especies de pan y vino, para ser nuestro alimento espiritual con el que podamos vencer al mundo y sus tentaciones.

Quiero acudir a ti como ese funcionario real, con la esperanza de que cures mis enfermedades. Enfermedades del alma, de la duda, de la ceguera, del olvido, del pecado y de la muerte. Quiero creer en Ti, Señor, porque sólo Tú eres mi esperanza y mi salvación. Por eso, unidos todos, queremos pedirte que enciendas en nosotros la llama de tu Amor, y nos prendas de fe. Esa fe en Ti que sólo Tú nos puedes dar.

Porque nosotros, Señor, estamos muertos por el pecado y heridos por nuestras limitaciones humanas, que levantan una muralla delante de nuestros ojos, no sólo físicos, sino también del corazón, que nos impide verte. Derrumba, Señor, esos obstáculos y danos tu salvación como al hijo de aquel funcionario real. No sólo temporal, sino esa salvación que Tú realmente quiere para cada uno de nosotros: "La Vida Eterna". Amén.

miércoles, 21 de diciembre de 2016

DORMIDOS A LA VERDADERA VIDA



Posiblemente muchos de nosotros tengamos los ojos bien cerrados. Y quizás nos sentimos a gusto y bien instalados, y, por consiguiente, permanecemos ciegos. Peor aún, con los ojos cerrados e ignorando la pura realidad que se manifiesta delante de nosotros. Pasan los acontecimientos delante de nuestros ojos y no reaccionamos, ni vemos, ni oímos ni despertamos.

El Mesías nace, está entre nosotros, pero no le vemos ni, lo que es peor, queremos verle. Pidamos desde este humilde rincón, simbolizado en el pesebre, que despertemos a la fe. Y que, como Bartimeo, Mc 10, 51-52, veamos la Gloria del Señor y demos saltos de gozo y de alegría porque el Mesías, el enviado, está entre nosotros.

Pero, también, preparémonos para esta venida del Señor. No podemos permanecer con los brazos cruzados ni pasivos, sino vigilantes y disponibles. Como María abierta a la acción del Espíritu Santo a acoger la Gracia del Señor que nace en nuestro corazón. Y se hace presente en nuestro servicio, en nuestra entrega, en nuestro esfuerzo por estar disponible y en la generosidad de nuestro amor.

Porque el Señor nace cada instante que tú y yo amamos como él nos ama. Pues no esperemos que nazca de nuevo, pues ya ha nacido. Una sola vez, pero, ahora, se hace presente siempre que tú y yo proclamemos el amor que Él nos enseñó con su vida y obras y lo hagamos presente, vivo y real entre los hombres. Entonces, en cualquier parte del mundo nace el Señor.

Y nacerá de nuevo cuando venga en su segunda venida prometida. El Señor cumplirá su Palabra, porque siempre la ha cumplido, la cumple en cada instante, y la cumplirá al final de los tiempos. Amén.

viernes, 2 de diciembre de 2016

ESPERANZADOS EN LA LUZ



HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA DEFENSA Y UNIDAD DE LA VIDA Y LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS

Hay días que nos quedamos extasiados cuando contemplamos la luz del sol y el contraste a lo lejo, en el horizonte, coincidiendo con la puesta de sol y su combinación y reflejos con las nubes. Todos hemos visto esas estampas preciosas, bien directamente o en postales, películas y pintura. Y experimentamos una sensación hermosa y placentera.

¡¡Cómo será la Luz de la Verdad!! Supongo que inigualable y algo muy diferente a la que conocemos. Tanto es así que no podemos ni siquiera imaginárnosla. Una Luz que no sólo ilumina nuestra vida, sino que nos hace eternamente felices y plenos de gozo. No nos cabe en la cabeza ni tampoco en el corazón. Sólo el desearla nos llena de alegría, de esperanza y de gozo.

Te pedimos, Señor, que como esos dos ciegos del Evangelio de hoy, nos des la fe para seguir tus pasos y suplicarte constantemente sin desmayo que nos abras los ojos de nuestro corazón para ver esa Luz Infinita que nos alumbra, no una sola parte de nuestra vida, sino toda nuestra vida. Es decir, para toda la Eternidad.

