Blogueros con el Papa

UN ROSARIO CADA VIERNES

Cada viernes, hora peninsular entre las 09, 30 y 10:30, en Canarias entre las 08:30 y 09:30, aproximadamente, y en cualquier otra parte del mundo la que mejor puedan elegir, nos unimos en el rezo del Rosario (VER AQUÍ) por la unidad de todos los creyentes, por la familia natural, hombre - mujer, por la vida y por la libertad de educación de los hijos.

Desde tu casa, online, desde tu trabajo, desde tu hospital y enfermedad, desde myfeeling, desde todas los colectivos y asociaciones, desde donde quieras que estés, tú también puedes unirte en este clamor al Padre, unidos a María Santisíma, para que el Espíritu Santo nos dé la capacidad y la luz de salvaguardar la vida y los valores morales y naturales que la dignidad de las personas demanda y hemos recibido de nuestro Padre Dios.

También estamos rezando un rosario cada día que hacemos normalmente en las primeras horas de la mañana aunque a veces, por premuras de tiempo, lo hacemos en otras horas del día. En el icono de la Virgen, debajo del rosario de todos los viernes, puedes encontrar el rosario correspondiente a cada día.
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domingo, 3 de octubre de 2021

UN CORAZÓN CAPAZ DE COMPARTIR Y UNIR

 

El hombre no ha sido creado para la soledad. Le ha sido dada una compañera para que, unidos, den vida y formen familia. Esa ha sido la Voluntad de Dios desde el principio. Nos lo recuerda hoy Jesús en el Evangelio: (Mc 10,2-16): En aquel tiempo, se acercaron unos fariseos que, para ponerle a prueba, preguntaban: «¿Puede el marido repudiar a la mujer?». Él les respondió: «¿Qué os prescribió Moisés?». Ellos le dijeron: «Moisés permitió escribir el acta de divorcio y repudiarla». Jesús les dijo: «Teniendo en cuenta la dureza de vuestro corazón escribió para vosotros este precepto. Pero desde el comienzo de la creación, Él los hizo varón y hembra. Por eso dejará el hombre a su padre y a su madre, y los dos se harán una sola carne. De manera que...

Ahora, el hombre y la mujer piensan de otro modo. Sus corazones vuelven a estar endurecidos, seducidos por el egoísmo y el placer, y idean su proyecto de vida. No se unen, se juntan y se separan. No se quieren para conocerse, amarse y acompañarse durante caminen por este mundo. Se juntan para darse placer, intereses y utilizarse el uno del otro. Y luego, hará presencia la soledad. Es lo que estamos viendo. El hombre da la espalda a Dios. Se cree suficiente y hasta capaz de dirigir su propia vida y el mundo. Las ideologías y la bioideología son manifestaciones de esa independencia y superioridad. ¡Acaso piensan que son como Dios?

Ante este paso que el mundo está tomando, pidamos al Señor que nos dé un corazón joven, nuevo, sostenido en el amor y la unidad. Un corazón humilde y capaz de amar y compartir. Un corazón de vivir en unidad y conocimiento del ser amado para, en familia compartir solidariamente en la sociedad de la que la familia es su célula. Pidamos la unidad en el amor conyugal y fraternal para que el mundo se mantenga unido. Porque, en definitiva, el mundo es una sucesión de familias unidas. Y si se rompe la familia, también se romperá el mundo. Hay un ejemplo muy claro, que cada uno piense y mire de donde viene.

lunes, 27 de enero de 2020

LIBERTAD EN LA VERDAD

Resultado de imagen de Mc 3,22-30 por Fano
Cuando se vive en libertad se vive en la verdad, porque, la verdad nos hace libre y justos. Todo lo contrario que la mentira que disfrazándose de verdad trata de engañar y falsear la verdad y vivir en la injusticia. Es el caso de los escribas de aquella época, pero también de ahora, que esconden la mentira difrazándola de verdad y engañando al pueblo.

Tachan de mentirosa a la Iglesia de hoy, continuadora de la misión de Jesús a través de los apóstoles, porque la verdad, la justicia, el amor y la fraternidad entre los hombres perjudica sus intereses y destruye sus egoístas intenciones de vivir según sus caprichos, egoísmos e intereses. Por eso, como ayer con Jesús, hoy también muchos acusan a la Iglesia de farsante y de demoniaca.

