Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.

viernes, 14 de marzo de 2014

ESFUÉRZATE EN AMAR Y LLEGARÁ EL PERDÓN

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIOPOR LA UNIDA Y DEFENSA DE LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DONDE PUEDAS





 
No intentes perdonar sin antes vaciarte del rencor, el odio y la sed de venganza que anida dentro de tu corazón. Antes de dar o darte tendrás que llenar o llenarte, porque lo que no se tiene no se puede dar. Es de sentido común disponerte a perdonar llenando tu corazón de buenas intenciones y de amorosas actitudes que te permitan derramar bondad y paz.
Eso significa que para perdonar hay primero que amar, pues para ser perdonado primero tengo yo que perdonar, y ese esfuerzo de perdonar es lo que llamamos amor. El amor predispone al perdón pues el amor no puede existir donde no hay perdón, pues no sabe ni entiende de eso.

Claro está que para amar necesitamos la Gracia de Dios, y eso hay que pedirlo, y para pedir hay que hablar con Dios, y hablar con Dios es lo que conocemos y denominamos "orar". Decimos pues, Señor danos la capacidad y la sabiduría de entender el amor. Porque donde hay amor se excluye el odio, el rencor, los deseos de venganza y la soberbia.

Sabemos que con eso no podemos, pero confiamos y sabemos que contigo Señor podemos. Y eso es lo que te pedimos Padre. Transforma nuestro corazón agrietado y lleno de impurezas y soberbia, en un corazón amoroso lleno de paz y de buenas intenciones.

Un corazón capaz de amar y de, por supuesto, perdonar.

jueves, 13 de marzo de 2014

SI HABLAR CON DIOS ES LO MÁS IMPORTANTE, ¿QUÉ TIEMPO LE DEDICO?



Cuando descubres que algo es de vital importancia para tu vida, ese algo cobra suma importancia en ella. Pero si se trata de que ese algo es la salvación total y eterna de tu vida en plenitud gozosa, ese algo debería ser lo primero y más importante de tu vida.

Hablamos del tiempo que dedicamos a relacionarnos y hablar (oración) con nuestro Padre Dios. Es lo más importante, y si todavía no lo hemos descubierto, pidámosle que nos lo dé, porque hoy nos dice el Señor que quién pide recibe, quién busca encuentra y a quién toca se le abre la puerta.

Si dudamos de ello, es prueba de que nuestra fe todavía es bastante incipiente. Eso se nota en el tiempo que dedicamos al Señor y en la actitud que lo hacemos. Pero no debe de preocuparnos, porque todo nos ha sido dado gratuitamente por nuestro Padre Dios. Por tanto, lo importante es pedírselo y confiar en que Él nos lo dará.

Padre Bueno, danos la sabiduría y la inteligencia de hablar contigo, de hablar para contarte todo lo que nos preocupa y también lo que necesitamos. Sabemos que Tú lo sabes, pero nos gusta decírtelo por nosotros mismos, pues así hablamos contigo. Pero también queremos escucharte, y eso nos cuesta más. 

Te pedimos que nos enseñe a escucharte y a tener paciencia, pero sobre todo, a hacer tu Voluntad en el espacio de nuestra vida que nos ha tocado vivir. Con nuestros vecinos, nuestros amigos, nuestra parroquia, nuestra familia...etc.


)


Dame la Gracia de saber descubrirte en cada acontecimiento de mi vida y a compartirlo contigo, Dios mío.

miércoles, 12 de marzo de 2014

SÓLO TÚ, SEÑOR, TIENES PALABRA DE VIDA ETERNA



Soy un pobre pecador y mis dudas no desaparecen, me persiguen constantemente y a cada instante. Mi fe pasa peligros y tribulaciones y las tentaciones están a la orden del día. Pero, yo Señor, creo en Ti y te sigo aunque mi pobre corazón se sienta tribulado y descreído. Necesito tu Gracia Señor para fortalecer mi fe y fortalecer mis pasos.

Me experimento pecador, débil, frágil y poca cosa, pero esa pequeñez y debilidad me hace fuerte porque sé que Tú Misericordia y tu Amor está por encima de mis fracasos. No sería posible alcanzar tu Misericordia Señor sin tu Amor, porque nuestra capacidad y esfuerzo nunca serían suficientes para merecerla. No cabe en nuestra limitada cabeza ese misterio de tu Amor, pero tu presencia entre nosotros nos mueve a la certeza y esperanza de Tú eres el Señor, el Hijo de Dios Vivo.

Danos la luz y la sabiduría de seguir tus pasos y aunque nuestra inteligencia y sabiduría es pobre y limitada, danos la fe y fortaleza para no desfallecer ni desviarnos de tu camino. Señor, te busco a Ti. 

Aparta de mi corazón aún las pequeñas mezquindades.

martes, 11 de marzo de 2014

PERDONA SEÑOR TANTAS MENTIRAS



Si me preguntan que pienso de mí, la primera intención que se apodera de mi mente es que no soy mala persona aunque soy consciente de mis fallos, errores y pecados. Sería de fanfarrón y engreído no reconocer mis limitaciones y faltas, pero no se trata simplemente de eso. Se trata de las innumerables ocasiones que falto a mi palabra y cometo pecados contra el Señor y mis hermanos los hombres.