Ahora es tiempo de esperarte y buscarte, Señor. Sé y sabemos que siempre es tiempo de búsqueda, de oración, de limosna y de actitud de conversión. Pero, hoy, Señor, queremos adaptarnos a este tiempo litúrgico que vivimos y prepararnos para recibirte y descubrirte como Niño en el pesebre. Es tiempo de oración, de espera y de alegría porque llega el Mesías, el Salvador que nos abre los ojos para ver la Luz, la verdadera Luz que nos alumbra el camino de salvación.

Danos, Señor, esa fe que necesitamos para mantener despiertos nuestro ojos interiores y espabilada nuestra mente en actitud de espera y vigilancia y descubrir tu venida, tu nacimiento y encarnación desde el vientre de María y por obra del Espíritu Santo. Amén.

viernes, 4 de diciembre de 2015

VER PARA CREER

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR,08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA UNIDA Y DEFENSA DE LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS




Muchos suelen decir que necesita ver para creer. Incluso manifiestan que no ha venido nadie para contarlo ni para demostrarlo. Y es que cuando queremos permanecer con los ojos cerrados nos basta con negarlo todo. De esa forma, podemos decir que hay muchos que ven, pero permanecen ciegos, porque no ven lo que verdaderamente importa ver.

Es lo que sucedió con aquellos dos ciegos. Sus ojos mundanos estaban cerrados a la luz del mundo, pero abiertos a la luz de la Gracia. Vieron la Divinidad del Hijo de Dios, y creyeron en Él. Así sus ojos, no sólo se abrieron a la luz del mundo, sino que también vieron la verdadera Luz de salvación.

La fe supone fiarse y confiar. Necesitar ver para creer es lo mismo que decir que no tienes fe, porque lo que se ve no necesita fe. Ya lo estás viendo. La fe en ese momento no tiene ningún sentido. Sobra. Tener fe es dar un margen de confianza y creer ciegamente en una determinada persona. En este caso hablamos de la fe en Jesús, el Hijo de Dios hecho Hombre.

Aquellos ciegos creyeron en Jesús, y esa fe les movió a buscarlo y a pedirle que les devolviera la vista. Y así sucedió. ¿Tú y yo creemos también que Jesús nos puede devolver la vista? La vista que nos haga ver la única y verdadera Luz que nos salva?

Es eso lo que queremos pedirle hoy. Danos, Señor Jesús, la luz que nos permita verte y confiar en Ti. Aumenta nuestra fe y mueve nuestro corazón para que no cese de buscarte en todos los momentos de nuestra vida. Danos, Señor, un corazón sencillo y humilde que, como la cierva que busca agua fresca, no cese de buscarte hasta saciarse en tu Amor. Amén.

viernes, 11 de septiembre de 2015

SÓLO LA LUZ PUEDE SER TU GUÍA

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA UNIDA Y DEFENSA DE LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS 

Clicar en imagen para ver mejor


Sólo puedes ver cuando el Sol alumbra o te provees de una luz artiricial. ¿Sabes?, lo artificial se gasta, es caduco y muere. Y la luz del sol puede servirte, pero si son los soles de este mundo no sirven, porque todo lo de este mundo es caduco y muere.

SOLO LA LUZ DEL SOL VERDADERO QUE VIENE DEL CIELO 
PUEDE SERVIRTE DE CAMINO, VERDAD Y VIDA. 
Y ESE ES EL SEÑOR. 
BÚSCALO Y DEJATE GUIAR POR ÉL

viernes, 5 de diciembre de 2014

¿PODRÁS CALLAR LAS MARAVILLAS DEL SEÑOR?

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA UNIDA Y DEFENSA DE LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DONDE PUEDAS




 Dice el Evangelio: Pero ellos, en cuanto salieron, divulgaron su fama por toda aquella comarca. Supongo que difícilmente podrían callarse. De ser ciego a ver la luz del sol y los colores de las cosas que pueblan la tierra a la oscuridad opaca de las tinieblas va un abismo. ¿Cómo poder callarse ante este torrente de luz que invade nuestros ojos y aprecian la luz y los colores del día?