Y de la misma forma que lo desmintió Jesús, también lo hace su Iglesia proclamando la verdad y la justicia y perseverando en la unidad con un solo Señor, nuestro Padre Dios, a través del Hijo encarnado en naturaleza humana, nuestro Señor Jesucristo. Por eso, Padre, hoy te pedimos, la unidad de toda nuestra Iglesia en una sola como Tú y el Padre son uno. Y te pedimos que nos sostengas en la unidad y en el amor fraternos, injertados en el Espíritu Santo, para mantenernos firmes y unidos en Ti. Amén.

jueves, 24 de enero de 2019

PIDAMOS POR LA UNIDAD

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Nuestro objetivo es alcanzar la unidad, pues nos hemos bautizado bajo una misma fe y un mismo Espíritu. ¿Por qué, luego, los cristianos se han separado? Diferencias que en el fondo están marcadas por el deseo de rebeldía, de poder, de desobedecer y de muchas cosas más. Nos ocurre a nosotros incluso en estos momentos dentro de nuestra propia parroquia o grupo. Siempre nos cuesta estar unidos.

Y es que la unidad nos exige despojarnos de todos nuestros pecados y diferencias. En el fondo sabemos que sólo en Dios podemos estar unidos, y sin Él, nuestros caminos se bifurcan y separan. Pidamos esa unidad y que nuestros corazones no se miren en la humanidad sino en el Espíritu de Dios, porque es Él quien realmente nos une. No exijamos el mismo Dios que, quizás nosotros fabricamos o pensamos, para otros, sino dejemos que el Dios Amor nos llegue a todos y nos una a todos.

En ese Dios Amor, no mi dios imaginado por mí, cabemos todos, porque todos somos sus hijos, y el Hijo, el predilecto y amado por el Padre, nos lo ha revelado en el silencio de la Cruz dando su vida por cada uno de nosotros y borrándonos el dios que cada uno se forma, para dejar el único y verdadero Dios que nos ama y nos espera.

Unidos en el Espíritu de Dios, a través de este medio virtual, digamos todos:  Por la unidad de todos los creyentes en Cristo, para que pronto llegue el día en que las iglesias y comunidades eclesiales seamos uno como l oquiere el Señor - C. EPISCOPAL -

martes, 28 de agosto de 2018

AMENAZADOS POR EL MUNDO

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No es fácil escapar a las seducciones del mundo. Estamos inmerso en él y nos puede, porque es superior a nuestra fuerzas. O dicho de otra forma, somos débiles y estamos inclinados, por nuestra naturaleza humana, a ceder a su poder de atracción. No podemos atrevernos a enfrentarnos a él nosotros solos. Necesitamos la fuerza del Espíritu Santo para poder rechazar todas esas tentaciones y seducciones que el mundo nos presenta.

Por eso, conscientes de nuestra pequeñez, nuestras debilidades y nuestros pecados necesitamos estar muy unidos a Espíritu Santo y, puestos en sus Manos, dejarnos guiar por Él para superar todas esas tentaciones que nos amenazan por alejarnos de nuestro Padre Dios. Necesitamos, y eso pedimos, ser perseverantes y fuertes en la oración; necesitamos ser constante y asiduos al alimento espiritual del Cuerpo y la Sangre de nuestro Señor Jesús; necesitamos estar en contacto con la comunidad y ayudarnos mutuamente. Necesitamos no quedarnos solos.

Y eso, Señor, es lo que te pedimos desde este humilde rincón, que no perdamos el norte de nuestra vida que eres Tú y que, a pesar de la vorágine en la que estamos inmersos, sepamos guardarnos, apartarnos y resistirnos a las tentaciones que nos salen a nuestro encuentro. Danos la sabiduría de saber soportar los obstáculos y de ser pacientes y nunca desesperar.

Y, sobre todo, vivir en la humildad tratando de vernos interiormente con la buena intención de limpiar toda impureza que nos amenaza, nos inunda y nos contagia, para, limpios y purificados, ver el mundo con ojos buenos, comprensivos, humildes, pacientes, justos, con amor y con fe en Ti, Señor, Camino, Verdad y Vida. Amén.

miércoles, 4 de julio de 2018

TAMBIÉN NOSOTROS QUEREMOS LIBERARNOS

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No somos más libres que aquellos que estaban poseídos por el demonio. Es posible que no lo estemos, pero hay muchas personas que estando endemoniadas no lo perciban o no se den cuenta. De cualquier forma hay mucha gente que acude a la Iglesia - exorcismo- para ser liberada de las ataduras demoniacas. De eso soy yo testigo.

Estamos sometidos por el pecado y si permanecemos en él, el demonio puede apoderarse de nosotros. Es necesario levantarse, Pecar es inevitable y se nos permite, pero para, inmediatamente levantarnos. Está prohibido permanecer y detenerse, porque es en ese momento cuando el demonio se apodera de nosotros. Tenemos un arma extraordinaria y maravillosa - la Penitencia - y ella nos permite levantarnos y continuar nuestro camino.

