Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

jueves, 2 de octubre de 2014

ALGUIEN VUELA SOBRE MI CABEZA



He oído alguna historia de personas convencidas que alguien enviado, un ángel, por ejemplo, le ha salvado de algún apuro o la misma vida. Otras las he oído por televisión o radio, y otras las he leído. Lo cierto es que los ángeles existen y están ahí, envidados por Dios, para protegernos y cuidarnos.

Uno de mis recuerdos imborrables es el cuadro, en la cabecera de mi cama, que representaba a dos hermanos, niño y niña, atravesando un puente en una noche de tormenta y de rayos cuidados por el Ángel de la Guarda. Siempre, en momentos especiales, como puede ser este, vienen a mi memoria y me llenan de nostalgia, de esperanza y de paz.

Sí, sin lugar a dudas, todos tenemos un ángel que nos cuida y nos protege. Recordamos innumerables vivencias de cuando jóvenes y de cómo hemos salido de situaciones comprometidas y difíciles sin saber cómo. Pasan los años y experimentamos que nuestro Ángel de la Guarda nos ha acompañado en todo momento con su presencia, compañía y mirada.

Posiblemente tendremos que abajarnos y hacernos un poco niño, como aquel joven que ensimismado y con la mirada perdida en aquel cuadro de la cabecera de su cama, presentía que él también tenía un ángel como el del cuadro, que lo cuidaba y protegía, sobre todo en esos días de enfermedad que solía pasar mirándolo y recreándose en él.

Dame Señor la Gracia y el don de escuchar los pasos del Ángel de mi Guarda, que Tú has enviado a recorrer mi vida y a acompañarme hasta dejarme junto a la puerta de tu Casa. Amén.

miércoles, 1 de octubre de 2014

VACIARNOS DE NOSOTROS MISMOS



Nos cuesta mucho, pero mucho desintoxicarnos de nuestra cultura, de nuestra mentalidad, de nuestras primeras actitudes mamadas en la familia que nos ha tocado vivir. De las primeras vivencias que originan actitudes y criterios en nuestra primera calle, en el barrio...etc. Nos cuesta mucho dejar de ser yo mismo para transformarme en Jesús. Diría que esa es la única y verdadera conversión.

Seguir a Jesús supone dejarlo todo, y dejarlo todo, más que bienes, dejarme yo para vivir en Él o dejarle que Él entre en mí. Eso significa estar dispuesto a no tener donde reclinar la cabeza, dejar padre y familia en un segundo lugar y priorizar a Jesús como lo primero y fundamental de mi vida. Mientras eso no suceda, seguiré nadando entre dos aguas que me confunden, que me condicionan y que me esclavizan.

Necesitamos, primero para cambiar mis actitudes, creer profundamente en Jesús. Una fe que me mueva a seguirlo tal y como Él exige. Y eso, lo sabemos, nos cuesta mucho porque el pecado nos esclaviza y nos sujeta hasta el punto de optar por nuestra manera de pensar antes que dejarme llevar por las de Jesús. Así me costará mucho ver la vida desde la Mirada y los criterios de Jesús. Priorizo primero mis ideologías y. por lo tanto, rechazo las suyas.

Danos Señor la Gracia de ver claro y de darnos cuenta de la necesidad de vaciarnos de nosotros mismos, de nuestras apetencias ,apegos e ideologías que nos impiden entender lo que Tú nos mandas, nos regala y nos señala para el camino de nuestra salvación. Amén.

martes, 30 de septiembre de 2014

CAMINOS DE ENFRENTAMIENTOS



Nunca la subida a Jerusalén puede significar enfrentamiento. Si es así no estamos subiendo, como Jesús, a Jerusalén. Subir a Jerusalén significa renuncia, libertad, entrega, desapego, generosidad y, sobre todo, amor. Todo menos enfrentamientos, luchas, envidias, diferencias, divisiones y desunión. Porque para eso no hace falta subir, podría también conseguirse quedándose abajo.

Subir a Jerusalén exige capacidad de sufrimiento, de soportar bofetadas, insultos, molestias y todo tipo de rechazos que nos duelen y hasta nos puede costar la vida. Jesús, empeñado en subir, hizo saber a sus apóstoles y discípulos que era necesario. Y que lo había que hacer despojado de todo poder y de toda actitud que provocará violencia y enemistad. Porque la escalera para subir es el Amor.

¿Y yo Señor? ¿Entiendo que hay que subir y cómo hay que hacerlo? ¿Soy capaz de atreverme a seguirte despojado de toda actitud violenta y dispuesto a soportar por amor? Claro que no lo soy, pero contando contigo, que me lo has prometido, si que podré hacerlo.

Dame Señor la Gracia de saber administrar, por amor, tus regalos y tu misericordia, para que siguiendo los dictados de tu Espíritu sepa darme, entregarme y servirte en los hombres que me rodean. Amén.

lunes, 29 de septiembre de 2014

IMPOSIBLE ESCONDERSE A LA MIRADA DE DIOS



Sin lugar a duda que no somos consciente de los actos de nuestra vida, porque de serlo tomaríamos conciencia que el Señor nos ve en todo momento y sabe de los escondrijos e intenciones más profundas de nuestro corazón. Es posible que muchos se rían de esta verdad, pero tarde o temprano se toparán con ella. 