Simplemente mirar la oración del Padre nuestro y reflexionarla, me hace tomar conciencia de las veces que caigo y falto a mi promesa. ¡Y cuántas veces rezo el Padre nuestro al día! En mi caso unas diez o más. Le pido al Padre que se haga su Voluntad, pero persigo la mía, por mucha voluntad que ponga en hacer la del Señor. Y, a pesar de pedirle por el pan de cada día y porque aumente más mi amor y mi desprendimiento de las cosas de este mundo, me experimento pegado a él.

Si de perdonar se trata, temo lo mucho que me cuesta, sobre todo cuando se trata de enemigos. Sin embargo, toda esa experiencia me ayuda a descubrirme pobre, pequeño, imperfecto y necesitado. Y recuerdo que el Señor viene a sanar a los enfermos y a salvar a los pecadores, y yo soy uno de esos pobres y pecadores. Por eso salto exultante de gozo y de alegría.

Gracias Señor por venir a salvarme. Te pido que me hagas más desprendido y me des la Gracia de santificar tu Nombre, de buscar tu Reino, de hacer tu Voluntad, de perdonar a los que me ofenden y de pedirte sólo aquello que sirve para seguir tu camino.

lunes, 10 de marzo de 2014

SEGUIRTE ES ALIVIAR LA CARGA DE OTRO



No puedo afirmar que te sigo cuando no estoy disponible a aliviar la carga de otro. Otro que puede estar en mi propia familia, en mis amigos, vecinos o desconocidos. Otros que por las circunstancias de la vida están necesitados y perdidos. El amor contiene el perdón, y el perdón genera la conversión.

Sé, Señor, que esa es la pregunta que me vas a decir cuando esté delante de Ti. Sé que mi amor no te lo demuestro con la oración, con los rosarios o Eucaristías, sino con el servicio que dé a los que necesitan de mí y de mi amor. Es verdad que ese amor es alimentado con las oraciones y rosarios u otras formas de piedad, y sobre todo en las Eucaristías, pero si no se traducen en actos concretos de servicios y ayuda huelen a hipocresía y falsedad.

Dame Señor la sabiduría y la voluntad de vivir lo que recibo de tu alimento diario en mis humildes oraciones y Eucaristía. Fortaléceme y hazme desprendido para darme en generosidad, paciencia y perseverancia en servir y aliviar los sufrimientos de los más pequeño e indefensos.

Y, sobre todo Señor, que estas oraciones no pasen de largo y se diluyan en mi corazón, sino que se impregnen de tu Amor para que pueda repartirlo con mi vida entre los demás.

domingo, 9 de marzo de 2014

NO NOS DEJES CAER EN TENTACIÓN



Es nuestro caballo de batalla de cada día. Somos tentados porque nuestra naturaleza está tocada e inclinada a la tentación. Y no podemos evitarlo ni escapar a su peligro y fuerza. Enfrentarnos con nuestras propias fuerzas será firmar la derrota con antelación, porque estamos sometidos a su poder por el pecado.

 Necesitamos la Gracia del Señor y la asistencia del Espíritu Santo para salir victorioso. No podemos caminar de forma individual sino juntos y agarrados al Señor. La oración será nuestra mejor arma, oración individual pero también comunitaria. Porque en la comunidad podemos poner en práctica también la actitud de la limosna y la caridad, y fortalecer nuestro espíritu en la renuncia y sacrificio por los demás.

Con ellas podemos encontrar el equilibrio y las fuerzas necesarias para mantenernos alejados y fuertes antes sus amenazas. Tentaciones que nos invitan a vivir bien y mejor sin preocuparnos de los que no lo pueden hacer. Tentanciones de pensar sólo en nosotros sin pensar en la necesidades de los demás. Y tentaciones que nos endurecen el corazón y lo hacen más egoístas hasta el punto de someter a otros en beneficio nuestro.

Por eso, Señor, te pedimos que no nos dejes caer en tentación y que nos des la capacidad de tener un corazón desprendido y generoso.

sábado, 8 de marzo de 2014

GRACIAS POR ADOPTARME COMO HIJO SEÑOR



Señor, gracias por tu adopción como hijo tuyo. No merezco tal distinción, y menos ese Amor que Tú me das a cada instante de mi vida. Porque te he dado la espalda, rechazado e indiferente a tu llamada. No soy digno de ser considerado tu hijo, y sin embargo, Tú, Señor, me amas con locura, me abres tus brazos y esperas pacientemente mi regreso.

Quiero hacer lo mismo que hizo aquel hijo menor, el prodigo, que arrepentido y experimentando la aparente felicidad de este mundo falso e hipócrita, entendió que su verdadero lugar estaría en tu Casa, Señor, y levantándose humildemente y arrepentido emprendió el camino de regreso a tu Casa.

Dame, Señor, la Gracia y la sabiduría de descubrir ese hermoso camino de salvación a pesar de que sea duro y presente obstáculos, dificultades y sacrificios que, humillándome, sean luces y señales que me indiquen el camino de regreso.

La mejor opción es descubrir que no estaremos mejor en ningún lugar que en la Casa del Padre.