Creamos en el Señor y tengamos confianza el Él. Ha venido para redimirnos y salvarnos y espera que, libremente, confiemos en Él y nos pongamos en sus Manos. No se trata de ver ni de reclamar pruebas y evidencias, pues, ¿qué mérito tendríamos? Dios, nuestro Padre, quiere que seamos libre y que decidamos libremente el aceptarle como nuestro Señor y Padre Dios. 

Para eso ha enviado a su Hijo que nos ha dado razones, pruebas y realizado obras. Pero, el fundamento de nuestra fe es su Resurrección. Jesús ha entregado su Vida por cada uno de nosotros, nos ha redimido y nos promete resucitar con Él. No necesitamos nada más. Nuestra fe se apoya y fundamente en el testimonio de los apóstoles que, a través de la Iglesia nos han transmitido  la buena Noticia de salvación.

Pidamos, unidos, junto al Papa Francisco y a nuestra Madre la santa Iglesia, poner en el centro de nuestras vidas y nuestros corazones al Señor como prioridad absoluta y que nuestra fe crezca y se afirme en la unidad, la justicia, la paz y el amor entre todos los hombres y mujeres del planeta. Amén.

jueves, 17 de mayo de 2018

UNIDAD Y AMOR


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Si el amor es el pegamento que nos sostiene unido, la oración debe ser la sustancia que hace a ese pegamento adherente. Porque, no podremos amar sin oración. Jesús nos lo está mostrando al rogar al Padre por nuestra unidad, tal y como Él y el Padre son uno: «Padre santo, no ruego sólo por éstos, sino también por aquellos que, por medio de su palabra, creerán en mí, para que todos sean uno. Como tú, Padre, en mí y yo en ti, que ellos también sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado. Yo les he dado la gloria que tú me diste, para que sean uno como nosotros somos uno: yo en ellos y tú en mí, para que sean perfectamente uno, y el mundo conozca que tú me has enviado y que los has amado a ellos como me has amado a mí».

Nos lo dice claramente, Yo en ello y Tú en Mí... Sí, Señor, necesitamos estar en Ti para permanecer unidos, en y por Ti, al Padre. Y, de esa manera mostrarte al mundo, para que te conozca y sepa que el Padre te ha enviado y que les ama como te ama a Ti. Y eso nos descubre la exigente necesidad de la oración. Sin oración no podremos sostenernos unidos. Pero, no sólo una oración individual, sino también comunitaria. Porque en la comunidad tomamos fuerzas para fortalecer nuestra fe y compartir nuestra oración.

No podemos quedarnos solos frente al mundo. Un mundo que nos tienta, que nos seduce y que vive de espalda a la verdad y a la fe. Un mundo que se alimenta de la mentira y del placer, y donde el poder se mide por la riqueza y la capacidad que tengas para imponer tu voluntad. Un mundo donde todo se falsea y se presente enmascarado de hipocresía y mentiras. 

Necesitamos, Señor, estar muy unidos a Ti para poder defendernos de este mundo agitado y perverso. Y en esa confianza y seguridad, sabiendo que Tú estás con nosotros y que intercedes al Padre para que nos mantengamos unidos, caminamos esperanzados, en paz y alegre hacia el encuentro con el Padre. Amén.

jueves, 18 de enero de 2018

LA UNIDAD SE NOS RESISTE


Nuestro destino es estar unidos. Unidos en la familia, en los grupos, en los pueblos, naciones... Unidos en la Iglesia. Sin embargo, podemos decir que ese en nuestro mayor pecado, porque no logramos permanecer ni vivir unidos. La unidad, diríamos, se nos resiste. ¿Por qué? Nuestra soberbia; nuestra suficiencia; nuestro orgullo; nuestros egoísmos; nuestros..., y así tendríamos muchas cosas que limar y de la que arrepentirnos.

Pero, esa es la lucha y la batalla que libramos cada día aquellos que queremos, a pesar de nuestras pequeñeces y pecados, avanzar y perfeccionarnos. Esa es la batalla de cada día que libramos en el Espíritu Santo, que nos guía y nos orienta, y en el que confiamos que nos irá perfeccionando y liberando del pecado que nos aprisiona y esclaviza.

Porque, es muy atrayente cuando todo sale rodado, tal y como pensamos y como nos gusta. Nos atrae un Jesús que cura, que habla muy bien y dice cosas que nos gustan, que queremos y que nos hacen la vida más agradable. Frecuentemente he visto a mucha gente que salen alegres, exultantes de alegría y hasta algo apresurados a vivir la Vida de la Gracia después de vivir un cursillo de cristiandad o un retiro espiritual u otro espacio espiritual. Sus entusiasmos son notables y eufóricos, pero, luego, pasado un tiempo todo empieza a desvanecerse.  Llegada la tempestad, el cerco de la rutina, las dificultades y la convivencia de cada día, todo se vuelve duro y exigente. Entonces todo se derrumba y te preguntas, ¿es que no había fe? ¿Dónde está la confianza? ¿Eran apariencias? ¿Una fe superficial?