Posiblemente si nosotros permanecemos callados será porque nuestros ojos no ven la luz interior que alumbra el verdadero camino de nuestras vidas. Aquellos ciegos ya veían. Veían que Jesús podía curarles y veían, a pesar de ser ciegos, que Jesús era la verdadera Luz de salvación. Por eso acuden a Él convencidos que les va, no sólo a curar, sino a darles la verdadera luz de salvación.

No nos quedemos, es nuestro deseo de hoy, en las luces de una Navidad adulterada por el consumo, por los premios de loterías, por las copiosas comidas, los turrones, las fiestas y la algarabía y diversiones. No nos dejemos encandilar por esa vista caduca , vacía y sin sentido. Busquemos, junto a esos ciegos, no sólo la vista corporal sino la luz que alumbra las tinieblas y nos libera del pecado.

¡Oh, Señor, enciende nuestras pupilas opacas y alúmbralas con la llama de tu Amor para que nuestros ojos no sólo nos permitan ver la luz del sol, sino la luz interior donde habita la verdadera paz, la verdadera verdad y la verdadera justicia.

viernes, 12 de septiembre de 2014

POR MUCHO QUE ABRA LOS OJOS, SEÑOR, CAMINO EN PENUMBRA

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA UNIDA Y DEFENSA DE LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DONDE PUEDAS





A pesar de mis esfuerzos por mantener los ojos muy bien abiertos, no veo nada, Señor. No veo nada porque la oscuridad de este mundo me ciega y me envuelve en su oscuridad. Sus luces son luces opacas que no alumbran el camino sino lo oscurecen y, aunque en apariencias parece que brilla, en la realidad pervierte y nos lleva al abismo y la muerte.

Por eso, Señor, quiero recorrer el camino de mi vida en este mundo contigo. Porque contigo, Señor, los peligros, aunque no desaparecen, son más llevaderos, suaves y, si no fáciles, si factibles de superarlos y aceptarlos con alegría y esperanza. 

Contigo, Señor, podré mantener, no sólo los ojos abiertos, sino que podré ver los obstáculos y los peligros que me acechan y amenazan en el camino con la esperanza de vencerlos y superarlos. Danos la sabiduría de no apartarnos de tu camino y de vivirlo en la esperanza de saber que, a pesar de las dificultades, Tú estás con nosotros, nos protege e iluminas.

Enséñanos a vernos primero nosotros y a limpiar nuestras vigas que obstaculizan nuestra vista, antes que ver las motas de los otros que sólo empañan sus miradas pero que no les impide caminar. Líbranos Señor, no sólo de la ceguera de nuestros ojos, sino también de la oscuridad de nuestras lenguas y criticas con las que oscurecemos la vida de los demás en lugar de iluminarlos.

Llénanos Señor de tu sabiduría para que sepamos abrir nuestros ojos y, no sólo ver nuestras vigas, sino también quitarlas para limpios poder ayudar a quitar la mota de otro.

viernes, 6 de diciembre de 2013

NO TE QUEDES ALEJADO, NI PARES DE GRITAR



Fue lo que hicieron aquellos dos ciegos. Habían oído las maravillas que hacía Jesús, y en cuanto tuvieron su oportunidad, 1zaaasssss!, la aprovecharon. Saltaron al camino, se le acercaron y le gritaron sin ningún respeto humano que les permitieran ver. No cabe duda que eso supone primero creer que Jesús lo puede hacer, si no es hacer el ridículo y perder el tiempo.

Supongo que Jesús les hace confesar el móvil por el que se le acerca y le piden sanación para descubrirles su fe. ¿Realmente, están convencidos que les puedo devolver la vista? Y ellos, sin ningún respeto humano respondiéron acto seguido, "sí".

¡Claro!, para buscarle y acercarsele, primero hay que tener fe, esa fe que empuja y te pone en camino. Mudar tu corazón no significa pensar de otra forma, significa arrancartelo y ponerte otro según Jesús. Te cambia todo; empiezas a ver de otra forma; encuentras en los hombres, no enemigos, sino personas a las que tienes que acercarte y perdonar.

Descubres entonces que no es fácil, pero experimentas y comprendes que sin Jesús no puedes caminar firme y sobre roca. Necesitas que Él construya tu casa.