Le ocurrió a Natanael al presenciar como Jesús sabía quien era y donde había estado tumbado. Fue tanta su impresión que brotó de sus labios una hermosa confesión: «Rabbí, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel». Igual nos pasará a cada uno de nosotros cuando el Señor nos describa quienes somos y donde estamos. 

Pongamos nuestra confianza en Él y aprovechemos la asistencia de los tres arcángeles, por encargo del Padre, que nos asisten en la defensa del Maligno, caso de Miguel Arcángel, o nos transmiten la sabiduría de la salvación en el Hijo por la encarnación de María, caso de Gabriel, y nos cura y alivia de nuestros peligros y enfermedades en el caso de Rafael.

Gracias Padre por tus cuidados, por tus mimos y caricias, y por ese hermoso regalo, que hoy celebramos, de tus tres arcángeles Miguel, Gabriel y Rafael.

domingo, 28 de septiembre de 2014

PALABRA Y VIDA




Supongo Señor que ambas actitudes pueden estar mal, porque negarte obediencia o mentirte no deben estar bien. Pero, a la hora de la verdad creo que el que se negó a ir y luego arrepentido fue, tuvo la valentía de ser humilde, reconocer su falta y su pecado de obediencia y respeto y, arrepentido, fue.

Miro para atrás y revuelvo en mi memoria las veces que te he prometido cosas, o me he comprometido a responderte en algo y he fallado. Sin ir más lejos, ¡cuántas promesas de no volver a pecar!, y ¡cuántas caídas por pereza, irresponsabilidad, debilidades o incumplimientos! ¡Señor, te piedad de mí, porque soy un pobre pecador y te he mentido infinidad de veces!

Estoy más en la piel del hijo que dice sí y luego falla, que aquel que respondiéndote no, luego, arrepentido, va y cumple con lo que le has mandado. ¡Quiero Señor enmendarme y serte fiel!; ¡quiero Señor ser tu fiel servidor y cumplir con tus mandatos! Dame la Gracia de poder hacerlo porque soy un pobre y mísero pecador que dice y no cumple.

Necesito Señor la fuerza de tu Gracia para, empeñado en serte fiel, alcanzar y fortalecer mi voluntad y, no sólo decirte sí a tu mandato, sino también cumplirlo según te he dado mi palabra. Y eso te suplico en este momento, agarrado y de la Mano de tu Madre María, la fiel cumplidora de palabra y vida, que supo en todo momento serte fiel con la palabra y con la vida. Amén.

sábado, 27 de septiembre de 2014

LA CRUZ MI ÚNICO CAMINO



Me lo ha dicho claro, muy claro. La Cruz es el único camino. Vanos serán mis esfuerzos en querer caminar en otro sentido, porque sólo me salvará el camino de la Cruz. Jesús ha transformado la muerte de Cruz en muerte de liberación. Muerte de Cruz por amor a todos los hombres, a pesar de los rechazos, de las cadenas, de las bofetadas, de los insultos y castigos.

Una muerte de Cruz aceptada libremente por amor según la Voluntad del Padre. Y ese es mi camino. No hay otro. Un camino de difícil recorrido, de renuncias y sacrificios, de oscuridades e incomprensiones, de amarguras y de muerte. Pero un camino bañado de gozo, del gozo del amor entregado en Aquel que ha venido y de la muerte, venciéndola, ha Resucitado para también nosotros resucitar eternamente en gozo y alegría en Él.

Pidamos confiados en la esperanza de ser escuchados y atendidos para, pasada nuestra pasión, injertados en el Señor, resucitemos a la Vida gozosa y feliz eternamente. Amén.

viernes, 26 de septiembre de 2014

EN LA SOLEDAD DE MI ORACIÓN

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA UNIDA Y DEFENSA DE LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DONDE PUEDAS 




Gracias Señor por quedarte para acompañarme. Gracias Señor por darme a cada instante la luz de tu sabiduría para guiarme por tus caminos difíciles y peligrosos por los pecados de este mundo. Gracias Señor por abrir mis labios para sonreír y soportar a los que me rodean y se relacionan conmigo. Gracias Señor por mantener un diálogo cercano, continuado conmigo.

Gracias Señor por no abandonarme en los momentos difíciles, de mayor soledad y de pasos duros y cuesta arriba donde el ritmo se hace insoportable y pesado de mantener. Gracias Señor por darme la Gracia de tu Presencia y moverme a adorarte y glorificarte.

 Gracias Señor, muchas gracias por ser mi amigo y llenar mi vida de esperanza, de sentido, de luz y amor. Y gracias por saberme atendido y correspondido y mantener la esperanza de recibir la fuerza y la sabiduría para ser capaz de esforzarme en amar como tu me amas. Amén.