Jesús se hace presente en nuestra vida cuando tú lo buscas con verdaderos deseos e inquietud. Jesús se hace presente en tu vida cuando estás atento a esas estrellas, como los magos de oriente, que alumbran tu vida y que te señalan el camino a Belén. Porque, cada día nace una nueva estrella que te indica la medida de tu fe y la forma de acrecentarla. Cada día hay una nueva señal. No llamativa, ni heroica ni hermosa, quizás pequeña, escondida, humilde.

Puede ser un pequeño detalle; una sonrisa; una paciente escucha; un deseo de ayudar; una atenta mirada y delicado servicio; un pequeño sacrificio que ayuda a soportar que haya paz, y muchas otras cosas más. Cada día tienes una y mil oportunidades de amar. Pidámosle al Señor que nos dé luz para verla y vivirlas. Amén.

jueves, 23 de marzo de 2017

LA AMENAZA DEL DIABLO

No es broma, aunque mucha gente se lo toma a broma, o, simplemente, no cree en el diablo. Y eso, a parte de ser un gran peligro, porque le deja espacio de maniobra, es un grave error. Jesús empieza su misión por el desierto, y allí se enfrenta al diablo. Es como una declaración de intenciones antes de empezar su obra evangelizadora. Es como una prueba de fuego de resistencia al poder del Maligno. Y también como una lección didáctica para que tomemos nota y nos preparemos nosotros también.

Pidamos al Señor que nos dé la Gracia de también nosotros resistir a los ataques del diablo y que sepamos en todo momento resistirnos y luchar contra sus poderes y engaños. Porque, sus pretensiones son dividirnos y enfrentarnos para sembrar las separaciones, las luchas y guerras que nos alejen y siembren la muerte. Y, si miramos a nuestro derredor observamos que sucede todo eso. Incluso hasta dentro de la Iglesia, y hasta de nuestras parroquias.

Necesitamos estar unidos y en oración constante. Oración en nuestras vidas y a cada instante. Oración desde que empezamos el día hasta que termina. Oración con nuestro sentir y obrar, sobre todo en los momentos más débiles y arriesgado del día. Oración en la enfermedad, en los problemas y en todas las circunstancias de nuestras vidas.

Pidamos, estando unidos, que la fuerza del Espíritu Santo nos proteja y nos ilumine y nos llene de sabiduría para resistir las embestidas del demonio. Pero, también nosotros, pongamos todo nuestro esfuerzo en colaborar y poner en juego todas nuestras fuerzas y cualidades para, en colaboración con el Espíritu de Dios, contrarrestar todas las tentaciones e influencias del Maligno y vencerlas.

Me ha impresionado mucho esas últimas palabras del Señor: El que no está conmigo, está contra mí, y el que no recoge conmigo, desparrama. Yo, Señor, quiero estar contigo y recoger contigo, para no ir contra Ti ni tampoco desparramar. Amén.

miércoles, 18 de mayo de 2016

LO QUE IMPORTA ES SUMAR EN VERDAD



La verdad no puede negar a Jesús, porque, precisamente, Él es Camino, Verdad y Vida. Y todo aquel que suma diciendo la verdad, está hablando en favor de Jesús. Por tanto, aunque no parezca de los nuestros y no vaya con los nuestros, dejémosle porque no está en contra, sino a favor de nosotros.

Son Palabras de Jesús: "Pues el que no está contra nosotros, está por nosotros". Y nuestra propia experiencia nos lo demuestra. Solemos decir que aquel que no nos contradice y no se opone a lo nuestro es que está con nosotros, pues quien permite está a favor. Y eso es lo que verdaderamente importa. Se trata de sumar, sumar en verdad y en justicia. Se trata de denunciar la mentira y el mal, y descubrir y emerger el bien y el amor.

Y eso pedimos en esta oportunidad desde un Rincón para orar, que nos unamos y que nos respetemos. Que lo importante no es decir lo mismo, ni tampoco hacer lo mismo, ni siquiera trabajar en lo mismo. Lo que importa es vivir lo mismo, y eso consiste en amar a Dios y al prójimo como Jesús, el Hijo de Dios, nos ha enseñado a amar. 

Y quienes vivan en esa intención y en ese esfuerzo están en el camino del Señor y, a pesar de ir por otras veredas y atajos, van junto a los demás unidos en el Espíritu de Dios. Por eso, Señor, te pedimos sabiduría para entender esto y para que sepamos respetarnos, querernos, ayudarnos y, en definitiva, amarnos como Tú nos ha enseñado en tu Hijo Jesús.

Danos ese entendimiento y esa paz que nos permita aceptarnos y querernos, y llenarnos de paciencia, para soportarnos y, solidariamente, comprendernos y apoyarnos para, como uno sólo, al igual que Tú y el Padre son uno, vivamos en la paz y el amor. Amén.

viernes, 14 de agosto de 2015

EL AMOR NECESITA LA FUERZA DEL ESPÍRITU SANTO

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA UNIDA Y DEFENSA DE LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DESDE DONDE PUEDAS



No te creas que tú puedes sostener la unidad de tu compromiso matrimonial. Necesitas el concurso del Espíritu Santo y poner todo lo de tu parte, tu libertad y voluntad, y vencerás. No será fácil, pues la cruz, tu cruz, exige esfuerzo y renuncias. Y estas dentro de ese camino que tendrás que recorrer con alegrías, pero también con sufrimientos.

Ese es el verdadero y único significado de la palabra amor. El amor se descubre cuando te exige renuncias y sacrificios. Ahí se destaca y destapa. Hay verdadero amor y eso no lo rompe nadie ni nunca se acaba. Así nos ha amado y nos ama Jesús, y así nos enseñó y testimonió con su Palabra y su Vida.

Siempre está vivo el compromiso matrimonial, en el sufrimiento, en las alegrías, en las enfermedades, en las penas y en los gozos. Es un camino de lucha y de gozo para llegar al final del camino, donde sea la muerte la que nos separe. Y esa meta no la podemos alcanzar fácilmente sino injertados y unidos, en el compromiso del sacramento del matrimonio en Xto. Jesús.

Por eso, Señor, te pedimos tu Gracia y tu Fuerza para superar todos los contratiempos y las diferencias que nos amenazan con separarnos. Sabemos de nuestras debilidades, de nuestras pasiones, de nuestros egos, de nuestras apetencias e inclinaciones, pero, a pesar de todo eso, queremos serte fieles y renunciar, por amor, a todos los obstáculos y dificultades que se interpongan entre nuestros matrimonios y familias.

Danos, Señor, esa Gracia, para responder a tu compromiso de Amor. No nos será fácil porque Tú quieres nuestra colaboración, y eso significa abrirnos a la acción de tu Espíritu y entregar la libertad y voluntad que Tú nos has dado. Es eso lo que queremos y lo que humildemente, Señor, ponemos en tus Manos. Amén.

jueves, 21 de mayo de 2015

UN DIOS DE LOCURA



Tener y conocer a un Dios que me ama, me busca y quiere salvarme es la ganancia, la lotería y la dicha más grande que un hombre pueda desear y tener. Dar la espalda a esta realidad e ignorarla es el lado contrario.. La ignorancia más supina y paupérrima que un hombre pueda tener.

Y según la experiencia de este mundo, la realidad es que así sucede. Hay muchos necios e ignorantes que venden su mayor tesoro por un puñado de monedas y algunos años de vida mundana, y de días más tristes que alegres. No nos cabe mejor apelativo que el de ciegos , porque hay que estar ciegos para dejarse guiar por otros ciegos, quizás más ciegos que ellos, y no ver a este Dios Padre que nos busca porque primero nos ha amado y nos ama siempre.

Pidamos al Señor perdón por tanta torpeza y desamor. Y la Gracia de abrirnos a su Verdad y Misericordia, que nos redime y nos salva ofreciéndonos su misma Gloria y dándonos la total e inmericidad dignidad de considerarnos hijos adoptivos, coherederos con Jesús, de su misma herencia eterna.

¿Se puede recibir más? ¿Se puede estar más ciego y sometido? ¿Se puede rechazar tan alta dignidad y gloria? Pues ante el asombro del que pueda tener el privilegio de asombrarse, se rechaza. Se cambia la vida por la muerte y la perdición eterna.

Y eso nos compromete a seguir proclamando, comprometiéndonos, dándonos, rezando, y siguiendo el camino según la Voluntad del Padre. No vamos solos, y es el Espíritu de Dios quien nos conforta, nos prepara, nos alienta y nos protege. ¡Alabado sea el Señor!

miércoles, 6 de mayo de 2015

¿QUÉ SUCEDE EN MI IGLESIA?



Mi Iglesia es una. No pueden haber varias, porque sólo una es la fundada por Jesús. Y si eso es así, sería importante tratar de unirnos primero para dar testimonio de unidad. No puede ser que habiendo varias iglesias, todas mi digan que son verdadera, y me propongan un camino para llegar y vivir en Jesús.

¿Por qué no me puedo poner yo también mi propio camino? Quizás ese sea uno de nuestros mayores fallos y errores. Presentarnos seguidores de Jesús y tratar de seguirles divididos y cada uno por un lado. La historia nos descubre esas escisiones de la Iglesia que la dejan mal y separada, y de difícil imagen de ejemplo y unidad. No obstante, el mismo pueblo elegido por Dios estuvo siempre en guerras y separaciones internas.

No damos imagen de Iglesia cuando caminamos separados, pero tampoco cuando cada cual hace lo que le parece mejor. Suponiendo buenas intenciones, pero quizás intoxicadas por el propio egoísmo que nos caracteriza. Ni tampoco de mucha fe, cuando en el centro de nuestro corazón no está Jesús, y mucho menos reina en él. Eso explica que nuestra preparación sea deficiente. No en cuanto a contenido, sino a realidad vivida. 

La vida cuando se vive desde el compromiso y el encuentro con Jesús, se transparenta y se transmite de otra forma. Hay errores, ¡claro, somos pecadores!, pero las buenas intenciones dejan su sello de amor y de perdón. Y la Iglesia se nutre así de creyentes que participan en proclamar esa vida interior que viven. La liturgia, catequesis, caridad y oración se viven de forma viva entre las comunidades, que componen la unidad común, y la fracción del pan se comparte haciendo visible ese amor que los convoca y los sostiene unidos.

No parece que suceda eso, porque lo que se ve son actitudes instaladas, cómodas, asumidas e interesadas en vivir lo que cada uno le parece mejor según su pensamiento o compromiso. Se hace difícil encontrar soluciones, porque dependerán de ti y de mí. No pretendamos buscar soluciones porque quizás no las hay, sino de buscar el encuentro personal con Jesús y ver que has recibido y que puedes dar. Y en esa medida, aportando tus talentos, la Iglesia pueda encontrar su camino. 

Porque tus pasos son también los pasos de la Iglesia. Y el Espíritu Santo que la dirige cuenta contigo. Así que en la medida que tú camines bien, la Iglesia marchará también mejor. Pidámosle esa Gracia al Espíritu Santo para que, entre todos, encontremos el verdadero camino que el Padre espera de nosotros. Amén.

jueves, 12 de marzo de 2015

DIFERENCIAS, PERO NUNCA ENFRENTADOS

Jesús, centro de unidad de todos los cristianos.


Sería mala señal pensar igual. Hay que diferenciar, al menos yo lo veo así, que las diferencias nos enriquecen y nos unen, si se sabe poner en común, respetar y dejar que el tiempo vaya madurándolas. Porque sola una es la Verdad, y a esa unidad única tendremos que llegar.

Tu verdad con minúscula, junto a la mía y la del más allá, van conformando y aproximándose a la Verdad Única, y ese es el camino que todos debemos recorrer desde nuestras pequeñas comunidades, grupos o ideologías. El problema empieza cuando piensas que tú estás en posesión de la verdad y originas el cisma.

Así nacen las guerras interiores, las separaciones y la fabricación, cada uno, de su propia religión y hasta religiosidad. Así unos abrazan la designación de ministros extraordinarios de la comunión, y otros la rechazan; unos no aceptan comulgar con la mano, y otros la acogen bien. Y podemos seguir encontrando diferencias que nos distancian o nos creen mejores a uno que otros. Y hasta algunos se han marchado a otro lugar o han seguido su propio camino.

La Iglesia es el pueblo de Dios, y todos los que lo buscan, incluso los no bautizados, y los que lo rechazan o ignoran, son sus hijos. Esa Iglesia, que Jesús fundó, ha recibido la importante misión de proclamar el Mensaje de Jesús, y lo hace desde sus limitaciones y diferencias. No somos perfectos, y nuestra humanidad herida tiende al mal, y ese mal nos desvía, nos enfrenta y nos confunde. Lo importante es perseverar y cuidarnos de no dejarnos engañar y habitar por espíritu malos que puedan entorpecer la labor del Espíritu Santo.

Es ahí lo que debemos vigilar y proteger, e injertado en Él, entablar diálogos de acercamiento, de proximidad, de buenas intenciones, de comprensión, de generosidad, de misericordia y de paciencia. El fruto necesita tiempo para madurar, y la Verdad necesita tu corazón para que nazca en él la fuerza y el soplo del Espíritu Santo.

jueves, 22 de enero de 2015

AMAR SEGÚN MIS APETENCIAS



Yo sé donde me meto, se oye decir. Yo sé lo que me conviene y en dónde debo estar. Son frases que descubren nuestras intenciones y la manera que los hombres entienden el amor. Amar no será nunca un sentimiento, aunque para amar sentimos, ni tampoco una apetencia o gusto. Amar es un compromiso por el que yo descubro que sólo amando puedo ser feliz y alcanzar el gozo eterno.

Los sentimientos sólo nos descubren que estamos vivos. Hoy siento esto, pero mañana puedo sentir de otra forma. Por eso, cuando los sentimientos nos dicen que se ha acabado el amor, nos están mintiendo, porque el amor no es un sentimiento sino un compromiso. Un compromiso, que, si que es verdad, tuvo su comienzo en un sentimiento de enamoramiento y atracción, pero que luego se transforma en responsabilidad que nos exige paciencia, soportar, dominio, comprensión y unidad.

El amor es verdadero amor cuando es capaz de querer en los momentos de exigencias de perdón, de dificultades, de soportar obstáculos, de comprensión, de diferencias, de...etc. El amor no termina, porque si termina significa que nunca lo hubo ni existió. En su lugar estaba el sentimiento, la apetencia, la satisfacción, la soberbia, el poder, la riqueza...

Por eso, vivir el amor exige estar entre los otros y unidos a los otros. Así, el Señor que lo sabe todo nos invita a la unidad, a ser uno como Él y el Padre son uno. Y esa exigencia de unidad nos interpela y nos llama al amor.

Pidamos al Señor que nos ilumine y nos descubra la necesidad que tenemos de soportarnos, de querernos, de comprendernos y, sobre todo, de ir juntos hacia la Casa del Padre. Amén.

viernes, 17 de octubre de 2014

EL HOMBRE, EL REY DE LA CREACIÓN

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA UNIDA Y DEFENSA DE LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DONDE PUEDAS 




Todo ha sido creado para provecho y uso del hombre. Es el hombre la criatura preferida y amada por Dios. Pero al mismo tiempo, el hombre es la única criatura que puede rechazar a Dios. Ha recibido de su Creador la libertad de elegir su propio destino: "Morir o vivir eternamente".

Es de suponer que su valor ante Dios es superior a todo lo creado. De ahí que Jesús nos advierte y nos llama la atención: ¿No se venden cinco pajarillos por dos ases? Pues bien, ni uno de ellos está olvidado ante Dios. Hasta los cabellos de vuestra cabeza están todos contados. No temáis; valéis más que muchos pajarillos».

Sin embargo, muchos elegimos rechazarle y seguir nuestros propios caminos según nuestras propias ideologías. Eso nos descubre lo que ocurre: unos manipulan a otros y los someten a sus poderes e intereses. Acotan la sabiduría que guardan para ellos no dejando que otros puedan acceder. Les interesa ser ellos los maestros y los que dictan las leyes y el camino a seguir.

Y hoy ocurre lo mismo. Muchos levantan sus voces para dictar caminos y leyes, y sólo Dios es nuestro Señor, verdadero Camino, Verdad y Vida. Nuestro camino es la Palabra de Dios, la que nos alumbra y nos dirige en la acción del Espíritu Santo. Es Él el enviado para dirigir a su Iglesia y a Él nos encomendamos poniéndonos a su disposición y entrega.

¡Oh, Señor!, danos la sabiduría de saberte escuchar con un corazón abierto, desprendido, dócil y disponible para seguir tus mandatos de manera firme, decidida y unidos en tu Iglesia. Amén.

Nota:  después del paréntesis del IV Encuentro de Blogueros con el Papa, reanudamos hoy nuestro acostumbrado rezo del santo Rosario pidiendo por la defensa de la familia, la prohibición del aborto y,  ahora, durante este año, por los frutos del Sínodo de la Familia.

viernes, 13 de junio de 2014

EXPERIMENTO QUE NECESITO LA FUERZA DE TU ESPÍRITU

HOY A LAS 09:00 HORA PENINSULAR, 08:00 HORA CANARIA, REZO DEL SANTO ROSARIO POR LA UNIDA Y DEFENSA DE LA FAMILIA. ÚNETE A LA HORA QUE PUEDAS Y DONDE PUEDAS 




Emprender un camino sin Ti Señor es la mayor locura que puede cometer un hombre. Nuestra caída, tocados por el pecado, nos hace vulnerable a todo lo que el mundo nos ofrece. Y no es que el mundo sea malo, sino que nuestro corazón, atormentado por el pecado, desborda nuestras pasiones y descontrola nuestra voluntad dejándola a merced del Príncipe del mundo.

Entonces, estamos perdido y sometidos a quebrantar nuestros compromisos y fidelidades. Necesitamos urgentemente los dones de tu Espíritu, Señor, para poder hacer frente a los efectos del pecado y poder someter nuestro cuerpo y nuestro corazón a nuestra voluntad en tu Voluntad. Porque todo hombre siente que no hace bien cuando rompe su palabra y compromiso con su mujer, y viceversa.

La fidelidad está grabada en el corazón del hombre y la mujer, y cuando faltan a ella sienten vergüenza y se esconden aunque las apariencias demuestren lo contrario. Es posible que muchas circunstancia nos empujen a ello, pero también es verdad que no nos esforzamos lo necesario ni ponemos mucho de nuestra parte. Eva sedujo a Adán, pero éste se dejó también seducir.

En todo rompimiento y deslealtad hay, no sólo un culpable, sino dos culpables, y necesitamos que Jesús viva entre nosotros para que en su Amor sepamos también nosotros amarnos. Por eso, pidamos al Señor que su Espíritu reine en nuestro compromiso matrimonial y nos ilumine para ser cauce de unidad y de amor que fortalezca nuestras vidas y abra nuestros corazones al verdadero y único amor.

jueves, 23 de enero de 2014

COMPARTIR REQUIERE COMUNIDAD



Cuando te propones compartir tienes que buscar con quien o quienes. Eso te lleva a vivir con otros, pues compartir es "partir con". Descubrimos entonces que es lo mismo que amar, pues para amar necesitas buscar a los amados, y eso también requiere otros, donde tú puedas hacer vida tu amor en servicio y entrega disponible. De una manera u otra, tanto el compartir como el amar te conducen a descubrir la comunidad.

Jesús nos ha creado y amado para que nosotros, en la comunidad, también amemos y por el amor nos parezcamos al Señor. Esa es nuestra semejanza: "El Amor", pero un amor puro, desprendido, servicial y gratuito. Y eso no sólo no es fácil, sino que imposible para nosotros solos. Porque siempre lo mancharemos buscando nuestro egoísmo, nuestro interés o  tranquilidad de conciencia. Nunca lo haremos de una forma tan desinteresada y escondida que nadie se entere. No resistimos que sepan que somos buenos.

La pureza de nuestro amor necesita la asistencia del Espíritu Santo y la Gracia de nuestro Padre Dios. Y sólo, injertado en el Señor Jesús seremos capaces, por la Gracia recibida en el Bautismo, de vencernos y amar al único estilo verdadero: el de nuestro Señor Jesús.

Padre Bueno, por los méritos de tu único y verdadero Hijo Jesús, danos la Gracia de ser capaces de amar como Él nos amó.

viernes, 24 de mayo de 2013

UNIDOS EN TI, SEÑOR



Sólo la presencia de un verdadero amor es lo que determina si una unión ha nacido de Dios o es un mal entendido de nuestro propio egoísmo que se busca a sí mismo sin importarle nada más. Así las cosas, lo lógico es que ese castillo de falso amor se derrumbe a la primera de cambio. 

Y luego a mentir y a buscar justificaciones que solo pretenden acomodar la realidad a mis gustos y comodidades egoístas. ¡leyes a mi servicio hasta que cumplan con mis intereses! Y eso será la causa de una cadena de uniones apoyadas en falsedades y mentiras, que solo dejan tras de sí vacío y desorden. Sabemos que eso no es así, pero cerramos los ojos a la Verdad.

Queremos ser fieles a la Verdad, Señor, y te pedimos que tu Palabra de unidad se cumpla en nosotros, que seamos dos en uno solo, y que nuestro amor no se pare, sino crezca en entrega, en servicio y amor que viene de Ti, el Camino, la Verdad y la Vida.

Sería enriquecedor y hermoso que cada uno deje su petición de unidad en los comentarios. Todos saldremos confortados y beneficiados. Gracias.


jueves, 24 de enero de 2013

EL AMOR NOS UNE

 

Cuando amamos nos estamos también uniendo, pues el amor es signo de unidad. No se puede amar si no se está unido, y cuando amas desaparecen las barreras que separan. El amor borra las diferencias y las desigualdades; el amor allana e iguala los caminos y hace que los pensamientos, aún siendo diferentes, se respeten y sean fraternos los unos con los otros.

Por eso, a pesar de nuestras diferencias y nuestras desigualdades pidamos al Señor que sane nuestros corazones heridos y nos dé la capacidad y la fuerza de amarnos y unirnos, porque solo el amor hará que seamos uno, como lo son el Padre y el Hijo.

Danos, Señor, un corazón de carne, sensible a los sufrimientos de los demás y capaz de renunciar a los egoísmos personales, para servir y unirse a los hombres más marginados y desheredados de este mundo. Danos un corazón humilde y lleno de vida para ayudar a todos los niños nacidos en el vientre de sus madres, a nacer a la vida de este mundo. Amén.